-¿¡John puedes dejar de cantar "libre soy"!? -grite molesta desde mi habitación mientras intentaba concentrarme en el libro que tenia frente a mí.
-¡No! -grito y volvio con su canto "angelical". - ¡Libre soy, libreeee soy! ¡No puedo ocultarlo maas!. - seguía la letra de la canción mientras la melodía le seguía de fondo.
Ya fue suficiente escucharlo cantar 1 hora, ¡1 HORA! La misma canción.
Cerre el libro y lo deje sobre mi escritorio, agarre una de mis zapatillas que se encontraba en el suelo y baje las escaleras, entre al cuarto de john y me lo encontre arriba de su cama aun cantando.
1...2...y....¡3!
Conte mentalmente y le tire la zapatilla con todas mis fuerzas haciendo que esta se estrellara en su rostro dejandoselo de inmediato de un color carmín, John retrocedio unos pasos haciendo que se cayera de la cama,y azotara su espalda en el suelo y se golpeara la cabeza contra la pared, lo mejor de eso, es que dejo de cantar.
Lo sé, soy una excelente amiga.
-¿Vas a dejar de cantar? -pregunte mientras volvia recoger mi zapatilla y miraba a John quien acariciaba su nuca con su mano izquierda y hacía muecas.
-¿¡Estas loca?! - grito a la vez que se volvia levantar y se acercaba a mí furioso. - ¡Podrias de haberme matado!
-Creeme que yo y Ash hubieramos muerto antes por tu canto - dije mientras desconectaba el celular de John de los parlantes - ve el lado positivo, les salve la noche a los vecinos de abajo y quizás hasta al mundo de quedar sordos.
-Hey, no es culpa mía de que cante hermosamente bien pero se escuche mal - dijo mientras se dejaba caer en la cama y me miraba divertido.
-¿Por que me miras así? - dije confusa. El no pone esa cara por nada, algo debe de estar pensando, y no es bueno.
-Nada, solo..... - se levanto y salio de la habitación rapidamente, sin darme tiempo de reaccionar.
¿Pero que carajo?
John después de un rato volvio a aparecer con una caja de color cafe claro, la abrio y me tiro el contenido, era peludo y.....¡Una araña! O no joder.....¡Es gigante, es una Tarantula!
Antes de que la araña se estrellara en mí, la golpee con la zapatilla y esta fue a parar en la cabeza de mi amigo.
-¡Ahhhh quitamela, quitamela! - gritaba John desesperadamente mientras daba vueltas por toda la habitación.
No pude más y comencé a reirme alocadamente.
¿A quien se le ocurre traer una araña y para más que le tenga miedo?
Si, ese es John, un imbécil, o un poco más que eso.
-¡Joder matala, me quire deborar! - John comenzó a exagerar y sus gritos se hacian cada vez mas audibles, pobres vecinos. -¡Porfavor Mery!
No pienso tocar esa maldita araña gigante, el fue el imbécil que la trajo, ahora que se las arregle solo. Además me la quería tirar a mí, esta es mi venganza.
Debo de decir, que el karma te hara mierda.
Mi subconciencia tenía razón, pero bueno, después me lamentare, por ahora, disfrutare de la dulce venganza de ver a John orinarse en los pantalones.
Después de un rato de reirme tanto de ver a John gritar como nena llego Ashley a la habitación con un rostro de asesina en serie, vi la hora en el celular de John y eran exactamente las 10:36pm.
Oh no, Ashley nos matara. Bueno, a John.
-¡Pedazo de retrasado! -grito molesta Ash mientras caminaba hacía John el cual intentaba sacarse la enorme y peluda araña gigante de la cabeza sin resultado. -¡Seras nenita John! - Ashley tomo la araña entre sus manos y la coloco en su hombro con total tranquilidad mientras la acariciaba.
Yo, ni aunque me pagaran tocaría una de esas horribles cosas. NUNCA.
-Es solo una linda araña, son unos miedosos - nos reprocho - ahora venga, a dormir. Si los vuelvo a oir gritar, juro que les metere un puñado de cucarachas en la boca a los dos y saben de que soy capas de hacerlo.
-¡Cucarachas no! - gritamos yo y John al unisono.
Okey, le tenemos un poco de miedo a los insectos, solo un poco.
(....)
Después de que John fuera salvado por Ash de la araña mi amiga decidio quedarsela como mascota y le puso de nombre "peludita", original para una araña.
Me lancé en la cama con mi pijama ya puesto y volvi a ponerme los audifonos para undirme en las canciones.
Abri facebook y comence a ver el inicio, lleno de fotos, videos, estados y vines, algunos muy divertidos.
Así estuve hasta que fueron las 1:45 am y el sueño ya me estaba haciendo efecto, mis ojos se cerraban de a poco mientras la melodia de "impossible" de James Arthur retumbaba en mi oidos. Sin más los cerre y un fondo negro me cubrio completamente, después de eso, me dormí.
*
La alarma del celular retumbo como los mil demonios en mis oidos y me sobresalte, me quite los audifonos y pase mi mano por mi cara varias veces para así poder acostumbrarme al jodido sol que alumbraba toda la habitación.
Nota mental: cerrar las persianas para no despertar con todo el sol molestandote la visión.
Me levante a paso lento hasta llegar a mi armario.
hoy día haría calor así que me decidi por usar una falda de color negra que me llegaba a medio muslo, unas pantis del mismo color transparentes y una blusa olgada de color blanca que al igual que las pantis era algo tranparente y dejaba ver mi sujetador negro, para completar mi vestimenta me coloque unas vans floreadas.
Tome mis cosas y las heche en la mochila rapidamente, agarre el cepillo de pelo y comencé a desenredar mi cabello castaño, dejandolo caer por sobre mi hombro con breves ondas en las puntas, me quite el maquillaje corrido de ayer y lo remplaze por otro menos llamativo, hise una delgada linea arriba de mis parpados con el delineador y después aplique un poco de labial rojo el cual con mi dedo fui disminuyendo el tono tan fuerte, quedando al final un color rojo palido.
Baje por las escaleras ya lista. Abajo se encontraban Jonn y Ash desayunando tranquilamente mientras veian una pelicula en la televisión frente a ellos.
-Buenos días - les dije a la vez que me sentaba con ellos en la mesa para comer mi desayuno.
-¡Mery vete a cambiar de ropa ahora! - grito John al verme. Oh no, que no empieze con su sobre protección. -¿¡A donde crees que vas con esa ropa eh?!
-A la universidad - dije restandole importancia mientras le daba un mordisco a mi emparedado, el cual debo de decir que sabia riquisimo.
-¡No iras así! - se levanto y se coloco al lado mio - ¡Puedes llamar la atención de un violador vestida así!
-¡Deja ser tan exagerado John, no me pasara nada y lo sabes! - le respondi en el mismo tono.
-Eso es verdad - me apoyo Ash mientras me apuntaba con un cuchara. - Mery sabe cuidarse sola, y puede vestirse como se le de la gana, se ve linda vestida así - me dedico una sonrisa mientras John suspiraba rendido.
-Solo las quiero cuidar - dijo para después abrazarme. Y ahí esta el John tierno y muy dulce. - son mis amigas joder, no quiero que ningún gilipollas les haga daño.
-Tranquilo - dijimos
Ash y yo al mismo tiempo.
Comprendo a John, perdio a toda su familia en un accidente de avión, perdio a su hermana de solo 4 años, Clary era una niñita extremadamente tierna y alegre, no se merecia una muerte asi y John no se merecia haberla perdido de esa forma, nosotras somos las unicas amigas que tiene y que lo hemos apoyado, así que comprendo su sobre protección aunque aveces llega a ser un verdadero dolor de cabeza.
-Okey, ahora vamos a la universidad - dijo John tomando su mochila al igual que Ash.
Al salir nos subimos a la camioneta negra de John, esta algo vieja pero es de confianza además esta llena de recuerdos y eso aumenta su valor emocional, bastante.
En el trayecto fuimos recordando el pasado, la primera vez que nos conocimos los 3 y las locuras que haciamos entonces. Ash comenzó a cantar conmigo mientras John manejaba y nos sonreia de una manera algo melancolica, hemos crecido bastante, eso es obvio, pero lo que más nos costaba digerir era que cada uno tendría que tomar su propio camino más adelante.
Llegamos a la Universidad, y bajamos de la camioneta, automaticamente las plasticas llegaron rapidamente al lado de John mientras le coqueteaban, Ashley y yo rodamos los ojos y entramos, teniamos 5 minutos restantes para poder entrar nuestras respectivas salas así que me decidi a acomopañar a Ash a su clase para después irme a la mia la cual no quedaba muy lejos de allí.
-Nos vemos después - dije mientras me despedía de Ash con un beso en la mejilla.
-En la cafetería - dijo sonriente mientras desaparecia de mi visión al entrar a la sala.
Segui mi camino tranquilamente hasta mi clase, no tenia apuros, después de todo el profesor de Lengua estaba con licencia y nos dejaban con una suplente la cual lo unico que sabia hacer era dormirse y darnos el tiempo libre.
Al entrar a la clase vi a la suplente roncando placidamente en el escritorio como lo suponia, me dirigi a mi pupitre y me deje caer en la silla a la vez que me colocaba los audifonos y los conectaba con mi iPhone, puse la canción "The side of paradise" y cerre los ojos, mientras escuchaba la canción.
En el coro de la canción alguien me arrebato los audifonos y el celular,levante la vista y me encontre con Jackson. El me miro con una sonrisa resplandeciente digna de un comercial de pasta dental. Le devolvi la sonrisa para despues arrebatarle lo que me acababa de quitar hace unos momentos. Jackson se sento a mi lado y suspiro.
-¿Como haz estado, bella? - apreto una de mis mejillas con delicadeza.
-Bien. ¿Y tu novio? - pregunté devolviendole el gesto a la vez que esbozaba una sonrisa.
-Por ahí derritiendo vaginas - hiso un gesto con la mano dando a entender que le daba igual.
-¿Como siempre no? - me reí junto con Jackson.
-Exacto - se recosto en su pupitre mientras me observaba detalladamente.
Yo le devolvi la mirada de igual manera. La bulla de fondo cada vez se hacia más fuerte y los rumores eran cada vez peores, realmente la universidad es mas un lugar donde las personas inventan cosas de otras en vez de estudiar para un futuro "mejor", aunque con la politica, el gobierno y esas cosas, el país y las personas de todas formas son un mierda.
Me recoste al igual que Jackson sobre mi mesa y me concentre en escuchar algunos de los rumores que se propagaban por la clase rapidamente. Un grupo de chicas al final de la sala hablaban sobre las tiendas de ropa mas caras y si quedaban para salir un dia de estos al mall, deje de escuchar esa conversación ya que no le encontraba nada de interesante, mi atención se quedo sobre un grupo mixto el cual hablaba sobre el profesor de biología y.....¿De mi?. Jackson se removio un poco en su asiento para seguido de eso levantarse de su asiento y avanzar hacia el grupo mixto, golpeo la mesa molesto y todos se concentraron en él, ya no se escuchaban los rumores y murmullos, estaba todo en silencio. El grupo miraba a Jackson con nervios y yo espectante de lo que diría mi amigo no dije ninguna palabra.
-¡Dejen de decir esas mierdas de Mery! - grito molesto - ¡Ella no esta ligada con ese profesor playboy ¿captan?!
Los chicos y chicas del grupo miraban a Jackson avergonzados y otros sorprendidos por la reacción que tuvo frente al rumor. Jackson se devolvio a su pupitre al lado del mio y acción seguida se dejo caer sobre la silla, giro su cabeza hacia mí y sonrió, yo le correspondí con una sonrisa torcida de vuelta para después negar con la cabeza.
-Eres un gilpollas - golpee su hombro amistosamente.
-A su servicio.
*
Converse con Jackson lo que quedaba de clase y le comente lo del profesor de biologia y sus coqueteos, por lo cual Jackson reacciono con disgusto al igual que John cuando lo supo. Habían tocado el timbre de resceso asi que tome mis cosas y sali de la sala junto con mi amigo para dirigirnos a la cafetería, en el trayecto Jackson me conto sobre su noche romantica con Adam en londres y como se arruino de un momento a otro cuando a él le dieron ganas de orinar en pleno acto sexual. Me rei como lunatica y Jackson me golpeo con su codo en mis costillas algo fastidiado. Entramos a la cafetería y nos sentamos donde se encontraba Ashley y John disfrutando de un café bien cargado.
-¡Jackson, chico por dios estas DI-VI-NO! - grito Ash al ver a Jackson, lo abrazo y le dio un casto beso en los labios.
John gruño molesto, le mire confundida por su reacción.
-¿Te pasa algo? -me sente al lado de John pero el no me miro, solo se fijaba en como Ashley conversaba animadamente con Jackson.
-Nada - dijo, tomo sus cosas y se levanto furioso, no se despidio y salio de la cafetería como alma que lleva el diablo.
Me encongí de hombros al ver la mirada de interrogación de Ashley y Jackson.
-¿Que le paso a John? - Ashley le dio un sorbo a su café.
-Ni idea, debe de estar en sus días - le comenté.
-John esta extremadamente guapo - confeso Jackson - si no fuera por que estoy felizmente comprometido, me lo tiro.
-¿A quien te tiras eh? -dijo un voz ronca y sexy detrás de Jackson, mi amigo se volteo y sus ojos brillaron de una manera realmente tierna. Era Adam.
-Pues a ti mi amor - dijo Jackson, se levanto y junto sus labios con los de Adam en un beso realmente conmovedor.
Ashley y yo suspiramos como dos tontas, nunca hemos podido liarnos de esa forma con algún chico, somos un caso especial, pero la cosa es que, los hombres son todos iguales al querer una vagina entre sus piernas . Y bueno, Ash no es de esas y yo tampoco, somos reservadas en ciertos aspectos, excepto para fiestas, ahí somos unas verdaderas borrachas, si no fuera por John, no sé que sería de nuestra virginidad.
Ash volvio a darle un gran sorbo a su café mientras miraba a un lugar en especifico de la cafetería, le segui la vista y me detuve en el punto exacto donde se encontraba Scott y su grupito de amigos intelectuales, arquee las cejas y me voltee a ver a mi amiga. Después volvi la vista nuevamente hacía Scott el cual estaba sonriendo como siempre y comentaba algunas cosas con el chico que se encontraba a su lado, Scott revolvio su pelo algo ondulado y golpeo a un chico de cabellera castaña oscura en forma amistosa, Scott llevaba puesto unos vaqueros desteñidos, unas deportivas de color negras y una camisa a cuadros de color azul remangada hasta los codos, dandole un aspecto de típico rompe corazones.
-¿Scott? - dije confusa, esperando alguna respuesta de parte de Ash.
Mi amiga dejo de darle sorbos a su café para concentrarse plenamente en mí, su mirada estaba algo perdida, me dedico una sonrisa y paso su manos repetitivas veces por su cabellera rubia ondulada acomodandola de una lado hacía otro como acostumbra hacer cuando esta nerviosa.
-Es lindo - confesó - ¿a que sí?
-Pues sí, pero no me los imagino liados - le comente de la manera mas sincera - no es tu tipo.
-Me gusta - dijo, para despues volver a sorber su café.
-Pero si apenas lo haz conocido - la reproche por su confesión poco accedible. - no puedes decir que te gusta.
-No me refiero a ese gustar, nieves - dijo Ash en un tono desesperado - solo me gusta, ¿vale?
-No me digas nieves - resoplé molesta - y no, no me vale.
-Pero antes bien que te agradaba que te dijieran nieves - reclamó divertida.
-Cambiemos de tema - hise un ademan con la mano.
- Bueno, ¿y que paso con lo del profesor? - puso una mirada coqueta sobre mí.
-Es tiempo de que lo superes - le sonreí.
-Pero si esta bien guapo, yo encantada con que me coquetee aquel bombón - se mordio su labio inferior y rió.
-Eres un caso perdido - le confese, dejando salir una risa.
-Ya era hora de que te dieras cuenta, nieves - pronuncio mi apodo lentamente sabiendo que eso me iba a cabrear - estas algo lenta.
-¡Que no me digas nieves! - espeté.
-¿Por que no? - dijo, confusa enarcando sus cejas.
-Simplemente por que ya no me gusta - mentí.
-De todas formas te dire nieves - se encogio de hombros - va contigo, tu piel es como la nieve, blanca.
-¿Estas de broma que la nieve es blanca? - dije, en un tono burlón.
-No jodas, nieves - dijo divertida, mientras me sacaba su delgada lengua.
El timbre resonó por toda la cafetería haciendo que automaticamente todas las personas presentes se levantaran de sus respectivos asientos y salieran en busca de sus salas de clases, tome mi mochila y la colgue en mi hombro al igual que Ashley, el conjunto de gente que se formo era un caos, yo estaba apretada ante tantos cuerpos y Ash, ya no estaba a mi lado. Me pisotearon y hasta llegaron a rozar el trasero, maldije a todas las persomas que se me cruzaban hasta que choque con alguien que ni se inmuto por mi golpe, levante la vista de a poco, recorriendo su pecho cubierto por una camisa negra que se ajustaba a él, su cuello, y por ultimo su rostro bien definido, una mandibula digna de un hombre adulto y fuerte y sus facciones eran iguales de duras, su cabello era rubio labios no tan gruesos y sus ojos, eran tan celestes.
Me parecía conocido a alguien. Pero, ¿A quien?
-Permiso -dije, y empuje al chico hacia otro lado.
Baje mi falda al notar que por los roces de la gente se había levantado a una altura nada prudente, y seguí mi camino tranquilamente hasta la sala de clases, ahora tenía calculo y el profesor era un verdadero dolor se cabeza.
*
Estaba sentada en mi pupitre escuchando, o mejor dicho, intentando entender lo que decia el profesor frente a la pizarra mientras señalaba unos ejercicios, que la verdad, ni puta idea tenía de como resolverlos.
Comencé a garabatear con mi lapiz unas cosas en la hoja de mi cuaderno mientras apoyaba mi cabeza en la palma de mi mano. Estuve así toda la clase hasta que por fin, el profesor la dio por terminada y todos nuevamente volvimos a tomar nuestras cosas y salimos de allí para irnos de la Universidad.
Busque a mi amigos por largo y angosto pasillo que se encontraba frente a mí, las miradas de algunos chicos se detenian en mi y otros se detenian solo para silbarme o decirme que otro cliché piropo. A lo lejos, en la salida principal divise la rubia cabellera de mi amiga y a su lado John que la miraba detenidamente. Apure el paso mientras sentía como alguien estaba atras de mí pisandome los talones. Sus pasos eran firmes y resonaban en mis oidos, me di vuelta furiosa de que me siguiera y lo encaré.
-¿Se te perdio algo? - espeté, me cruce de brazos esperando su respuesta.
-¡Nieves te estabamos esperando mujer! - grito molesta Ash, apareciendo a mi lado a la vez que su reacción de sorpresa se estampo en el rostro al ver al chico frente a mí.
Al rato llego John quien rodeo su brazo en mi hombro y beso mi frente, le sonrio de mala gana al chico el cual no les presto atención a ninguno de mis amigos, solo me miraba atentamente, sin parpadear siquiera.
-¿Quien es? - preguntó Ash, mientras lo señalaba.
-No lo sé, no lo conosco - confesé.
El chico sonrio y paso su mano lentamente por su cabellera alborotandola, dejando caer un mechón ondulado de color rubio sobre su frente, tenia un aspecto jodidamente sexy y su sonrisa era capas de cautivar a cualquiera que se le cruzacé.
-Lindo escote - señalo mis tetas para después marcharse con esa sonrisa arrogante.
Un momento, ¡Ya se!, se parece a Carter, tiene las mismas facciones y los mismos modales agocentricos.
¡Joder sin no fuera por sus ojos, serían gemelos!
-¡Te dije que no deberías de haber venido vestida de esa forma! -grito John, moviendo los brazos de un lado hacía otro.
-Puedo vestirme como yo quiera John - dije de forma seca.
John me dedico una mirada intimidante pero después nego con la cabeza y miro a nuestro alrededor, para ser mas exacta, a los chicos que se encontraban babeando.
-¡El proximo gilipollas que le mire las tetas o el culo a Mery les rompo los cojones aquí mismo! - grito John a todos los chicos que se me encontraban mirando.
-John no hagas una escena - le susurre para después golpear su hombro.
-Hare la escena que se me de la gana, no soporto que te miren de esa forma - dijo, furioso.
-John - tome entre mis manos su cara y nos miramos fijamente - si te hace sentir mejor no me vestire nunca mas así, ¿Esta bien?
-Esta bien. - suspiro y nos tomo de la mano a mí y a Ash.
Cualquiera que no conociera nuestra relación de amistad pensaría que somos un noviazgo algo moderno y esas cosas.
Nos volvimos a subir a la camioneta, John de piloto y yo y Ash en los asientos de atrás. Estire mi brazo por entre medio de los asientos y encendí la radio mientras John no despegaba la vista de la carretera, la canción "loyal" de chris brown, retumbaba por los parlantes de la camioneta llenando el ambiente del lugar en una fiesta privada, para nosotros 3. Yo y Ash, cantabamos el coro, y John rapeaba de forma espectacular, la parte de chris brown. La verdad es que John podría de ser cantante, pero el solo lo ve como una forma de pasar el aburriento.
Al llegar a nuestro departamento, apague la radio y nos bajamos de la camioneta, como le tengo miedo a los ascensores subi por las escaleras, como siempre, pero esta vez John me acompaño en la subida mientras Ash, tan floja, se fue en el ascensor. Mis piernas comenzaron a fallarme cuando ya estabamos en el 4 piso del edificio, John presiono las palmas de sus manos en mi trasero y me empujaba para que asi pudieramos llegar mas rapido.
-Recuerdame nunca más subir las escaleras contigo -dijo, para nuevamente ejercer fuerza en mi trasero y darme un pequeño empujon de animos.
-Y tu recuerdame golparte cada vez que me toques el trasero - aparte sus manos de mi trasero, por que ya habiamos llegado al 8 piso donde se encontraba nuestra habitación.
-Soy tu amigo tengo derecho a tocarte - protesto.
-Eso no es verdad - reí. - al parecer te estas convirtiendo en un pervertido.
-Puede ser - se encogio de hombros, metio su mano en el bolsillo del pantalon y saco las llaves.
Abrio la puerta, me adentre en el salón y me deje caer como saco de papas en el comodo sofá de cuero negro. John estaba a punto de cerrar la puerta cuando el grito de alguien lo detuvo.
-¡Hey gilipollas no cierres la puerta! -grito Ashley desde el pasillo.
Ash se adentro en la habitación y John pudo cerrar la puerta tranquilamente.
-No entiendo como le hacen - confesó, a la vez que se dejaba caer a mi lado en el sofá - yo debería de haber llegado primero -refunfuño.
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Bueno, aquí les dejo el segundo capitulo de Danger, espero que les guste y lo hayan disfrutado.
gracias por leer.
un beso.
-Anaís.