Siempre he sido la buena niña, la que nunca decepciona a nadie, he sido una buena hija y nuna he llegado a hacer nada malo.
Pero hoy, después de ver como mi novio se estaba tirando a mi mejor amiga he llegado a la conclusión de que las cosas malas siempre suceden a las buenas personas.
Pero ya estoy cansada de que se rian por mi forma de ser, de mi forma de vestir y de que me llamen nerd de mierda o puta sin que yo les molestara.
Ahora si, me llamarán puta, pero será con un buen motivo. La Emily que todos conocian ha dejado de existir. La nueva Emily sera diferente, usará a los chicos como si fueran bragas, que te las quitas cuando ya no son de utilidad.
Hoy me levanté muy temprano para decirle adiós a mi antigua yo para darle la bienvenida a la nueva Emily.
Me deshice de mis gafas wayfarer que se me han hecho tan pesadas estos ultimos años para ponerme unas lentillas. Al mirarme al espejo se me veía bien sin gafas.
Me fije en mi pelo rubio: lo tenia muy largo y me daba un aspecto de tonta junto a mis ojos azules.
Entonces se me ocurrió algo. Mi madre para disimular sus canas se ponia un tinte castaño que se encontraba en el cajón del baño. Lo cogí y empezé a seguir las instrucciones.
Transcurridos 45 minutos me aclaré el pelo y me miro en el espejo. Tampoco me quedaba tan mal y me daba un toque de chica mala. Pero aún tenia que cambiar unas cuantas cosas como mis ojos, eran bonitos pero se veían aburridos.
Recordé que me regalaron una caja de maquillaje para mi cumpleaños el año pasado y no lo usé ni una vez. Fui a mi habitación y abri el armario, aún estaba alli. Volví al baño para dar un toque final a mis ojos. Ví un programa de moda donde enseñaban a maquillar para diferentes ocasiones. Cogí un lápiz negro para hacerme una linea sobre la parte superior de mis ojos y la parte inferior. Me miré en el espejo y me fijé en mi mirada. Si las miradas matáran, mi reflejo ya estaria muerto.
El toque final es el vestuario. Me decidí por unos pantalones negros ajustados que resaltaban mi figura, desde que mi madre me los compró nunca me los puse, pero hay una primera vez para todo no? Para la parte superior elegí una camiseta blanca muy ajustada que solamente me ponia por dentro y una chaqueta de cuero. Al acabar me miré en el espejo.
SIMPLEMENTE INCREIBLE.
si 24 horas atras me hubieran dicho que me vería así les diria que habrán tenido un mal sueño y que despertaran ya, pero ahora al mirarme al espejo solo puedo decir "INCREIBLE"
Me moria de ganas por ver la cara de jayden, ese idiota no sabe lo que le espera y mucho menos lo que ha perdido.
* * *
Al llegar al parking del instituto estacioné la moto y bajé. Cuando me quité el casco y se me alboroto el pelo, vi que algunas personas se giraban a mirarme.
Con una sonrisa de victoria las mire y empezé a cruzar la calle hacia la puerta hacia la puerta del instituto.
Estaba caminando por el pasillo cuando vi a jayden y a caitlyn besandose junto a las taquillas. Jayden ponia sus dos manos en las taquillas para cerrarle el paso mientras Caitlyn sujetaba los libros contra sus pechos. Parecía una escena de película. Me acerque a ellos y aplaudí dos veces.
_ Jayden! - Cuando capté su atención me miro de cabeza a los pies_ Podrías pasarte a recojer tus calzoncillos de mi casa? Huelen a mierda- Jayden y Caitlyn se miraron y volvieron a mirarme._ Y Caitlyn, no uses el rojo, hace que te parezcas a una puta- y con eso segui mi camino hacia la clase dejandolos con la boca abierta.
