Ni un solo pensamiento - Snack

Por Nezka03

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Sirius Black finalmente era un hombre libre, después de pasar 13 años en Azkaban, su nombre había sido limpia... Mais

Introducción
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Por Nezka03

Normalmente si hubiera sido el Sirius de 18 años, hubiera sido directo y hubiera preguntado al respecto, pero ahora, estaba consiente que era un tema más serio.

Sirius siempre había sido muy curioso, por lo que el no saber algo le generaba un pequeño TOC. Tenía algunas teorías.

Desde que conoció a Snape, sabía que era un Beta, nunca tuvo un olor en específico, nunca tuvo algún cambio en su físico y para nada nunca vío que este sufriera por los olores frente a grupos de omega o alfas. Saber eso sobre el azabache no era gran cosa, no es como si hubiera observado al azabache durante toda su estadía en Hogwarts o hubiera soltado feromonas sobre el contrario solo para ver su reacción por andar con su olor... Simplemente era conocimiento básico que Severus Snape se veía y actuaba como cualquier otro Beta.

Por lo que era imposible que tuviera una hija por parte de Regulus, tomando en cuenta que era un Alfa dominante, así como cualquier Black.

Podría ser que la niña hubiera nacido por fuera del matrimonio, por lo que quizá hubiera una madre? Pero por parte de quién?

Parecia que Regulus se dio cuenta que su hermano no terminaba de entender y estaba en las nubes, acaso Sirius no aprobaba su matrimonio con Severus? Regulus sabía que a su hermano no le agradaba el otro hombre pero esperaba que pudieran llevarse bien ahora.

- Sirius, no se que estas pensando, pero te prometo que ambos somos muy felices.

- Yo... Esta bien, me alegro por ustedes, solo que creía que Snape era un beta y que no podría tener hijos.

- No, Sev siempre fue un omega, simplemente lo ocultaba, reprimío su lado omega durante muchos años. Nos costó tener un hijo, pero lo intentamos hasta tener a Amelie.

Que se supone que significaba que les costó?... Por merlín, su corazón se oprimido un poco al pensar en lo que creía que pensaba, pero bueno, ahora tenía una sobrina, Amelie era un nombre muy bello.

- Pero hacer eso, es peligroso. - Sirius estaba consciente del daño que causaba reprimir un segundo género. - Ocultarlo por tantos años... ¿Porqué?

- ¿No es obvio? Hay muy pocos omegas varones, uno de los pocos dentro de Slytherin. Y que sufriera acoso y bullying no ayudaba a que fuera libre a decir su segundo género, no lo crees?

Sirius entendía a lo que se refería Regulus, él y sus amigos nunca fueron los más agradables con el chico y tenía que aceptar que gracias a ellos, otros más siguieron sus pasos, llevando a que Snape fuera esa víctima fácil que aceptaba todo.
Se sentía culpable, por su culpa habían llevado a un omega a esconderse.

- Lo siento.

- No te deberías de disculpar conmigo, si no con Severus.

El ambiente se quedó silencioso durante un rato donde ambos terminaron de beber.

- Snape... ¿Sabe qué me voy a quedar aquí? - Pregunto Sirius algo nervioso. No esperaba que su hermano se lo ocultara a su pareja, pero era mejor saber o sería mejor irse.

- Sí, lo sabe. No te hubiera traído si él no hubiera aceptado.

- Que reconfortante. - Se burló. - Y dónde está tu esposo y tu hija? La casa se escucha muy silenciosa.

Sirius no esperaba que estuvieran escondidos o lo fueran a evitar todo lo posible dentro de la casa.

- Probablemente no tardan en regresar. - Dijo Regulus levantando su manga para observar su reloj, para luego observar hacia donde estaba la entrada principal. - Severus apenas tiene unos días que salió de Hogwarts, quiere ponerse al día con Amelie. Siempre que está en casa suele consentir demás a Meli... Recuperar el tiempo que pasa en el castillo.

- Ha de ser difícil estar separada de su hija tanto tiempo.

Los sentimientos de Sirius eran muy complicados desde que salió de Azkaban, por lo que ahora no podía asimilar todo, su maldito crush de la escuela tenía una hija con su hermano; y estaba seguro que ambos eran mil veces mejores como figuras paterna que sus propios padres.

Ahora se imaginaba, que hubiera pasado si él fuera el que se casó con Snape en lugar de su hermano? ¿También tendrían una hija? ¿Tendrian una casa tan agradable como esta? ¿Cómo se vería Snape si fuera su omega?

-... Sí, es difícil, pero Amelie lo comprende.

Justo en ese momento se escuchaba el cerrojo de la puerta principal abrirse. Regulus se levantó de su lugar, arreglando levemente su ropa, fue entonces que Sirius vio ese brillo en el rostro de su hermano, él realmente estaba enamorado de aquel omega.

Unos pasos se escucharon del pasillo y junto con ello la suave voz de una niña.

Sirius trago saliva, no entendía pq estaba tan nervioso. No era como que no hubiera visto a Snape antes, como en aquella situación tan extraña en la casa de los gritos...aunque en aquella ocasión no tenía la mejor presentación, con sus ropas sucias y su personalidad tan inestable.
Se había arreglado desde ese entonces y se veía un poco mejor pero de igual manera, no tenía el porte que tenía de joven y claramente no podía competir con el físico de su hermano.

Frente a él aparecieron dos matas de cabello negro, tan negro como el carbón. Snape tenía en sus brazos a la niña, Severus se veía algo diferente a la última vez que lo vío, seguía siendo delgado y pálido, con ojos tan oscuros como su pelo y esa nariz... grande? Era un puente alto pero la punta era más respingada a como recordaba.
Y la niña, la niña era una preciosidad, era una copia casi exacta de Snape, pero con unos ojos grises casi como los de él y unas ondas en su pelo, un detalle genético de los Black muy obvio.

- ¡Papá! Ya regresamos, adivina a donde me llevo papi.

La niña, que traía un vestido azul pastel con encajes, se bajo de los brazos del hombre y corrió a abrazarse en las piernas del alfa Slytherin. Regulus sin dudarlo la cargo con una gran sonrisa no sin antes observar el rostro de su esposo.

- No lo se, soy malo adivinando, porqué no me lo dices tú?

- Así no es como se juega, eres muy aburrido!

- Entonces será que te llevo a una biblioteca? O acaso te llevó al dentista?

- Noo! Me llevó a una feria!

- A una feria? Wow, entonces me imagino que otra vez te compraron muchas cosas?

- Sí.

Regulus soltó una pequeña risa por su conversación con su hija. A todo eso Sirius y Severus habían quedado en segundo plano, Severus tenía una pequeña curvatura de sonrisa en sus labios mientra veía a su pareja y a su hija interactuar, para Sirius no pasó desapercibido que Snape lo estaba evitando con la mirada. Pero estaba bien, así podía observar al hombre aún más, Snape vestía con ropa con estilo muy muggle y en su mano se encontraba un pequeño abrigo blanco.

Realmente era una vista muy desconocida.

- Papá, ¿Quién es él?

Fue entonces que todos los presentes voltearon a ver a Sirius, Sirius se sintió fuera de lugar y que lo observarán no lo ayudaba con su nerviosismo.

Regulus bajo a la niña y se acuclillo a la altura de la niña.

- Meli, ¿Recuerdas qué te dije que tenía un hermano mayor? Él es Sirius, mi hermano. ¿Porqué no vas a saludar?

La niña se veía sorprendida, pero no asustada, algo que alegró a Sirius; Amelie observaba a ambos hombres, sin decir nada, como buscando las similitudes entre ambos hombres. Con ello se acerco al Black mayor observando su largo cabello y su barba medio peinada.

- Un gusto mi nombre es Amelie Black. - Se inclinó levemente.

- Hola, Amelie. Soy Sirius y parece que desde hoy voy a ser tu tío.

- ¿Porqué hasta ahora te conozco?

Era una pregunta muy directa, la niña tenía una personalidad muy alerta.

- Bueno, yo... Estuve viajando lejos de casa sabes, pero ahora estaré aquí y espero no volverme a ir.

- ¿Qué es lejos? Haz ido a Liverpool?

- Estoy seguro que he ido más lejos que eso.

- ¿En serio? Me podrías llevar a viajar? Mis padres no me dejan y solo voy de la casa a la escuela y a veces voy a la casa de mis padrinos pero siempre es por chimenea y ni siquiera se donde queda.

Con aquel comentario los padres de la niña se cohibieron un poco, Amelie tenía la mala costumbre de hablar de más y agarrar confianza rápido. Sirius solo se limitó a sonreír aún más, esta niña le caía bien.

- Amelie, creo que deberías irte a cambiar, en un rato vamos a cenar. Te lavas las manosa.

Y desde que habían llegado, era la primera vez que escuchaba la voz de Snape en esa casa.
La niña acato las órdenes, le dio una sonrisa apenada a Sirius y les dio un último beso en la mejilla a sus padres y se marchó desapareciendo por las escaleras.

Se hizo un silencio incómodo en la habitación. Ninguno de los hombres sabía que hacer o que decir.

- Bueno, iré a decirle a Kreacher que empiece a hacer la comida, ustedes quédense aquí.

Con aquello Regulos volteo a ver a Sirius levantando sus cejas, como si tratará de decirle algo, luego se acerco a Severus dándole un pico antes de salir de ahí.

Ahora los enemigos de por vida estaban solos y juntos en una casa. Severus trago saliva, se sentía realmente incómodo, había aceptado tener a Sirius en la casa, porque era algo que Regulus quería y porque aparte el hombre acababa de salir de Azkaban, no podía quedarse solo por su cuenta, dejar al hombre por su cuenra no iba a ser bueno para su salud mental.

Severus observo al contrario, ese hombre apenas era una sombra de lo que antes había sido, su pelo ahora era una melena de rizos enredados que llegaba hasta sus codos, tenía varios tatuajes a la vista y una barba que lo hacía ver más viejo de lo que era; no podía creer que fuera el mismo alfa que hacía suspirar a medio colegio... Un alfa que a él mismo lo hizo suspirar.

Sinceramente, hubo un tiempo en donde sentía satisfacción por saber que el hombre que lo hizo sufrir toda su vida estudiantil, ahora estaba sufriendo encerrado en Azkaban y estaba siendo castigado por sus actos, sentía una gran ira hacia él por haber traicionado a los Potter.

Sin embargo, una vez que se descubrió que Sirius no había sido el traidor, esa sensación de gozo se había esfumado, se sentía mal por el hombre, le daba pena verlo, pensar que el hombre vivió en ese lugar por algo que no hizo.
No lo perdonaba por todo lo que le hizo de joven, pero estaba seguro que esa no era la manera para pagarlo, en este punto de la vida todo ese resentimiento se había esfumado, no valía la pena tener ese tipo de sentimientos, pero aceptaba que Sirius Black no era alguien con el que quisiera compartir una taza de té y compartir anécdotas de vida.

Severus estaba listo para marcharse de la habitación, no entendía por qué Regulus lo había dejado solo con su hermano.

- Snape, yo am... Te quería decir algo.

- No hay nada que me tengas que decir.

-... Por que siempre estás a la defensiva? Podrías dejarme hablar?

- Si dices algo que no me interese me marcharé.

- Bien, como sea, yo solo... Por merlin, yo te quería pedir perdón.. Por todo lo que te hice en el colegio y por quizá haberte atacado en la casa de los gritos...

- ¿Solo eso?

- ¿Qué? Me estoy disculpando, deberías de decir que aceptas mi disculpa, sabes? Así es como funciona.

- Te disculpo...

- ¿En serio? La verdad, también te quería agradecer por dejarme vivir con ustedes.

- Sin embargo, no porque te haya disculpado, significa que se me vaya a olvidar de un día al otro por todo lo que me hiciste pasar.

- Claro, siempre es así contigo.

Sirius no pudo evitar dar unos pasos hacia el frente acercandose al de ojos negros, Severus por su parte solo se limitó a retroceder, pero sin desviar su mirada de la contraria.

Quedaron apenas separados por unos centímetros, Sirius viendo hacia abajo y Severus viendo hacia arriba, esto causa por su diferencia de alturas. Fue entonces que Sirius lo notó. Aquel hombre tenía un leve aroma, apenas y podía olerlo, pero lo cubría muy bien el aroma de su hermano, ese olor de anís y manzana.

Una leve chispa de envidia y celos hacia su propio hermano lo embargo.
No podía aceptar que su hermano fuera pareja de un omega tan guapo, esa era la razón por la que rechazaba al contrario de joven, no podía aceptar que se sintiera atraído por un chico, y mucho menos como él.

El ambiente se estaba tenzando y el omega empezaba a tener miedo por tener a ese alfa frente a él.

- Papi, ya regresé.

Gracias a esa suave voz, ambos hombres se separaron abruptamente, cortando la tensión que iba en aumento. Severus agradeció que su hija llegará.







Gracias por leer y su apoyo. 💖
Espero que este siendo de su agrado y lo estén disfrutando, estos primeros capítulos pueden que sean un poco enfadosos pero les prometo que no va a ser de esas historias supeeeer largas.
Voy a tratar de que las actualizaciones sean lo más seguidas posibles.
Tambien tengo la costumbre de actualizar de noche/madrugada.

Acepto opiniones y sugerencias, me hace muy feliz leerlas y no olviden de votar. ✨

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