Duda de que ardan las estrellas (Felicia Hardy x Miguel O'Hara)

I.

Había causado un pequeño alboroto desde que entró en el edificio con su pase de invitada casi escondida entre el pelo de los guantes, no le gustaba el alboroto que se había causado en torno a ella. Ya había leído el informe que le habían presentado y teniendo en cuenta que Jessica estaba de acuerdo, no había mucho más de lo que quejarse antes de verla por primera vez. No es que ese tipo de spandex o lo que quiera que fuese el material del traje fuese algo desconocido para ellos, pero aun así se las había arreglado para llamar la atención entre todo el cúmulo de spidersonas.

Peter estaba al lado como apoyo absoluto y por un día podía decir que estaba bastante presentable. Quizás porque la mujer que estaba a su lado era su exnovia y había algo de orgullo escondido en su pecho queriendo no hacer el ridículo con ella delante. Miguel había conocido brevemente a Mary Jane y ya había pensado en que parecía fuera de su liga, pero la mujer que había a su lado le hizo dudar de todo lo que creía y pensar que quizás lo de que no había nada mejor que el humor para seducir a una mujer no era un tópico manido.

Hasta su nombre era seductor al pronunciarlo en voz alta. Felicia Hardy. Black Cat. Gata Negra. Una ladrona reformada con un poder no demasiado importante pero sí altamente interesante. Felicia no era un evento canon, pero sí solía aparecer como una constante en la vida de los Peters, ya fuese como  socia o como algo más. Había escuchado de las variantes, desde novias de Peter, a salir con auténticos impresentables, reformar su vida, vampiros... Alejó eso último de su cabeza, no era que fuese la única criatura de todo el multiverso que tenía conocimiento de gente con su condición, además, no era esa Felicia la que había acabado con el vampiro. La Felicia que tenía delante y lo miraba todo con una actitud despreocupada pero claramente analizando todo a su alrededor no era la de esa tierra. 

Estaba cuchicheando con Peter tratando de que no se notase, pero aun así el comentario entre dientes de que "ese no se salta un día de gimnasio, ni el de piernas" le llegó claramente, aunque intentó hacer oídos sordos. La plataforma por fin bajó hasta su altura y no pareció amilanarse pese a que estuviese clavando sus ojos directamente en ella, le mantuvo la mirada con una firmeza impresionante. Puede que no tuviese sentido arácnido, pero sabía reconocer los problemas cuando los veía, aunque estuvieran envueltos tan bellamente.

—Miguel O'Hara, te presento a Felicia Hardy —pese a que era obvio que era Peter quien lo había organizado todo, fue Jessica quien inició la conversación—Te hablamos de ella y de su puesto y como necesitamos de alguien que sepa hacerlo tan desesperadamente. Y Felicia es la mejor en esto.

—Gracias Jess, ha sido muy amable de tu parte, aunque solamente hayas dicho la verdad —le extendió la mano y se encontró devolviendo le el apretón en automático. Era un apretón firme, no tenía super fuerza, pero estaba entrenada, no había duda. También notó las garras afiladas rozarlo levemente— Me enteré de todo gracias a que uno de los otros me confundió con la suya que había muerto trágicamente, uno que era ofensivamente joven quiero decir. Y vale, no quiero decir que el terapeuta que tenéis aquí no esté haciendo su trabajo, pero yo llevo bastante tiempo dedicándome a tratar con jóvenes con poderes que están yendo por el mal camino mejor de lo que he comprobado que se está haciendo aquí. Mis credenciales son las que son y al parecer la última fase que tengo que superar es que la cabeza de la organización dé el visto bueno, así que... ¿Cuándo empiezo?

La confianza estaba bien, pero demasiada podía hacerle daño. Por no hablar de que estaba seguro de que era una pose, reconocía la pose en cualquier sitio porque ese edificio estaba lleno de gente rota que aparentaba ser personas confiadas con un gran sentido del humor. Le soltó la mano.

—¿No eres canon? —se lo preguntó a ella, esperando que ninguno de los otros fuese a contestar por ella.

—Según me informaron tras investigar, somos una constante en los universos, pero no lo que llamáis evento canon —la habían instruido bien sobre eso y tenía facilidad para la palabra, eso podría traerle problemas—Hay una Felicia millonaria en un universo, imagina. Pero no, nosotras no somos un evento canon. ¿Gwen? Un canon trágico. ¿MJ? Puedes apostar el culo que el gran amor siempre marca. ¿La gata y la araña? Una decoración de Halloween, algo transitorio y muy divertido, pero no diría que es algo que le cambie la vida a nadie—levantó una mano para hacer callar a Peter, lo había visto venir a hablar por ella y quería defenderse ella sola— Se supone que debemos ser una de esas cosas que les ayudan a pasar de un trauma a buscar al amor de su vida. Somos el apoyo emocional en sus vidas. Ni siquiera hay Felicia en tu universo, ¿verdad, O'Hara?