Ariel: ¡no puedes estar hablando enserio!.
Regina: si papá, no he sido una hija ejemplar como lo has creído todos estos años.
Lorenza: ¿Cómo dices que Miranda no es hija de ese hombre?
Regina: es la verdad mamá.
Ariel: ¿entonces quién es el padre?
Regina: no lo sé.
Ariel: ¿Qué estás diciendo? ¿A caso con cuantos te metiste? No puedo creer que mi hija sea una mujerzuela. -Dijo muy alterado-
Regina: ¡no lo soy!
Ariel: ¿ entonces como se le dice a una mujer que desconoce el origen de su hija?
Sofia: Regina no tuvo la culpa.
Lorenza: ¿acaso se aprovecharon de ti? - dijo mientras se acercaba a su hija-
Regina bajo su mirada.
Lorenza: hija, por favor dinos ¿Qué fue lo que pasó?
Regina sintió un nudo en la garganta que le impidió que sus palabras pudieran salir de sus labios.
Sofia: Lucia, su supuesta mejor amiga le tendió una trampa y la drogó en un antro, luego la dejó botada allí y alguien se aprovechó de la situación.
Ariel. ¿Eso es cierto?
Con lagrimas en los ojos Regina asintió con la cabeza.
Ariel: ¿Quién fue ese miserable?
Regina: no lo sé, no recuerdo nada.
Alejandro: no fue su culpa papá.
Ariel: ¿tú lo sabias?
Alejandro: hace poco lo supe.
Ariel: ¿por qué no me lo dijiste?
Alejandro: por que eso debía hacerlo mi hermana, por favor no la juzgues, solo fue victima de una mujer envidiosa.
Sofia: Regina no fue violada.
Ariel: ¿ Cómo puedes estar tan segura?
Sofia: porque en su momento la examinaron y quien sea el hombre con quien tuvo relaciones no la trató con violencia.
Ariel: no entiendo nada.
Sofia: es probable que ese hombre tampoco estuviera en sus cinco sentidos.
Lorenza: ¿y donde esta? ¿Por qué Lucia hizo todo eso? No comprendo.
Regina: Lucia estaba enamorada de Arturo y su plan era drogarme para arrojarme a los brazos de su primo Alan, y así Arturo nos sorprendiera juntos y terminara conmigo.
Lorenza: ¡por Dios que mujer tan malvada!.
Alejandro: ¿no has pensado que Alan pueda ser el padre de Miranda?
Regina: No Alejandro, Alan se rehusó a formar parte de ese plan, aunque fue al antro se arrepintió, jamás se acercó a mí.
Lorenza: ¿Quién te lo dijo?
Regina: el mismo me lo confeso.
Alejandro: ¿y tú le creíste?
Regina: no tenía por qué mentirme, estaba realmente apenado, Alan siempre estuvo enamorado de mí, por eso no aceptó tenerme a la fuerza, prueba de ello es que me dijo todo sabiendo que podría despreciarlo, está dispuesto a declarar a mi favor.
Lorenza: ¿hija, tiene eso que ver con la golpiza que te dio Arturo?
Regina: si mamá, Arturo no puede tener hijos, yo no lo sabia; cuando supe que estaba embarazada incrédulamente fui a decirle que tendríamos un bebé, por eso creyó que lo había engañado y desató toda su furia contra mi.
Alejandro: infeliz.
Regina: creyó que lo había engañado.
Alejandro: nada justifica la violencia y menos en el estado en que te encontrabas.
Lorenza: ¿Daniel lo sabe?
Regina: si, se lo dije hace tiempo, ha sido un gran apoyo, me ama tanto como yo a él y me acepta con mi pasado.
Alejandro: eso comprueba que es un buen hombre, el padre ideal para mi sobrina.
Lorenza: fue un noble gesto de su parte.
Regina: es muy bueno.
Ariel: hay que levantar una denuncia contra Lucia.
Regina: estoy dispuesta a hundirla.
Lorenza: ¿sabes en donde esta?
Regina: Arturo y Sofia se casaron, hace poco regresaron a la ciudad.
Lorenza: entonces consiguió quedarse con él.
Regina: si, pero eso no importa, quiero que ambos paguen por lo que me hicieron, ¿puedo contar con su ayuda?
Ariel: si hijita, vamos a llegar hasta las ultimas consecuencias, ese par lo van a pagar caro.
Regina: perdónenme por no haberles dicho esto antes, no me sentía preparada.
Lorenza: claro que si mi amor.
Regina: Sofia necesita de nosotros.
Ariel: no era lo que quería para ti, pero cuenta conmigo. - dijo acercándose a Sofia-
Lorenza: me alegra que no haya secretos entre nosotros, vamos a enfrentar todo esto como una familia unida.
Los 5 se dieron un fuerte abrazo.
Daniel y su madre llegaron al departamento.
Alicia: ¡vaya que día!, Miranda es maravillosa, se parece mucho a ti.
Daniel: y a Regina.
Alicia: es tan buena como ustedes dos.
Daniel: mañana invitare a comer a Regina, no puedo esperar mas tiempo para decirle la verdad, si te soy sincero, temo su reacción.
Alicia: sé cuánto la amas, pero es lo mejor, ¿vas a hacerlo mientras voy con mi nieta a comprar el vestido?
Daniel: si, Esperanza irá con ustedes.
Alicia: es lo mejor.
Daniel: bueno mamá, iré a dormir.
Alicia: que descanses hijo.
Daniel: tu igual.
Sofia: fue un error involucrarme con Gabriel.
Lorenza: tu hijo no es un error, estoy segura que vas a amarlo mucho.
Ariel: ¿De verdad no quieres hablar con Gabriel? tal vez haya recapacitado y por eso quiso hablar contigo hoy.
Sofia: no papá, huyo cuando supo de mi embarazo, yo voy a enfrentar esto sola, con el apoyo de ustedes, además tengo el mejor ejemplo, mi hermanita.
Regina abrazó a Sofia.
Ariel: bien, entonces, mañana a primera hora llamaré al abogado para interponer oficialmente una denuncia contra Lucia y Arturo, puedes pedirle a Alan que declare?
Regina: si, puedo ir a verlo el lunes en la mañana a su despacho.
Ariel: me parece perfecto hija.
Lorenza: por que no se quedan a dormir aquí, es un poco tarde para que unas mujeres solas salgan a la calle.
Alejandro: eso es cierto.
Esperanza: es una buena idea, además la criatura sigue dormida.
Regina: si, es mejor no despertarla.
Todos se despidieron y se fueron a dormir.
Al día siguiente Ariel llamo a sus abogados, colgó en cuanto sus hijos y esposa se acercaron a la mesa a la hora del desayuno.
Regina, Alejandro, Sofia: Buenos días pa
Ariel: buenos días hijos, como durmieron?
Regina: bien.
Alejandro: muy bien.
Sofia: más o menos.
Lorenza: quita esa carita, olvídate de ese cobarde y piensa en lo hermoso que será la llegada de tu bebé.
Sofia: ¿bueno es que todavía no puedo creerlo, Regina me acompañas mañana al ginecólogo?
Regina: claro
El teléfono de Regina sonó, era un mensaje de Daniel.
Daniel: "Mi amor buenos días, mi madre pasara por Miranda y Esperanza en un par de horas como quedamos ayer, ¿Qué te parece si aprovechamos y salimos a dar una vuelta los dos solos?
Regina: buenos días mi vida, claro que sí, te espero.
Daniel: te amo.
Regina: no más que yo"
Después de desayunar, Alejandro se llevo a Sofia a un orfanato para llevar a cabo unos pendientes, quería convencer a su hermana que su hijo iba ser muy afortunado, Por su parte Regina, Esperanza y Miranda regresaron al departamento.
Alan salió a correr por los alrededores de su casa, a lo lejos pudo ver a su prima Lucia y Arturo que corrían en la misma dirección.
Arturo: mira, es tu primo. – dijo señalando-
Lucia: ah sí.
Arturo: vamos a saludarlo.
Lucia: ¿estás loco? yo no saludo a traidores.
Arturo: ¿y qué fue lo que te hizo para que estés tan molesta con él?
Alan prefirió darse la vuelta e ignorarlos.
Lucia: no preguntes.
Daniel y Regina se saludaron con un beso y de inmediato se despidieron de Miranda.
Regina: te portas bien.
Daniel: obedeces a Esperanza y tu abuela Alicia.
Miranda: si mamá, si papá.
Al quedarse solos en el departamento, Daniel quiso aprovechar para ir preparando a Regina.
Regina: ¿Qué tienes?
Daniel: Es que no sé como decirte, es algo muy importante.
Los ojos de Regina se abrieron con gran sorpresa.