Llamada.
En casa, Panda estaba viendo un video en el Canal de Naturaleza, dado a que hoy había un especial de bambú. Él no comía nada, pero le gustaba el bambú. Este no se encontraba en el Distrito Tingbo, ya que era una planta ornamental en las zonas desarrolladas. Su precio era extremadamente alto y los datos virtuales también eran muy costosos.
Cuando Yan Junxun abrió la puerta, el panda estaba salivando. No supo cómo explicárselo a las dos personas que habían entrado por la puerta, así que solo pudo limpiarse la boca con las patas y decir:
—Estoy muy emocionado... ¡les doy la bienvenida a casa, sanos y salvos!
—Tus lágrimas fluyeron por tu boca —Yan Junxun se dirigió a la cocina para dejar la bolsa ecológica.
—Algunas veces, los pandas hacemos esto —el panda dijo sinsentidos mientras cerraba los ojos. Cargó en sus brazos a la tortuga que se arrastraba por el suelo y saludó a Shi Shanyan—: ¿No hace calor afuera? Las noticias dicen que el Distrito Tingbo se vuelve aún más caluroso anualmente.
—Tengo tanto calor que estoy completamente sudoroso, —Shi Shanyan dejó la leche y, antes de desabotonarse la camisa, preguntó —: No te importa, ¿cierto?
—Absolutamente —Panda pensó que era muy educado—. Por supuesto que no me importa.
Yan Junxun organizó las verduras en la cocina, poniendo su zanahoria favorita en la parte superior para darle a entender al panda que la preparara más pronto. Escuchó la conversación en la sala de estar, a medida que se tocaba el bolsillo del pantalón y arrojaba la paleta derretida a la basura.
Quería darse un baño.
Shi Shanyan desabrochó un botón con el propósito de hacer que el escote suelto luciera más informal. Estaba bebiendo el agua servida por el panda y mirando el video junto a este, aparentando como si él también fuera el dueño de esta casa.
—Aún me preocupa que las pases por alto —el panda colocó el plato de frutas frente a Shi Shanyan y, grandiosamente, le dio unas palmaditas en el pecho.
Shi Shanyan observó hacia la cocina.
—Lo vi comprando cerveza fría frente a la máquina expendedora más cercana al mercado de verduras.
—Le dije que no bebiera demasiadas cosas heladas —el panda frunció su rostro con aflicción—, es una lástima que no siempre me escuche—. Mientras lo decía, devolvió a la tortuga a su tanque de cría y continuó mencionándole a Shi Shanyan—: El Sr. Shi debería quedarse a cenar esta noche.
—Sí... —Shi Shanyan indicó—. Si es posible.
Qué lástima escucharlo. El panda sostuvo su pata, parpadeando.
—Seguro, eres un buen amigo del Sr. Yan. En realidad, ayer estaba planeando salir para hacer un picnic y, ya que tú también estás de vacaciones, podemos ir juntos...
El tren ligero pasó puntualmente, por lo que las ollas y sartenes de la cocina se estremecieron. Yan Junxun miró hacia la cortina, pero no pudo escuchar acerca de qué estaban hablando el panda y Shi Shanyan. Luego de colocar los platos, sacó todo lo que había en los bolsillos de sus pantalones y descubrió que sus cigarrillos habían desaparecido.
... Oh, mierda.
Yan Junxun apretó su palma vacía.
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Panda cocinó la sopa de calabaza guisada por la noche, así como también preparó el pan con minucia antes de la cena, tan solo encendiendo dos velas en la sencilla y pequeña sala de estar. Mientras comían, este aún se encontraba friendo filetes, como si deseara darles espacio para que las dos personas se llevaran bien. En realidad, Panda hacía esto debido a que, en su configuración básica, tenía una opción de "ayudar a Yan Junxun para encontrar una hermosa amistad".
La mesa era demasiado pequeña, impidiendo que ambas personas pudieran extender las piernas debajo de la mesa, chocando entre sí al moverse.
Yan Junxun removió la espesa sopa de calabaza y dijo:
—Tomaste mis cigarrillos.
—Los puse en la mesa de té —Shi Shanyan partió el pan, mirando a Yan Junxun—. Eres muy tolerante contigo mismo, así que colocas la paleta y los cigarrillos juntos.
Esta era una señal para consentirse a sí mismo; la determinación de Yan Junxun para dejar de fumar era tan sencilla de superarse como su resolución a no dormir. Él era muy capaz de permitirse cometer errores en la vida.
—Después de cenar, puedes irte a casa —Yan Junxun no quería que Shi Shanyan lo observara nuevamente. Con un movimiento de cuchara, tocó ligeramente el borde del plato—. No es necesario que volvamos a reunirnos hasta tener un nuevo trabajo.
—Hablando de un nuevo trabajo —Shi Shanyan preguntó—, ¿cuánto tiempo sueles descansar?
—No lo sé —Yan Junxun alzó la cabeza para mirarlo—. Todos los días oro para que no suceda un caso.
—Yo también lo espero —los ojos Shi Shanyan eran encantadores a la vista de la luz—, pero esta clase de deseo es difícil de cumplirse en la realidad. Con el fin de poder cooperar mejor en el futuro, debes decirme... —introdujo un pedazo de pan en su boca—, ¿existe alguna clase de cuestión inaceptable en la serie de homicidios?
Yan Junxun escuchó las tres palabras "serie de homicidios" y sintió que podía olfatearlo. Su buena memoria había almacenado demasiadas imágenes para él, cada una de las cuales era un gran panorama de alta definición que podía magnificar hasta los detalles más minúsculos.
—No —Yan Junxun parecía tranquilo—. No hay nada que no pueda aceptar.
Panda estaba tarareando el tema musical del Canal de Naturaleza en la cocina, mientras controlaba el fuego cuidadosamente, sin percatarse de la conversación en la sala de estar en absoluto.
Shi Shanyan exploró las microexpresiones de Yan Junxun, tomándole el gusto a la mesa debajo de su codo, la cual los ponía frente a frente. Le encanta el lunar de lágrima de Yan Junxun y, frecuentemente, deseaba tocarlo.
Él lo tocaría. Podría utilizar su pulgar para acariciarlo con condescendencia.
¿Quizás aún podría escuchar los maullidos para entonces? Shi Shanyan interrumpió a la máquina expendedora en su cabeza, guardándola con la expresión de Yan Junxun en ese momento y quiso esperar hasta la hora de dormir para apreciarla repetidamente.
—Es muy difícil hacer este trabajo —Shi Shanyan dijo con un tono emocionado, aunque mantenía una expresión natural y seria—. Aún no tengo salario, así que, ¿por qué no huyes conmigo? —Él estaba bromeando a medida que escaneaba la pantalla de luz en La habitación. Aquí, también había vigilancia de la Pantera Negra—. Tengo una villa oasis en el Distrito Guanggui. La venderé y compraré un auto fly by light más veloz, por lo que nadie podrá alcanzarlo.
—¡Villa Oasis! —Panda salió de la cocina llevando una bandeja y escuchó esta oración, haciendo un sonido de exclamación—: Su precio total es el suficiente para que comamos carne de res durante varias vidas.
Una Villa Oasis era la mejor mansión en el Distrito Guanggui y no existía un área como tal en el Distrito Tingbo. Panda lo sabía por el espectáculo especial de bambú del día de hoy, donde muchos propietarios construían jardines botánicos pequeños y genuinos en sus hogares.
—Fu Chenghui te trata con mucha preferencia —Yan Junxun acercó el bistec justo frente a sus ojos, notando a su zanahoria favorita en la guarnición—. También te brindará un trato especial al perseguirte.
Ningún perro sería capaz de sobrevivir a la vigilancia de la Pantera Negra. Los miembros que habían sido expulsados, como ellos, simplemente eran monitoreados de otra manera y Fu Chenghui podría llamarlos a todos cuando fuera necesario.
Shi Shanyan cortó la superficie de la carne, con el cuchillo atravesando las tiernas partes jugosas de esta, sin encontrar ningún obstáculo en todo el proceso. Metió la carne en su boca y se echó a reír.
—En primer lugar, ¿quién no quiere asesinar a Fu Chenghui?
La carne estaba a término medio; el panda tenía el potencial para convertirse en un chef.
Yan Junxun mordió la zanahoria, sin responder.
—¿Qué vemos? —Panda se preocupó porque no estaban teniendo una conversación alegre y dejó que la pantalla de luz pusiera las noticias—. No hemos visto las noticias durante mucho tiempo... oh, esta persona también apareció la última vez.
Yan Junxun le dio un vistazo. La persona en la pantalla era Liu Chen.
Este hombre se había aseado, sin parecer que fuera él quien agitaba las piernas en la azotea del edificio hace dos días. Estaba sentado junto al anfitrión del programa, con un miedo persistente en su rostro mientras relataba:
—En ese momento, la situación fue realmente peligrosa y su sótano estaba repleto de sangre. Actualmente, la Oficina de Inspección ha confirmado que ese era el lugar donde se cortaban los cadáveres. —Le dio un vistazo a la pantalla—. En mi página de inicio, también escribí los detalles. ¿Cómo puedo decir que la persona más inocente en este asunto fui yo? Todos los informes que escribí se basaron en los resultados de los juicios de sus casos...
—Cambia el canal —Yan Junxun mordió la zanahoria—. No quiero verlo.
—... En esta ocasión, la Oficina de Inspección respondió con rapidez y les estoy muy agradecido, mas aún tengo que decir que se debe prestar atención a la evidencia al manejar un caso. ¿La Oficina de Inspección es responsable por los casos injustos, falsos e incorrectos como el de Huo Qingjun? Ah, aún existen muchas injusticias regionales. Anteriormente, siempre me centré en la "agresión sexual", pero ahora también reflexiono poco a poco sobre mí mismo y quiero ampliar mis horizontes para ver a otros grupos vulnerables. Insistiré en seguir defendiendo la injusticia social —Liu Chen dijo y meditó por un momento, pretendiendo ser reflexivo—. De hecho, al informar acerca del caso de Chen Xiulian, igualmente estaba trabajando en otro. No creo que muchos de ustedes aquí lo conozcan y también han muerto cuatro o cinco personas. ¿No han oído hablar de él? ¿Por qué? Porque todas las mujeres que han muerto eran prostitutas de profesión...
—Es como un perro con un agudo sentido del olfato —Shi Shanyan miró la pantalla de luz—. Entiende qué atrae la atención del público.
El caso de Chen Xiulian se relacionaba con la "agresión sexual" y, durante estos días, este era un tema viral en internet, por lo que Liu Chen comprendió rápidamente al "sexo" y aprovechó que el hierro se encontraba caliente para llamar la atención del público acerca del asesinato de prostitución.
La palabra "pervertido" era muy atrayente, así que Liu Chen la amplió en sus propias conversaciones y artículos con el propósito de satisfacer la psicología entrometida del público.
—¿La "señorita" posee derechos humanos? Yo pienso que sí —Liu Chen dijo con seriedad—. Este también es un grupo marginado, siempre necesitamos saber cómo se componen y la razón por la que serían así. El público no puede evitar estos temas por siempre. La Oficina de Inspección también está investigando el caso del que hablo, pero aún no hay ningún progreso. Por lo que sé, en este caso hay cuatro víctimas que han sido confirmadas fallecidas, todas de las cuales eran prostitutas...
(N/T/E: o xiaojie 小姐 también es una jerga para "prostituta".)
Jiang Lian se sentó en una silla, observando a Liu Chen mientras hablaba, pensando que este era similar a una cucaracha que no podría ser asesinada.
En cierto sentido, esta persona también era muy poderosa, al ser capaz de utilizar su propia experiencia como un punto de venta y siempre en un modo de salida, protegiéndose completamente del abuso verbal en internet. Su base moral difería de la gente común, diciéndolo muy pobre, le gustaba aprovechar la iniciativa en la manipulación de la opinión pública, sin nunca importarle las consecuencias.
(N/T/E: es un juego de palabras con "cucaracha", ya que, en sus caracteres "小强", "小" significa pequeño y "强" poderoso.)
Chen Xiulian no pudo despertarlo; él se encontraba vivo y bien, e incluso pisoteó sobre el cuerpo de Chen Xiulian para llevar su carrera al siguiente nivel.
—Nadie puede hacer que se calle... —Jiang Lian lanzó la información sobre el nuevo caso al escritorio—. Si la Pantera Negra le pide que deje de actualizar, será suficiente para que él diga que quien lo detenga está apoyando la dictadura de Fu Chenghui.
Viendo a Liu chen, sentía como si hubiera fuego en su estómago.
—Hay un caso nuevo, ¿quién dijo que todas las víctimas son prostitutas? ¡Ese estúpido!
Piao Lin y sus colegas guardaron silencio.
En este momento, el teléfono sonó y Jiang Lian pensó que le pertenecía a él, pero tan solo pulsó el transmisor de comunicación para descubrir que era el de Liu Chen el cual sonaba en la transmisión.
—Alguien me dijo que estaba dispuesto a responder este caso en detalle por nosotros. —Liu Chen hizo una espera y vio la expresión en la cámara, haciendo clic para contestar—: ¿Hola?
La persona del otro extremo tragó saliva, como si acabara de terminar de ejercitarse. Tartamudeó un poco, mas se encontraba con un buen estado de ánimo y respondió:
—Hola.
—¿Tienes algo que quieras contarnos? —Liu Chen preguntó amablemente.
El otro exclamó "oh" unas cuantas veces, pareciendo estar aclarando la espesa flema en su garganta. Pausó por un momento y dijo:
—Yo soy el asesino. Perfilador de la Oficina de Inspección, ¿lo escuchaste, uh, escuchaste?
De súbito, Piao Lin alzó su cabeza, sintiendo que la frecuencia de respiración y la velocidad de deglución eran muy similares a las de la llamada telefónica de anteayer.
—En medio, medio mes después... —la otra parte vaciló—, quiero asesinar a una más.
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Notas de Ada:
Como que se antoja que Liu Chen ahora sí haga un viajecito a los Manantiales Amarillos, jeje. ¿Será ese el Caronte del arco? Lo averiguaremos.