Fue lo último que dijo para después, dar su último parpadeo y esas habían sido sus últimas palabras, su último deseo fue ver aquellos ojos, los ojos verdes que eran idénticos a los de su amada Lily Evans.

Alyssa, se quedó mirando un punto fijo, pero se dio cuenta que se estaba volviendo más débil que los últimos meses.

Despreocupada, se levantó caminando de regreso al castillo, restándole importancia que la sangre de su profesor se encontraba en su mano y está era bastante al extremo de que cayeran pequeñas gotas de sangre al suelo.

Hasta que comencé a marearme, mi cicatriz dolía y mi nuca también, me mantuve de pie afortunadamente pues en cualquier momento podría caer al suelo.

— Han peleado con valentía...– se oía como el susurró de una serpiente, y era como si aquella voz fuera hablando dentro de su cabeza. —....pero en vano. Yo no deseo esto, cada gota de sangre mágica derramada, es una grande perdida, por lo tanto le ordenó a mis fuerzas que se retiren. En su ausencia dispongan de sus muertos con dignidad, Harry Potter, ahora me dirijo directamente a ti. Esta noche, permitiste que tus amigos murieran por ti, en lugar de enfrentrame en persona, no hay una peor desonrra, encuentra me en el bosque prohibido y hazle frente a tu destino. Si no accedes a esto, mataré hasta al último hombre, mujer y niño que trate de esconderte, de mí..

[.....]

— ¿Dónde están todos?– pregunto Hermione mirando el castillo destruido, entrelazando su mano con la de Aly.

Pronto entraron, las puertas del gran comedor se había abierto, estaban viendo todo ahí, los pensamientos de Alyssa no pudieron ser más pesimistas, pues no dejaba de pensar en todo lo que sabía.

Era en verdad difícil de procesar tanta información, y ver aquel castillo, entrando por aquellas puerta le hizo volver años atrás, haciendo que se estremeciera, la primera vez que había entrado eran bastantes nervios los de ella.

Estaba asombrada por lo que veía, todo era realmente hermoso para ella, se sentía un hogar tan acojedor. Era tan bueno para ella estar ahí, sin tener que soportar el maltrato de los Dursley, pero pronto su gran momento se arruinó, pues no dejaba de pensar en su hermano menor.

El primero en adentrarse al gran comedor fue el pelirrojo que tenía un semblante que asustaba a Alyssa, pero sabía que aquella expresión la tenían todos, Hermione la arrastró con ella, le dio un ligero apretón haciendo que se detuviera.

— Debo charlar un poco con Harry, ¿Si? – dejo un corto beso en los suaves labios de Hermione, claro que se volvieron suaves en cuanto se humedieron pues por la falta de bebidas estaban secos.

Hermione asintió, Aly le regaló una gran sonrisa que tomo por sorpresa a Her, pero aún así sintió un gran alivio al ver aquel brillo en los ojos de su chica, y esa sonrisa tan radiante que le causaban cosquilleos en las manos.

Tome la mano de Harry y camine con lentitud con él, pronto me di cuenta que ambos teníamos sangre en las manos y eran con las que nos tomábamos de la mano.

— Harry..– saludo Slughorn, sin atreverse a mirar a Alyssa, pues los rumores eran ciertamente extraños y confiaba en aquella chica pero no le convenía ahora mismo acercarse a ella.

En lo que caminaban miraban todo a su alrededor, nada parecía estar con una pequeña luz y la única que mantenía una sonrisa, una real, era Alyssa, que pensaba mantenerse positiva sin importar que.

Inefable [Hermione Granger] CorrigiendoKde žijí příběhy. Začni objevovat