Consenso Ilusorio

Capítulo V

¿Nunca se preguntaron porque se enamoran del amor que más lastima? ¿y por qué hablo de amor en vez de persona? Porque lo lógico seria enamorarnos de una persona con ciertas características psíquicas y fisiológicas. Pero muchas otras veces,ese amor es irracional y se aleja más allá de la persona, de una conducta. Nos aferramos y nos enamoramos de una oportunidad que aunque nos dañe, se hace presente y nos aferramos por el mero temor a la soledad. Eso me pasó con el Sr. O (así lo llamo yo para hablar del innombrable que me rompió el corazón aquel sábado por la noche con su silencio). Lamento ponerme pesada con el concepto, pero lo único que tengo un jueves por la noche es una taza de café y la catarsis que me mantendrá ocupada las próximas tres o cuatro horas de esta madrugada, calculo. La desesperación se hace presente en esta horas, donde me ahogo en los recuerdos y tomo todas sus fotografías y analizo pedazo por pedazo, el contorno de su boca, sus ojos, su cabeza, sus brazos y desearía estar estrechándolo en mis brazos para sentir el espesor de sus huesos. Y me pregunto porque no iré al psicólogo y alimentar esta sicosis y resolver el enigma, pero me es más fácil, desgarrador y solitario escribir estas lineas en mi diario y recordar todos los momentos que lo tuve frente  a mis ojos y fui feliz.

Y hablé con todos, no había persona que no se me interponga, que no le contara la historia, que me dijo, que le dije, cómo me miró, cómo lo miré y nadie sabe que decir. Nadie entiende el punto de esta dulce locura que me mantiene encendida y latente en mi vacía vida. Y menos mal que no conté todo - recuerdo -, no podría explicar las interminables noches que le hice el amor en mi mente y recé para que sea mío en algún momento del largo camino de la vida. Y aún sigo sin poder decir que me mantiene atada a su ser, si no es por puro amor divino, porque no ha demostrado ni una pizca de su dulce, amargo corazón. No conozco su voz interior y no conozco nada que tenga que ver con él, más que la vestimenta que lleva puesta, que es lo único que exterioriza. Sé que pasarán los años y continuaremos en este deseo trabado de ambas partes, de una parte inconclusa de nuestra historia. él tiene la llave para romper sus cadenas y alivianar su cruz. En decidir si se la banca solo o quiere compartir el peso conmigo. Estoy más que dispuesta, es el amor de mi vida y los erá mientras yo lo disponga, o hasta que el destino lo declare. Y aunque este hombre se disponga a jugar conmigo, estoy dispuesta a correr el riesgo, porque nada desee más en la vida que ser sujeto de experimento, de rendirme en sus fauces y hacerme la cosa más viva del planta. porque solo él lo logra.

Y en este baile que ninguno de nosotros supo bailar, es el consenso ilusorio que no le deseo a ninguna pareja en la Tierra. Eel único consenso fue que nosotros nos gustábamos lo suficiente para mantener el contacto pese a los años, y lo ilusorio, como para creer que él me amaba de verdad. Sólo recalco que desde que el Sr. O entró a mi alma, le dió esperanza a mi vida.