Broken People

Florence [rain down]

El viejo parque que solía tener tanta vida
llora su abandono,
el día gris, gris como de repente el mundo,
cómo todo puede cambiar tan rápido.
Los columpios, solos.
Una puerta se abre, rechinando, sin embargo nadie entra,
todo desaparece,
no todos los días pueden ser los mejores.
Extraño, antes los fantasmas solían andar entre los recuerdos durante todo julio,
las aves eran atrapadas en enero.
La pureza del blanco, no es más que vacío;
porque ya no queda nada.
Los árboles podrían dejar caer sus hojas en otoño y convertirlas en sueños,
las paredes, no hacen nada más que guiar a la locura y los techos nunca permitieron que tomaras una estrella y le susurraras un deseo
que en realidad era un adiós.
Ellas mueren con todo.
Nunca es hora de irse; no debes olvidar que los cuentos siempre han tenido finales felices,
pero nadie jamás habló de que, a veces,
cuando despiertas,
no lo haces realmente.
Nadie te imagina saltando desde la luna,
lloran mientras arrancan las flores una por una
para dejarlas en el pasado
mientras despiden a sus colores,
y se ahogan en la nada.
La lluvia cae, mofándose de su propia existencia.