Querida Elena,
Me han dado el alta del hospital, al fin y al cabo no fue necesaria una cirugía. Lo contraproducente de todo esto es el yeso que tengo que cargar en mi brazo y que me acompañara por los próximos tres meses.
Te extraño. Cada día sin ti genera un gran vacío en mi interior, el cual se agranda día a día.
Ya ha pasado un mes desde la última vez que nos vimos, que pude sentir tus labios rozarse con los míos.
Hace un mes que me siento vacío, soy un cuerpo sin vida.
Sin ti, no soy nada.
Te amo
-Luke-