Ranma no lo podía creer, era a quien buscaban.
-Akane ¿eres tú?.
Pero de inmediato se percato que Akane estaba inconsciente.
-Akane ¿qué te sucede?, Akane despierta.
Los gritos de Ranma despertaron a Ryoga y a Akane, que dormían en las tiendas.
-¿Qué ocurre?.
-Ranma ¿qué pasa?.
-Es que, encontré a....
-¡¡Akane!!.
Tanto Ryoga como Akane salieron de las tiendas.
-¿Qué le sucede?.
-No lo sé, solo calló.
Akane trato de desperta a su yo más joven, pero fue en vano, así que decidieron acostarla en la tienda junto con su versión adulta.
Después de que esta la revisará, pudo comprobar que era lo que le sucedia.
-No se preocupen, parece estar bien, solo esta cansada, déjenla aquí conmigo y yo la cuidare.
-Esta bien.
A la mañana siguiente, Akane aún permanecía dormida.
-Bien ya encontramos a Akane, ¿porqué no nos vamos?.
-No podemos, tenemos que averiguar ¿dónde están todos?, además Akane aun no despierta.
-Eso no es problema, yo la puedo cargar.
-Ni se te ocurra Ryoga.
-Ya van a comenzar.
-Lo sentimos.
-Mmmmm...
-Miren, parece que esta despertando.
En efecto, la Akane de diecisiete años se estaba despertando de su sueño.
-¿Qué esta pasando?.
-Por fin despiertas.
-¡Ranma, Ryoga! y ¿yo?.
-Hola Akane, vinimos a buscarte.
-Ranma.
Akane se le lanzó a los brazos a Ranma y lloraba.
-Estaba muy asustada Ranma.
-¿Qué fue lo que paso?
Ninguno podía procesar lo que pasaba, Akane asustada y llorando como una niña indefensa, pero que pudo ser tan aterrador.
-Tranquila, ya estas a salvo.
-Akane.
Akane dejo de llorar, porque se había percatado de lo que hacía.
-Lo siento.
-Descuida.
-Dinos, ¿qué hacías en medio del bosque a las dos de la mañana?
-Estaba escapando.
-¿De quién?.
-Alguien está tratando de matarme
-Pero dime, ¿quién es?
-No se, no lo pude ver bien, trae una capa.
-Ya veo.
-Llevo buscando a alguien todo el día, pero no encontré a ninguna persona, Nerima parece un pueblo fantasma.
-¿Cómo, todo el día?.
-Si.
Ellos no se habían percatado, pero llegaron unas horas después que Akane, así que el tiempo trascurrido para ella apenas había sido de un día.
-Akane, ¿a dónde te dirigias?.
-Encontré un mapa, así que lo seguí hasta aquí.
-¿Un mapa?.
-Si, decía que tenia que ir por ese camino y encontraría alguien que me ayudaría.
-Pero si es mi letra.
Ranma miro el mapa y en efecto era su letra, la que le sugería ir a donde se encontraba Happosai.
-Bien entonces sigamos.
Recogieron todo y siguieron su marcha,
Akane se sentía un poco extraña viéndose mucho más grande y embarazada.
-Espera un momento, ¿estoy embarazada?.
-Yo...
-¿RANMA, QUÉ ME HICISTE?.
Akane se abalanzo con rabia a colpearlo, pero este la detuvo.
-Tranquila Akane, tu siempre con...
Ranma miro a la otra Akane y se detuvo.
-No fui yo.
-¿Entonces fue?.
Akane miro a Ryoga.
-No tranquila Akane, no fue ninguno de ellos.
-Entonces.
-No te lo puedo explicar pero cálmate, nadie me forzó a hacer nada, además yo ya me encontraba embarazada cuando nos vimos.
-Pero, yo no note nada.
-Es que apenas tenia cuatro meses y mi bebe no había crecido mucho.
-Ya veo.
-Vez, tu siempre prim...
Por segunda vez Ranma miro a la otra Akane, así que se contuvo, no quería pensar por un segundo que Akane lo hubiera cambiado por como la trataba.
-Así que cuatro meses y cuantos tienes ahora.
-Ocho.
-¡OCHO!!, eso quiere decir que mientras estuve aquí, pasaron cuatro meses en casa.
-Si.
-Un momento, Ranma como pudiste traerla.
-No fueron ellos, yo me escabulli.
-Ya veo.
-Pues bien, sigamos caminando.
Mientras caminaban, Akane se disculpo con ambos artistas marciales.
-Ranma, Ryoga lo siento.
-Esta bien Akane, lo importante es que te encontramos y estas a salvo.
-Gracias Ryoga.
-Mmmmm.
Finalmente habían llegado donde Happosai, y para su sorpresa todos sus conocidos y demás personas de Nerima se encontraban en ese lugar y de la misma forma que el maestro.
-¿Pero qué sucedió?.
-No entiendo, ¿qué pasa aquí?
-Lo mismo me gustaría saber.
-¿Quién eres?.
Una voz femenina salio de las sombras.
-Pero si ere tu.
-¡¡Que!!, no puede ser dos Akanes, bueno no importa tres o cuatro me desare de todas, de una buena vez.
La batalla comenzó, pero esta vez era más preocupante ya que tenían que proteger a Akane y a su bebé.
-Ven aquí, sígueme.
Akane insito al encapuchado a seguirla. Mientras ella forcejeo con esa misteriosa figura, Ranma y Ryoga escondían a la otra Akane.
-Escucha Akane, tenemos que ir a ayudarte, asi que por ningún motivo salgas de tu escondite.
-¿Entendiste?.
-Si esta bien Ranma, Ryoga, pero por favor no me dejen sola, regresen por mi .
-Te lo prometemos Akane.
Ranma y Ryoga corrían para ayudar a la otra Akane.
Una patada por aquí, un golpe por allá, el encapuchado era bueno en el combate, pero Akane también, aunque por una extraña razon el contrincante se le hacia familiar, ahora que lo tenía de cerca.
-Eres un cobarde, intentaste matarme con un arma.
-Yo, ¿en que momento?
-Ayer.
-A ya recordé, pero eso no era un arma, solo fue una advertencia para que corrieras, me gusta cazar a mis presas.
El encapuchado dio un golpe certero, este fue a dar al estómago de Akane, lo que hizo que perdiera el equilibrio y callera.
-¿Porqué haces esto?, ¿qué tienes contra mi?.
-Nada, sabes, solo quiero divertime y tu eres mi diversión.
-¿Pero porqué?
Akane preguntaba pero la figura encapuchado se limitaba a reír.
-Basta de platicas, creo que es momento de terminar esto.
Cuando estaba a unos sentímetros de darle otro golpe a Akane, Ranma y Ryoga aparecieron, obligando al encapuchado a retroceder.
-Akane ¿estás bien?.
-¿Qué? no puede ser, ¡¡Ranma!!.
-Si soy yo, ¿y tú quién eres?.
-Así que estabas aquí, última.
-¿Pero tú?
-Asi que por fin te encuentro.
De entre la sombras había salido otra persona, este era un hombre muy extraño, llevaba un kimono que jamás habían visto, una cadena recorría su cintura, tenía el cabello muy largo y sostenía un espejo que está cubierto por una tela muy fina.
-¿Y ahora qué?.
-No puede ser, ¿cómo me encontraste?
-Más bien la pregunta es ¿porqué me visitas en mis dominios sin avisar? bueno, no voy a ser mal educado, si tanto deseas seguir a tu abuela, con gusto te ayudaré.
-¿Abuela?.
Después de eso el hombre del espejo corrió la tela y apunto hacia el encapuchado, este trato de escapar pero fue en vano, el espejo empezó a atraerlo hacia él. Del encapuchado se desprendió un espíritu quien dejaba ver su identidad, siendo capturado por el espejo.
-¡¡SHAMPOO!!!.
En efecto, el encapuchado era Shampoo, después de esto el cuerpo de shampo se posiciono en forma de meditación y el hombre del espejo la sugeto, sacó una enorme piedra de la tierra y la sentó.
Ranma, Akane y Ryoga no lo podían creer, en eso Ryoga reacciono e inmediatamente empujó a Ranma, para que pudieran los tres escapar, mientras este sujeto se encontraba distraído.
-¿Qué esta pasando?.
-No lo sé, pero debemos irnos cuanto antes.
-Esperen, tenemos que regresar por Akane.
Los tres se dirigieron rápidamente por la otra Akane y después salieron de ese lugar lo mas rápido que pudieron.
Ya estando un poco mas lejos, pudieron descansar,Ranma bajo a la Akane embarazada y tomo aire.
-¿Qué esta pasando?
-Te explicaremos todo, pero primero déjanos recobrar el aliento.
Unos minutos despues de tomar aire y buscar un lugar para esconderse, le contaron todo a la otra Akane.
-Y dime, ¿no sabes quién es ese?
-No tengo idea de su identidad, pero estoy segura que es quien esta desapareciendo a todos, por eso debemos ayudarlos.
-¿Y cómo lo hacemos?.
-No lo se.
-Mejor, primero investigamos ¿quién es? y ¿qué es lo que quiere?.
Ranma y compañía estaban muy preocupados, ya que nunca se imaginaron lo que estaba pasando en ese lugar.
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Ahora que lo pienso, ¿ustedes que creen qué sea el bebé?
Acaso será niño o talvez niña.