[✓] ❛️️️️❛BODYGUARD❞ - Ao3 Traducción [TERMINADA]

CAPÍTULO 17.

Obra Original: inspirations_whisper

Capítulo 17.

—Una vez más,— dijo Draco en voz baja, y Hermione le dirigió una mirada dolida.

Estaba agotada. Ya llevaban tres horas practicando. Mucho más de lo habitual. El reloj seguía contando atrás, pero ella intentó ignorarlo.  Ese día, sin embargo, todo la estaba poniendo de los nervios. Se cansó más rápido. El sudor corría por su cuerpo a chorros, y el vil sádico que era su guardaespaldas personal no tuvo piedad. Con cada fracaso repetía lo mismo. Una vez más. Y todavía. Hasta el final. Pero ese efecto no llegó.

Desde hace tres semanas se realizan ejercicios conjuntos sobre el escudo no verbal. Después de las dos, logró extender el alcance del escudo a su cuerpo desde la cintura hacia arriba. Las piernas todavía estaban expuestas. No podía soportar la transferencia de magia a las partes inferiores de su cuerpo.

Utilizando su propia experiencia, le explicó cómo debía actuar. Al ver que volvían a tener problemas, le aconsejó que utilizara los métodos de Nott y Zabini. Cuando eso no funcionó, comenzaron a usar prueba y error.

Toda la semana pasó así, pero no hubo avances.  Hermione encontró un bloqueo que no pudo superar, lo que la llevó a un sentimiento de frustración cada vez más fuerte. Draco no pudo ayudarla, aunque quisiera. Él vio que la única solución era invadir su mente y encontrar el bloqueo, pero ese comportamiento era inaceptable tanto para él como para ella. Tenían que encontrar otra solución.

El escudo vibró levemente y volvió a ondularse, extendiéndose por todo el cuerpo, y al momento siguiente solo cubrió la mitad. Hermione se concentró más, usando toda la fuerza que le quedaba. La magia se retorció, siseando peligrosamente. El capitán gritó una advertencia mientras aparecían chispas azules electrificadas.  Su grito agudo no ayudó y empeoró las cosas porque la bruja perdió la concentración. Era sólo cuestión de tiempo que volviera a estallar.

Draco la alcanzó, la agarró del brazo con fuerza y ​​la alejó del lugar de magia condensada. Arrojó su escudo y la protegió de la cegadora descarga de poder mágico. Luego, la agarró por los hombros y la sacudió suavemente.

—Granger, concéntrate o nos matarás—, la regañó y ella suspiró con resignación.

La fatiga estaba pasando factura, así que todo lo que podía hacer era tratar de controlar los temblores en todo su cuerpo. No había logrado ocultar su estado, se quejaba Morgano, el capitán era demasiado buen observador. Dio un paso atrás y comenzó a murmurar hechizos de limpieza mientras le decía que se tumbara en el suelo.

Haciendo caso omiso de su tono autoritario, ella cayó sin fuerzas al suelo. Ella respiraba con dificultad. Sintió cansancio en todo su cuerpo.  Definitivamente estaba forzando sus fuerzas y agotando sus reservas de poder mágico hasta el punto del agotamiento extremo.