Y más parloteo ofensivo hacia alguien, por supuesto mi madre no podía faltar, pero decidí ignorarlas y mirar hacia esa dirección, una mujer de piel blanca, cabello corto debajo de sus orejas y color castaño, los colores fluorescentes de su vestimenta llamaban más la atención entre tanto blanco y negro de los demás, había algo en ella que se me hacía conocido.

—Solamente porque se sacó la lotería casándose con Sallow, cree que es parte de nosotros.—Escucho a otra mujer, la envidia resalta en su voz.

Pronto su interés por aquella mujer pasa a segundo plano, por la aparición de alguien, que para mí sorpresa reciben con mejores comentarios.

—Desearía tener un par de años menos, y no estar casada con un inútil como Phill.—Se burla y lamenta la mujer de piel oscura.

—Querida, ya no es necesario en esta época tener menos, somos más llamativas nosotras.—Suelta otra con satisfacción mirando hacia aquel hombre tatuado.

Analizo las pícaras miradas de las mujeres antes de verlo sin ninguna pizca de interés, lleva la vestimenta masculina del club color negra.

—Cálmense, chicas, ese es mi futuro yerno.—El comentario de mamá causa que la mire de reojo con gran indiferencia e irritación, encontrándome también con su atenta mirada, al parecer confundió que lo estuviera viendo.

—Harían muy linda pareja.—Escucho a una con fingida amabilidad hacia el cumplido.

—Yo que tú no me haría tantas ilusiones, querida, Clapton no tiene ningún historial con chicas...—Ni siquiera él se escapa de un par de malos comentarios, la mujer rubia eleva sus cejas y bebe de su vaso con líquido rosa.

—Rumores tontos, Tiana.—La molestia en el tono de mi madre es notoria, y aquello causa que la media sonrisa en el rostro de la rubia desaparezca ante la seria expresión de la mujer pelirroja.

—Buenos días, señoras.—La lenta y ronca voz se hace presente sobresaltando a las demás de la mesa.

Mamá cambia su expresión tan solo escucharlo, yo desvío mi mirada hacia otra parte del lugar, desinteresada de los hipócritas saludos hacia él y el entusiasmo de mi madre.

En la mesa más alejada de la piscina, encuentro a la mujer de cabello corto castaño, pero esta vez acompañada solamente puedo ver la espalda marcada y bronceada masculina, unos pantalones cortos negros y sus manos cubiertas por una tela del mismo color, su cabeza rapada y un par de dibujos decorando su cuello y hombros, veo su intención de mirar sobre su hombro, pero alguien me interrumpe.

—Me podrías acompañar unos minutos.—Aquel ronco susurro causa que mi cuerpo se estremezca, siento su cálido aliento acariciar mi mejilla y oído.

—Está bien.—Reacciono, me coloco de pie consciente de las miradas femeninas llenas de sorpresa, intriga y satisfacción por parte de mi madre.

Aún no puedo tener a Tyron conmigo, mi madre es demasiado inteligente y solamente lo alejaría más de mi, ella piensa que es una distracción para poder conquistar a Trece, pero yo solamente estoy interesada en tener a ese pequeño conmigo, no en un hombre.

—Estabas muy cómoda con aquellas arpias.—Lo escucho pronunciar con sarcasmo, yo solamente giro mis ojos con gran descaro.

CRUEL.Wo Geschichten leben. Entdecke jetzt