Seduction

נכתב על ידי herxngales

55.1K 3.7K 672

¿Serías capaz de resistirte a su seducción? #224 en De Todo עוד

Próximamente
Prólogo
1. Cerdo
2. Pervertido
3. Diferente
4. Mujeriego
5. Raro
Aviso
6. Seductor
7. Comienzo
8. Oportunidad
9. Posesivo
10. Pasado
11. Enamorada
13. Propia mierda.
14. Principio del fin
15. Promesa
16. Derrumbe
17. Pérdida
18. Cambio
19. Decisión
20. Estúpida
21. Nuevo
Epílogo
Her
Extra #1
Extra #2
That Summer
Marriage
Amy
Him
Break Him
Want you
Losing You

12. Te amo.

1.7K 128 31
נכתב על ידי herxngales

Cómo fue nuestro primer "Te amo"

Laura

— Así que... Mi hermano y tú... — murmura Rydel, acostada a mi lado.

Estamos en su habitación, acostadas en la cama boca arriba y con los pies contra la pared, y comiendo barras de chocolate.

— Tú hermano y yo... — confirmo.

— Aún no puedo creerlo sinceramente. Es increíble lo mucho que ha cambiado por ti y lo feliz que lo haces. Tienes que verlo cuando comienza a hablarme sobre ti, una sonrisa adorna su rostro y sus ojos brillan. Realmente increíble.

Sonrío levemente y suelto un suspiro mientras cierro los ojos.

— Lo amo, Rydel. — confieso.

— ¡¿Qué?!

Vuelvo a abrir los ojos y la miro preocupada.

— Estoy haciendo mal, ¿verdad? Él no me ama y sinceramente estoy asustada. ¿Debería dejarlo? ¿Debería esperar? Tengo ese presentimiento de que me romperá el corazón.

— Oh, Laura... No haces mal. Mi hermano está enamorado de ti y eres la única en su vida. Los hombres siempre rompen corazones, pero la pregunta acá es: ¿quieres que sea él u otro hombre el que te lo rompa?

Suspiro y miro el techo, mientras delibero mi respuesta.

— Nunca me lo han roto. — admito. — Julian nunca me engañó ni me hizo algo malo, se fue de mi lado y eso me destrozó pero no fue intencional. Si alguien tiene que romper mi corazón, prefiero que sea Ross.

— Entonces, ahí lo tienes. No tengas miedo, y creo que Ross te ama. Es decir, hay que ser idiota para no darse cuenta de lo mucho que significas para él. ¿Cómo ha sido que llegaron a esto?

Río suavemente al recordarlo. La primera vez que lo vi.

— Yo trabajo en un local de comida, él un día apareció allí e intentó coquetear conmigo, lo que provocó que lo abofeteara. Casi me despiden por su culpa, pero Ross habló con mi jefe y le dijo que seguiría frecuentando el lugar si yo me encontraba allí. — comienzo a decir.

— ¿Ya desde un principio estaba loco por ti? — pregunta confundida.

— No, solo quería sexo. Él siguió viniendo al lugar, más de una vez nos hemos besado pero siempre terminaba mal. Conocí a Tess también, su hija. Bueno, ahora de los dos... En fin, un día yo estaba realmente mal y Ross se dio cuenta, entonces me sacó del local y me llevó a su playa privada. No voy a mentir, nos besamos varias veces... No sabía lo que sucedía, lo único que sabía era que no podía dejar de anhelarlo. Le conté mi historia, él me escuchó atentamente y de un momento a otro nos estábamos besando, nos acostamos. Ross fue mi primera vez. Luego me marché cuando él estaba durmiendo, ya que creía que solo había sido una más y me sentía culpable por lo que hice.

— Oh... Vaya... Esto es mejor que las novelas.

— Dos días pasaron y yo seguía sintiéndome fatal, no voy a mentir... Me encontraba herida y humillada. Pero entonces, apareció de repente, y me confesó que estaba enamorándose de mi. Me pidió una cita, acepté pero el día de nuestra cita tuve un problema con mi abuelo así que él decidió que nos quedáramos en casa y me cocinó. Fue perfecto, a pesar de todo... Fue perfecto. Después de eso, seguimos saliendo tres o cuatro veces más o siempre nos veíamos en el local, siempre va a visitarme. El día de la fiesta de tu hermano, me dijo que yo era su novia, es decir... Lo hizo oficial.

— Es tan raro que estemos hablando así de Ross, el mujeriego de la ciudad.

— Lo sé... — murmuro mientras me río. — Es tan... Asombroso, y me hace tan feliz. Tessa me considera su madre, Ross está encantado con la idea. De repente, recuperé algo de felicidad de mi antigua vida.

— Estoy muy feliz por ti. — me dice Rydel, regalándome una sonrisa. — Y por Tessa y Ross.

— ¿Y tú? ¿Has encontrado a alguien?

— No, mi ex esposo sigue llamando pero no quiero saber nada de él. No puedo creer que haya desperdiciado tantos años con él. Es un idiota.

— Que se pudra. Ya encontrarás a alguien. Escucha, Erik vendrá pronto a la ciudad... Puedo presentártelo, si quieres.

— No, es un soldado. No estoy interesada en tener una relación a la distancia ni vivir día y noche preocupada por él.

— ¿Y algún amigo de Ross?

— Son unos hijos de puta. Paso.

Suelto una carcajada. — Eres imposible.

— Soy una mujer con requisitos, y ni siquiera son difíciles de cumplir.

 — Ya aparecerá ese hombre. — le aseguro sonriendo.

Mi celular comienza a sonar y me estiro hacia la mesita de luz para agarrarlo.

— ¿Si? — pregunto.

— En serio... ¿Nunca miras quién te está llamando? — pregunta Ross, provocándome una sonrisa amplia.

— ¡Ross! — exclamo completamente feliz por escucharlo de nuevo. — ¿Cómo estás? Te extraño...

— Yo también te extraño, amor. Ahora que estoy hablando contigo, mucho mejor. ¿Tú? ¿Cómo está Tessa?

— Estamos bien, estamos en la casa de Rydel. Ella está durmiendo en la habitación de al lado y yo estoy con Rydel, en un rato iré a dormir con Tess así me aseguro de que no se despierte sola en una casa desconocida para ella.

— Sinceramente, eres increíble.

— ¿Cuándo vuelves? — le pregunto.

— Ya he vuelto, quería sorprenderlas pero me encontré con la casa vacía. — dice riendo.

— ¡¿Ya estás aquí?!

Rydel se ríe ante mi entusiasmo pero la ignoro por completo.

— Sí, llegué hace cinco minutos. ¿Paso a buscarlas?

— Si, en unos minutos estaremos listas.

— De acuerdo. Nos vemos en un rato, cariño. Te quiero.

— Yo a ti... Adiós. — me despido sonriendo.

Suspiro feliz y me levanto de la cama.

— Ross pasará a buscarnos a Tessa y a mi en unos minutos. Tenemos que hacer esto otra vez. — le comento mientras me coloco los zapatos.

— Claro. No me moveré de Los Angeles así que aquí estoy.

Voy a la habitación en la que está durmiendo Tessa y me arrodillo a su lado.

— Cielo... Papá está viniendo a buscarnos... — le susurro.

— ¿Ahora? — pregunta dormida.

— Sí, ven... — murmuro.

Tessa me estira sus brazos y yo, encantada, la tomo. Bajo las escaleras con ella a upa mío, ya estaba un poco más despierta y sonreía levemente.

— La pasé bien... — susurra.

— ¿Acá? Me alegro, cielo.

— No, contigo. La pasé bien contigo cuidándome.

Sonrío ampliamente y beso su mejilla con suavidad, Rydel baja las escaleras y nos sonríe. Tessa aún no se desenvolvía cuando estaba ella, pero todos sabían que era cuestión de tiempo.

— Adiós, Tessa... — se despide sonriéndole.

Pero no obtiene respuesta. Tess esconde su cara contra mi cuello y me abraza más fuerte. En ese momento, la bocina de un auto suena y le sonrío a Rydel.

— Nos vemos mañana. — me despido.

— Espero que empieces bien tu cumpleaños. — me dice mientras abre la puerta de casa. — ¡Oye, imbécil! Mis vecinos duermen. — le grita a su hermano.

Ross apoya su brazo en el asiento del co-piloto y la mira sonriendo de manera arrogante.

— Dudo que me importe. De hecho, ni siquiera lo dudo. — responde.

Río ante su comportamiento y salgo de la casa tras sonreirle una última vez a Rydel. Dejo a Tessa en su silla antes de subirme al auto.

— ¿Cómo han estado mis chicas? — pregunta Ross.

Estoy a punto de responder, pero una sonrisa maliciosa asoma por su rostro mientras mira a Rydel parada en el umbral de la casa.

— Esperen... — nos pide mi novio, antes de tocar la bocina por al menos 20 segundos.

Si, tiene 5 años cuando se lo propone.

Rydel rueda los ojos y le saca el dedo del medio para después entrar a la casa. Ross se voltea para mirarme y me sonríe con ternura para después besarme suavemente, le correspondo el beso intentando contenerme para no saltar a sus brazos y profundizarlo.

— Ahora sí... Hola, mi amor. — susurra acariciando mi mejilla.

— Realmente te he extrañado. — digo sonriendo, provocando una sonrisa en él.

Ross se había ido antes por trabajo, se había ido dos días después de la fiesta y eso había evitado que le soltara de repente un "Te amo", ahora esperaba poder controlar mi lengua.

— Tessa, cielo, ¿cómo has estado? — le pregunta Ross.

— ¡Bien! Mamá es genial. Fui a su trabajo.

— Me alegro de que la hayan pasado bien. Las he extrañado mucho durante estos días.

— Nosotras a ti. — le responde Tessa sonriendo.







Cuando llegamos a casa, Ross lleva a Tessa a su habitación y yo aprovecho para darme una ducha. Cinco minutos después, la puerta del baño suena.

— Me gustan mis duchas solitarias, Lynch. — digo.

— Oh, vamos... Pasamos separados casi dos semanas... Déjame entrar... pide.

Ruedo los ojos divertida. — ¡Nop!

Pero entonces, la puerta de la ducha se corre provocando que chille sorprendida y Ross se mete en la ducha completamente desnudo.

— ¡Privacidad, Ross! — exclamo, pero de todas formas lo abrazo por el cuello y lo beso.

Él coloca sus manos en mis caderas y me presiona a su cuerpo mientras el chorro de agua cae sobre nosotros.

— Feliz cumpleaños... — susurra en mi oído.

— Vaya... Si lo empiezo de esta manera, me atrevo a decir que será uno de los mejores... — murmuro.

Ross me apoya contra la pared suavemente y yo lo miro sonriendo. Se ve tan caliente.

— Escucha... Hay algo que debo decirte...

— ¿Tiene que ser ahora? — pregunto mientras cierro los ojos al sentir sus labios sobre mi cuello.

— Te amo, Laura... — murmura.

Me separo de él de inmediato y lo miro sorprendida, Ross parece confundido.

— ¿Qué? — pregunto boquiabierta.

— Te amo, estoy enamorado de ti. Joder... Estoy completamente enamorado de ti. Estas dos semanas en las que estuvimos separados, lo confirmé. No podía pensar en otra cosa que no fueras tú. Te amo, y está bien si no sientes lo mismo. Puedo esperar. Solo... Solo quería decírtelo. — dice en voz baja mirándome intensamente.

Sonrío ampliamente y lo beso con dulzura, Ross vuelve a apoyarme contra los fríos azulejos y me presiona a su cuerpo. Profundizo el beso, queriendo sentirlo, y él finalmente une su cuerpo con el mío provocándome un suave gemido.

— Te amo, Ross... — susurro contra sus labios para después besarlo nuevamente.








En las mañanas de mi cumpleaños, Julian solía venir a desayunar y llevarme a algún lugar para pasar el día juntos mientras mi familia arreglaba la casa para mi fiesta. Me cuesta demasiado levantarme esta mañana, de hecho... No quiero hacerlo.

Julian ya no está. Mis padres ya no están. Mi hermana ya no está. Mis amigas ya no están.

Cuando me despierto, me encuentro completamente sola y eso no me ayuda en absoluto. Suelto un suspiro y agarro mi celular, tenía varios mensajes pero uno llama mi atención. Me incorporo de inmediato y contengo las lágrimas.

"¡Feliz cumpleaños, preciosa! Sé que has hecho tu vida en Los Angeles y estoy muy feliz por ti. Me encantaría poder celebrarlo contigo, pero ya no estás aquí... Julian siempre se emocionaba con esta fecha, me volvía loca preguntándome qué comprarte. Bueno, en el último cumpleaños se decidió por un anillo... Me apena todo lo que les ha pasado. No quiero arruinar tu día, así que espero que lo pases increíble junto a tu chico. ¡Te quiero, Laura!

Con amor, Jessie."

Sonrío levemente mientras algunas lágrimas se me escapan. Jessie es mi ex cuñada, la hermana mayor de Julian. Éramos muy cercanas y siempre me reconciliaba con su hermano gracias a ella.

"Jessie, muchísimas gracias. Extraño a tu hermano, no lo he olvidado... Jamás lo haré. Pero estoy feliz con el hombre que tengo a mi lado y he decidido seguir adelante, me alivia saber que no estás enojada. Te adoro y espero verte pronto."

Presiono enviar y justo en ese momento la puerta de la habitación se abre, dándole paso a Tessa quien se acuesta al lado mío y me abraza con entusiasmo.

— ¡Feliz cumpleaños, mamá! — exclama.

Suelto una carcajada y le correspondo el abrazo. Bien, podía acostumbrarme a esto. Decido dejar a un lado mis recuerdos y disfrutar del presente.

— Gracias, cielo... — susurro emocionada.

— Feliz cumpleaños, cariño. — dice Ross abrazándome por detrás y besando mi mejilla. No me había percatado de su presencia hasta este momento.

— Gracias... — murmuro mientras le sonrío.

Me corro un poco para dejarle un lugar, quedando en medio de Ross y Tessa. Ross me había preparado el desayuno, lo que me hace sonreir ampliamente.

— Te lo he elegido yo. — me dice Tessa mientras me tiende una bolsa.

Agarro la bolsa y la abro, miro boquiabierta el vestido rojo de tiras. Era precioso.

— Muchas gracias, cielo... Me encanta. — respondo para después besar su mejilla.






Tras desayunar, Tessa se va a su habitación y Ross se queda un rato más conmigo. Parece nervioso, lo que comienza a preocuparme. Habíamos pasado un momento agradable, riéndonos, hablando y jugando entre nosotros. Me encantaba pasar tiempo con Tessa y Ross.

— ¿Ocurre algo? — pregunto acariciando su mejilla.

— No... — murmura mientras me atrae más hacia su cuerpo para después besarme. — Te amo...

Sonrío mientras lo miro. — Te amo más.

Ross se incorpora y busca algo en su mesa de luz, lo observo confundida. Cuando se da la vuelta, tiene una cajita en sus manos, me la tiende y yo la acepto.

— Ábrela... — me pide. Obedezco.

Cuando la abro, hay una llave allí. Bien, ahora estoy aún más confundida.

— Tú me dijiste que odiabas vivir en la casa de tu abuelo, que era doloroso... — comienza a decir. — Sé que llevamos pocos meses como pareja, pero te conozco desde hace tiempo y tú conoces cada parte de mi. Sé que en un principio te dije que iríamos lentamente, y creo que es lo que menos estamos haciendo pero al menos a mi no me interesa. Tessa te quiere como una madre, y yo te amo como mi mujer. Me gustaría que te mudaras aquí, con Tessa y conmigo. Betty está grande, y no quiero contratar a nadie más... Quiero que Tessa sea criada por sus padres, por ti y por mi. Te quiero aquí, despertarme a tu lado todas las mañanas sintiéndome el hombre más afortunado, pasar todas las noches adorándote y amándote... Quiero mañanas llenas de risas y amor, tardes llenas de juego, noches llenas de pasión, lo quiero contigo. Solo contigo. Te quise desde el primer momento en el que te vi, Laura, pero no sabía que podía amarte con tanta intensidad hasta que pasamos nuestra primer noche juntos. ¿Quieres vivir aquí con Tessa y conmigo? ¿Quieres que construyamos un hogar aquí?

Joder... Mis ojos están llenos de lágrimas. Lo miro sonriendo y asiento sin siquiera dudarlo, antes de lanzarme a sus brazos y besarlo con ternura.

— Me encantaría, Ross... — susurro completamente emocionada.

Ross me dirige una de sus hermosas sonrisas antes de recostarme en la cama y volver a besarme. En estos momentos, no podía imaginarme ser más feliz. Era increíble como solo dos personas le traían tanta felicidad a mi vida.

A pesar de haber sido un cumpleaños completamente diferente, lo disfruté. Lo festejé con mi abuelo, a quien Ross fue a buscar al asilo, con la familia Lynch, mis amigas, Ross y Tessa. Claro que la mejor parte fue la escapada de fin de semana que Ross me había prometido.

Desearía poder guardar estos momentos en una cajita de cristal, y revivirlos una y otra vez... Mi fiesta de cumpleaños, mi primer "Te amo" con Ross, mi escapada con Ross, Tessa diciéndome mamá, y sobre todo... La felicidad que experimentaba en esos momentos.

Porque pronto... Pronto todo aquello se derrumbaría.

















המשך קריאה

You'll Also Like

878K 42.9K 116
las imágenes no son mías yo solo los traduzco si tu arte aparece aquí y no estás de acuerdo envía mensaje para borrarlo gracias 💜🧡...
39.2K 3.7K 39
• El? Se fue de su provincia para seguir su sueño. Ella? quedó desbastada después de su partida prometiéndose a ella misma odiarlo el resto de su vid...
4.9K 846 16
❝ EL DIARIO DE ADRIEN AGRESTE ❞ | ____________ Petrell, una chica de origen latino que se muda a Francia debido al trabajo de sus padres. Adrien Agre...
243K 35.8K 47
•∘˚˙∘•˚˙∘•ꕥ 𝐍𝐔𝐍𝐂𝐀 𝐅𝐔𝐈 𝐓𝐔𝐘𝐎 ꕥ•∘˙˚•∘˙˚•∘ Park Jimin un joven que es obligado por su familia a contraer matrimonio con un hombre mayor que e...