La entrevista

Capítulo 5

POV Natalia

- ¿Yo? ¿Miedo a perder? Si sueñas loterías, Reche- guiñé un ojo y ella soltó una carcajada- pero ¿yo que gano?

- Te dejo elegir, total ¿para qué caldearme la cabeza si vas a perder igual? Pero, si gano yo me tienes que dejar hacerte 5 preguntas y contestarme a todas con total sinceridad, y además me tienes que invitar a comer.

- Hecho, pero lo de las 5 preguntas ¿por qué es?

- Me las reservo para mí, no te las voy a hacer todas de golpe si eso es lo que te preocupa.

- No me preocupa porque igualmente vas a perder así que...- me encogí de hombros risueña y ella respondió sacándome la lengua.

- Ya lo veremos Lacunza, ya lo veremos.

Fuimos a pagar y pese a mis plegarias para que me dejase pagar algo, ella lo pagó todo y salimos del supermercado rumbo a su apartamento. Yo tenía que pasar por casa para arreglarme porque se me había echado la hora encima, pero estaba tan feliz por poder pasar un ratito más con ella, no estaba acostumbrada a volver a sentirme completa.

- Oye Albi, te explico, yo tendría que estar arreglándome ahora mismo que voy súper justa, ¿te importa que me desvíe para mi casita? Te juro que no tardo nada.

- Bueno, me pienso entonces si luego te dejo entrar.

- ¿Enserio? - pregunté asustada, pensando que en verdad no iba tan mal como iba vestida.

- Claro que no tonta, pero no tardes mucho porfa.

- Tardo poquísimo te lo juro, voy corriendo, ni flash va a ser más rápido que yo.

- Corredoras, a sus puestos - me puse en la posición de salida de las atletas y ella soltó una carcajada que si bien no se escuchó en toda la calle, resonó por cada ápice de mi ser haciendo que mi corazón despertase de su letargo. - ¿Enserio Nat?

- Venga va que me va a dar un calambre - ella sonrió.

- Uno... Dos... ¡Y TRES!

Salí corriendo mientras escuchaba como Alba no paraba de reírse, corría para soltar toda la emoción que había contenido, corría sonriendo porque por fin había visto la luz al final del túnel, corría desquiciadamente feliz porque ella había vuelto a mi lado. Estaba apunto de llegar a mi casa así que fui frenando poco a poco, pero justo cuando ya estaba parando me tropecé con un bordillo y me caí, me quedé en el suelo riéndome sola, vi a un matrimonio con una niña pequeña mirándome raro y aumentando la rapidez del paso pero me daba igual, yo estaba feliz estaba contenta, por fin estaba en mi sitio (stream TQSPM). Me levanté del suelo con la poca dignidad que me quedaba y entré en mi portal.

POV Alba

Me quedé mirando como aquel metro ochenta de mujer se iba corriendo como si fuesen las olimpiadas y no pude evitar sentirme afortunada de volver a tenerle en mi vida. Sonreí algo nostálgica cuando terminó de desaparecer de mi campo de visión, subí a mi casa y vi a la Mari tumbada en el sofá y toda la paz que tenía en el cuerpo se esfumó de un plumazo.

- MARÍA VILLAR ¿NO HAS PREPARADO NADA? LA FIESTA ES EN MEDIA HORA- pegó un bote digno de un récord guinness y me miró asustada.

- ¿Cómo que media hora?

- Queda media hora María, media hora. - suspiré para intentar calmar mis nervios. - Vale, pon la mesa por allí - dije señalando el final del salón.

Seguí dando indicaciones mientras me encargaba de poner la bebida en el frigorífico, en cuestión de escasos minutos conseguimos apañarlo todo más o menos bien, no tan genial como me hubiese gustado pero no podía quejarme tampoco.