Moon golpeteó a Amber en la cabeza.
— Buenos días. El sol está hermoso, ¿verdad? Son las 7 de la mañana y el vuelo de Thomas está por salir, iremos a despedirnos.
Amber lloriqueo en la almohada, no había dormido bien... ademas que Yasmine había roncado toda la noche y Moon hablaba dormida. Ah, y además no podía dejar de pensar en Robby.
Moon básicamente la cargo en su auto y se dirigieron al aeropuerto. Thomas estaba en la puerta esperándolas, con las maletas listas.
Diablos, realmente se iría.
— Cuando llegues a Nueva York debes enviarnos fotos.— pidió Yasmine agarrando unas maletas y entrando a la cabeza del grupo.
Thomas abrazo a la castaña y las guió hacia su puerta de embarque.
— Nuevamente perdón por todo, Am. Te quiero, siempre lo haré.
— Nos volveremos a ver, Gold. Ya lo verás.— abrazó al muchacho con fuerzas y beso su mejilla.
— Bueno, bueno.— los separó Yasmine.— Sepárense, tórtolos. ¡No te olvides de las fotos!
Moon tambien dijo algo a Thomas y... eso fue todo. Solo las tres chicas habían ido al aeropuerto, ya que los secuaces de Kyler dijeron que las despedidas eran para "nenitas". A Thomas le pareció lo mejor, la razón principal de su mudanza era para separarse de ellos.
Thomas fue rápido al despedirse, claramente odiaba las despedidas, ¿quien no lo hace?
Yasmine se despidió de sus otras dos amigas, no había sido invitada al torneo de All Valley y tampoco le importaba no ir. Estaba más emocionada por tener un día de compras con su tarjeta de crédito recién recargada.
Moon, por su parte, había sido invitada por Halcón y... bueno, Amber, no tenía invitación, pero su familia iba todos los años. Estaba segura de que se encontraría con su padre, tenia un asiento reservado para él y toda la familia.
(...)
Demetri las alcanzo en el recinto, no estaba muy lleno, pero la gente se concurriría horas después.
— Si entramos ahora conseguiremos un buen lugar.— hablo Amber al ver a unos fotógrafos acercándose para hacerle preguntas sobre Daniel, la castaña logró escabullirse con éxito.
Una vez sentadas, Amber llamó a su madre para decirle donde estaba.
— Amber, ya deberías estar acá. No fue una buena noche en casa.— Amanda susurraba.
— ¿Que pasó?
— No lo se con exactitud, Sam se peleó con el novio y tu padre se enteró de que Robby es el hijo del mismísimo Johnny Lawrence.
— ¡¿Que?!
— Exacto. Ahora nadie quiere moverse para ir al torneo. ¡Pero alguien debe ir! La concesionaria es patrocinador oficial, debemos hacer acto de presencia. Supongo que yo iré.
— Yo estoy en el torneo, vine junto a Moon.
— Ya. Pero no puedes dar cara tú, debe ir un adulto. Me verás ahí dentro de unos minutos. Habla con Sam, parece muy alterada.
— Sam no me contesta los mensajes, no estaré rogando para que me cuente lo que le sucede.
— Bueno, nos vemos dentro de poco. Cuídate.
Demetri y Moon comían palomitas mientras esperaban el evento. Poco antes de que se anunciaran los equipos, Amber vio a toda su familia entrar y sentarse en los asientos que les guardaban especialmente para ellos. Se notaba que Daniel y Sam habían sido obligados, no tenían caras contentas.
— Ahora vengo.— Amber se paró y bajó hacia los asientos para poder hablar con su propia familia, a la cual no veía desde hace mas de veinticuatro horas.
Daniel sonrió al ver a su hija. Sam no la miró mucho, estaba molesta con su hermana por no haber llegado a casa la noche anterior. Justo cuando necesitaba hablar con alguien Amber decidia tener una pijamada con sus amigas, quienes ahora casi ni se acercaban a ella.
— ¿Fuiste obligado?.— preguntó la castaña a su padre.
— No, solo que tú madre me hizo abrir los ojos. ¿Te sentarás con nosotros?
— No lo creo. Estoy con Moon y Demetri. Puedes venir, Sam.
— Tengo una mejor vista desde aca, gracias.
— Yo quiero ir.— pidió Anthony, rogaba poder separarse de ellos. Estaba harto de los dramas.
— Tú no.— Amber lo callo con una mano en la boca y le dio una pequeña palmada en su cabeza.
— Deja a tu hermano.— Amanda defendió a su hijo.
— ¿Amanda? ¿Daniel?.— una señora interrumpió el momento.
— Oh, hola.— saludo Amanda. Amber codeo a su padre para ver el disfraz de la señora: se había tomado muy literal el ir a hacer porras. Amber la reconocía, era la madre de Xander, era el actual campeón del torneo.— ¿Xander competirá?
— Oh si. El título tiene escrito su nombre. Es una pena que ninguna de tus hijas participe, Daniel. Seguro que llegarían a las finales, aunque Xander no dudaría en ganar.
— Bueno, las chicas no quieren competir, aunque Amber retomó los entrenamientos.
— Ah claro, Amber.— la castaña le sonrió falsamente. La madre de Xander era una vibora que no dudaba en tirarle algunos palos sucios a la propia Amanda cada que se le ocurria. Todo su séquito lo hacían, un verano la propia Amber las había escuchado en el club diciendo que Amanda no ponía atención a sus niños— Sam también era muy buena, ¿no, Daniel? Siempre las presumías. Aunque, Amber, si que creció. La tenían muy oculta. Mi pequeño siempre hablaba de ella y como lo dejo plantado en el baile de primavera hace exactamente tres años. Claro que, no soy rencorosa.
Amanda cambió el tema para preguntarle sobre la escuela a la que Xander iba.
— Me iré antes de que mamá no pueda evadir la conversación y me comience a preguntar sobre si sigo dejando plantados a chicos.— Amber subió a zancadas las graderías y se sentó entre Demetri y Moon, quienes ya se habían terminado toda la comida y no sabían que hacer.
Cuando Amber se iba a ofrecer a ir a buscar bocadillos, el micrófono sonó:
— Bienvenenifos al Torneo de All Valley! Este año contamos con la presencia de varios equipos.— el hombre comenzó a nombrar a los inscritos y cuando gritó el nombre de Cobra Kai, unos gritos tipo guerra se escucharon en el recinto.
"Cobra Kai. Cobra Kai" coreaba el grupo, la castaña sintió escalofríos al ver al equipo, muy bien uniformado, entrar. Miguel iba detrás de quien debía ser Johnny Lawrence. Amber lo reconocía por fotos que Halcón le había mostrado alguna vez. Moon chillo al ver a Hawk, quien esbozó una sonrisa mirando hacia donde estaban.
— Y nos acaban de informar que se presenta alguien no afiliado a ningún equipo: ¡Robby Keene!
Definitivamente el corazón de la chica se paró. Ver a Robby trotar solo y con el cabello recogido no era una imagen que se había imaginado presenciar. Se revolvió incómoda en su asiento cuando sus miradas se chocaron. Robby la había buscado, y la había encontrado.
— No sabía que tu chico fornido competiría.— codeo Moon.
— Primero: no es MI chico. Segundo: yo tampoco lo sabía.
Los equipos se separaron en diferentes colchonetas para comenzar la competencia. Amber había ido por Hawk, pero su vista se centraba en Robby.
— No entiendo este maldito deporte. ¿Es siquiera un deporte?.— Demetri habló cambiando de posición para dirigirse a Amber.
— Si, Dem. Es un deporte. Básicamente consiste en tumbar a tu oponente y conseguir tres puntos. El que logra conseguirlos gana.
— ¿Dem?
— Pues si. Te puse un apodo. Los amigos se ponen apodos.
— ¿Somos amigos?
— Pensé que era obvio.
Moon que estaba al medio sonrió y chiflo antes de que la pelea de Miguel comenzará. Para sorpresa de Amber, el latino utilizó la técnica de la grulla para tumbar a su oponente. Si, la movida de su padre. Unos celos recorrieron su cuerpo al ver la perfección que ella no había podido lograr. Seguramente Daniel queria acribillar a Johnny.
Como era de esperarse Miguel avanzó rápidamente en la competencia. Estaba en las semifinales. Aisha fue descalificada antes de lo previsto. Robby peleaba con todas fuerzas y demostraba todo lo aprendió con Daniel. También llegó a semifinales, como era de esperarse. Y Hawk... Hawk era un gran peleador. Amber había ido a esas competencias desde que tenía memoria y lo que hacía Hawk era rudo, peleaba sin piedad. Cuando ganó su primera pelea se quitó su gi negro y mostró su espalda con un tatuaje de halcón.
— Eso es demasiado sexy.— Moon aplaudía y Demetri miraba asqueado la escena. Amber no tuvo opción más que reír y aplaudir a Eli, al fin y al cabo, era un semifinalista.
─ Señoras y señores ¡estamos en las semifinales! Solo podrá haber un ganador, y está parado en este escenario Justo ahora.— la voz del hombre que era el presentador resonó en el recinto.— ¿Sera Miguel Diaz de Cobra Kai Karate? ¿Sera Hawk..? Supongo que es Halcón de Cobra Kai Karate.
— Moskowitz. Es Eli Moskowitz.— Demetri habló mientras Moon y Amber aplaudían.
— ¿Sera Robby Keene, no afiliado?.— Amber aplaudió y se avergonzó cuando Moon grito unos "hurras" para molestar a su amiga..— Y, por último, pero no menos importante, el campeón del año pasado de Topanca Karate, ¡Xander Stone!
Xander dio unas volteretas al medio del escenario y quito el micrófono al presentador
— Solo quería decir que, aunque me encanta pelear, debemos luchar juntos contra el odio...
— Vaya que pesado.— la castaña se apoyo en el hombro de Moon.— Y pensar que estaba enamorada de él hace años.
Moon rio a carcajadas.
— Pero si hasta lo besaste, tonta.
— Ay, cállate. Luego lo deje plantado, hurra por mi.
La primera pelea seria Miguel contra Xander. Para sorpresa de todos Miguel gano. Era finalista.
Por consiguiente, Robby iba contra Hawk.
Primer punto: Hawk. Aplausos.
— ¡Recuerda lo aprendido, Robby!.— gritó Daniel al chico que parecía desconcentrado. Robby dirigió su mirada a Amber, quien le sonrió. No podia hacer nada más.
Punto para Robby. Amber aplaudio pero dio un grito cuando Hawk atacó por detrás a Robby, dandole una patada en el omóplato. Fue contacto ilegal.
Amber se incorporó y bajo corriendo las graderías viendo como Robby seguía tumbado en la colchoneta, pero Daniel anticipó al moviento de su hija y la atrapó en brazos.
— Tranquilízate, Amber.— le hablo al oído al ver a la joven jadeando de preocupación. El chico yacia tendido aullando de dolor, mientras los espectadores padecían mudos.
Hawk, naturalmente, fue descalificado.
— Ve a verlo.— pidió Amber a su padre, viendo como sacaban a Robby de la colchoneta. Iban a ir a revisarlo.— Eres tú. Tú eres su maestro. Debes ir a verlo, papá. Por favor.
Daniel dudo pero asintio. Amber lo siguió de cerca. Iba a darles su espacio, Robby merecía hablar con Daniel. Hawk trató de acercarse a la castaña.
— Eso fue trampa.— lo frenó Amber antes de que le dijera algo.— Lo lastimaste. Y te regodeas por eso. De eso no se trata el karate...
— ¿Como sabrías cómo es el karate si jamás peleaste?.— respondió Halcón al ver como la chica que noche anterior lloraba defendía a Robby.
— No necesito pelear en competencias para saber que te partiría la cara en una pelea justa.
Amber siguió con su camino, dolida. Porque consideraba a Hawk un gran amigo, e incluso... le gustaba estar con él. Pero ese no era el Eli de la clase de Física. Era una persona totalmente diferente y eso solo era el principio.
Al llegar a los vestidores, donde vio a varias personas en tumulto, espero ahí afuera. Daniel salió junto a unos medicos y con la mirada le dijo que entrara a ver a Robby.
Amber no toco y entró al vestidor en el momento que Robby se ponía el gi blanco.
— Hola.— susurró dubitativa.
Robby dio un brinco al verla y se cubrió su pecho desnudó para acercarse a la chica.
— Hola
— Lo de allá afuera. Fue... wow. No se ni lo que fue. No deje de mirarte ni un segundo, eres hipnotizante cuando peleas.— Amber se sonrojo al decir la última frase.— ¿Estás bien?
Robby asistió
— Me dijeron que mi hombro estaba un poco dislocado y que sentiré dolor las próximas semanas. Lo siento, ¿sabes? Por lo de anoche. Fui un tonto por dejarte y por acusarte de algo que realmente no era de mi incumbencia. Estaba celoso, ¿si? Cuando se trata de ti no pienso, solo actúo y mis emociones me controlan. Tú me controlas, Amber. Y suena tonto, lo se. Pero eres especial para mi.
Amber rio y se acercó un poco al chico, a tal punto en el que estiró su mano y la pasó por la mejilla de Robby con cariño.
— Tu, Robby Keene. Eres la persona más especial que conozco. Y te besaría ahora mismo si no tuvieras que salir a pelear en unos cuantos segundos.
— Creo que pueden esperar.— Robby atrajo por la cintura a Amber y unió sus labios por segunda vez. Amber enredó sus dedos en la coletita del chico y no dudo en abrir un poco su boca para intensificar ese beso.
— Robby...¡O vaya! ¡Amber! ¿Que estas haciéndole a mi competidor?.— Daniel abrió la puerta haciendo que los jóvenes se separen y se rían avergonzados.
— Lo siento, papá.— se disculpo y se dirigió a Robby.— Suerte, Robby. Aunque no la necesitas
Robby salió a pelear, pero ahora estaba afiliado a Daniel. Daniel era su entrenador. Robby formaba parte de Miyagi- Do Karate. Amber noto la ausencia de Sam, Anthony y su madre.
— Miguel le dijo algo y Sam pidió irse.— le dijo Moon al ver a su amiga preocupada.— Se te corrio un poco de labial, por cierto.
La pelea comenzó. Estaban muy parejos, a decir verdad. Pero el primer punto lo hizo Robby. El segundo Miguel.
Amber miraba a Robby adolorido y Miguel tomó esa ventaja para hacer su segundo punto.
Daniel pidió tiempo.
— Le esta doliendo.— anunció Amber a Moon, Demetri estaba muy aburrido como para escuchar.
Cuando terminó el tiempo Robby volvió a la colchoneta y comenzó a hacer unos movimientos con las manos y ojos cerrados. Bloqueaba a Miguel como si fuera la cosa más fácil del mundo.
Pero Miguel, no se dejó intimidar. Logró tumbar a Robby, quien se defendió con una patada de dos piernas. En todo el recinto se escuchó el grito de Amber que aplaudía.
Miguel, quien estaba tirado en el piso miró de mala manera a la Larusso. Robby se acercó a ayudarle para que se incorpore. La respuesta de Miguel fue jalarle el brazo con el hombro lastimado. Y eso fue todo. Amber lo sabia.
A Robby el dolor le consumía. Pero debía terminar esa pelea. Todo iba bien, hasta que hizo un movimiento en falso y Miguel tomó la debilidad y pateo el hombro: el punto débil de su oponente. Logró tumbarlo. Miguel era el campeón.
Amber bajo las graderías, despidiéndose de Moon y Demetri, quienes irían a festejar junto a Cobra Kia, lo cual a ella no le apetecia en esos momentos. Corrió hacia Daniel, quien se fijaba si Robby estaba bien.
— ¡Eso fue trampa!.— dijo apenas llegó.— Papá fue trampa. El árbitro debió cobrar falta.
— Vámonos de aca.— Daniel guió a los jóvenes a la salida.
— Robby.— Johnny Lawrence les interceptó.— Hola. Lo siento.
— Está bien, papa. Esta bien. Vámonos, señor Larusso. ¿Vienes, Amb?
Amber se fue con Robby, dejando a solas a su padre con su eterno rival.
— Estuviste increíble.— le susurró la castaña besándole la mejilla y Robby sonrió envolviéndola con su brazo bueno.— Eres increíble.
Robby se cambio y salieron a esperar a Daniel al estacionamiento. Amber sabía que todos querían hablar con él. Siempre sería el bicampeon de All Valley y eso hacía que la gente se peleara por unas palabras de él. Tal vez lo estaban entrevistando.
Amber tenía la cabeza apoyada en el hombro de Robby, cuando Hawk salio junto a Aisha y se rio sarcástico al verlos en esa posición.
— Sabía que estarían acá. Te lo advierto, Amber, cuando esté idiota te haga llorar nuevamente ya no tendrás mi hombro para apoyarte.
Robby quiso acercarse al muchacho, pero Amber lo empujó atrás.
— ¿Porque no te vas a la mierda, Eli?.— la mención de su nombre hizo que los nervios de Hawk se enervarán.— No necesito a alguien con quien llorar, necesito a un amigo. Pero tú estás muy lejos de serlo.
Aisha advirtió a Hawk sobre lo que iba a hacer.
— No ataques, Hawk. Controlate para los entrenamientos. Además, no sería Justo que pelees contra alguien que no estuvo entrenando.
Nadie sabía que Amber si entrenaba. La veían como alguien frágil que en cualquier momento se rompería.
— Es verdad, Aisha. No gastare mis energías. No en una LaRusso. El sensei tenía razón. Los LaRusso son lo peor.— lo último lo dijo como si el apellido LaRusso fuera sinónimo de basura.
Se rió ante su propio comentario y se dirigió nuevamente dentro del recinto.
Robby trató de agarrar a Amber al notar lo que haría, pero de le escapó de su único brazo daños
— Oye, Hawk.— gritó Amber acercándose a zancadas. Cuando el chico se dio la vuelta solo
vio el puño de la chica que quería tanto acercarse a su cara y golpearle la nariz con una fuerza sobrenatural.
— ¿Oye, pero que te pasa?
— No insultes a mi familia, o de otra forma se sacare tu ridiculo peinado.
Robby agarro por la cintura a la chica y se la llevo a tropizones hacia atrás antes de que Aisha lograra golpearla para defender a Hawk.
— ¿Estas loca?. No iniciamos peleas. No golpeamos a cualquiera solo por que si.
Daniel hizo una aparición antes de que la cosa se tornara fea.
— ¿Esperaron mucho?.— preguntó sin notar que había sucedido algo. Amber sonrió al ver a Hawk retroceder al ver a Daniel y trato de no hacer una mueca. Sus nudillos le dolían y estaba segura de que se inflamarían.
— Nada.— respondió Robby.— Digo, no.
— Suban al auto. Los llevaré a un lugar. Estoy orgulloso de ti, por cierto Robby. Tu fuiste el verdadero ganador.
(...)
— Vamos.— Daniel abrio una cerca de madera e hizo entrar a los adolescentes que le seguían perdidos.
— ¿De quien son estos autos?.— preguntó Robby. Amber miraba los autos y les paso un dedo para notar que estaban polvorientos.
— No se preocupen por eso. Síganme.
Amber se retraso un poco para agacharse a mirar si había algo debajo los autos. Eran antiguisimos.
Corrió hasta donde su padre había encendido una luz y recopiló.
— Bienvenidos a Miyagi- Do Karate.— Daniel abrió las manos orgulloso.
Amber sabía de que lugar se trataba. Ese había sido el hogar del señor Miyagi y su padre se había entrenado ahí mismo.
Eso solo significaba algo: necesitarían estudiantes para hacer frente a Cobra Kai, porque lo harian. Enfrentarian a Cobra Kai tarde o temprano.
— Duerman bien hoy. Porque comenzaremos a arreglar este lugar. Juntos. Abriremos este lugar
Dentro de poco para ustedes y para todos aquel que quiera entrar.
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Flor <3