¡Charlotte! ¡Charlotte! ¡Charlotte!
- Donde carrizo te metes mocosa estúpida – Los gritos por toda la casa y el patio eran incesantes, era Yuliath la madre de la niña...
- Madre, acá estoy, solo estaba dibujando, bajo la sombra de aquel árbol frondoso – Dice la niña mientras señala hasta el lugar donde se encontraba hasta hace segundos
- Deja de decir tantas estupideces, no sabes ni trazar una línea – Dice en burla
- ¿Qué tienes en las manos, que es eso? ¿Qué es eso tan espantoso?
- Es arte madre – Responde la chica cabizbaja y algo dolida
- Son ridiculeces, deberías ser mas como tu hermana Georgette , ella si es hermosa, inteligente, y si tiene talento, no como tú...
- Yo soy hermosa, inteligente y tengo talento – Repica con tristeza la niña
- Eres un monstruo inservible que jamás tuve que haber dejado vivir, jamás debí dejarte crecer en mi y traerte al mundo, eso eres.
Una lágrima comenzaba a deslizarse por la mejilla de la niña, ocho años soportando maltratos e insultos de la persona que se suponía debía amarla. Char seco con brusquedad la gota salada y levanto el rostro dándole una mirada de odio a su madre quien ya le había dado la espalda y comenzaba a ingresar a la casa, la niña en ese momento en sus más profundos pensamientos y dolido corazón juro venganza.