Park Jimin se puso como objetivo recuperar a la mentirosa y engañosa Yoo Jeongyeon, pero el problema es que no sabe cómo hacerlo. Él definitivamente lo logrará, o al menos eso cree.
Yoo Jeongyeon se puso como objetivo principal olvidar al dulce y ro...
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- ¿Estás seguro de que vendrá? - consulto a Sungwoon.
- Por décimo tercera vez, sí, eso dijo – responde irritado, realmente no le he preguntado tanto, solo unas pocas veces.
Miro mi vaso medio lleno con jugo, tal vez tomar un poco de alcohol me tranquilice, aunque si bebo no podré regresar a casa por mi cuenta. Y eso conllevaría a un sermón tan grande como el Atlántico por parte de mi querido líder, que últimamente está más gruñón que de costumbre.
Veo a unas caras conocidas en el departamento de Sungwoon, que han venido para festejar su cumpleaños tardío, que ha sido organizado para que yo pueda hablar con Jeongyeon, y hasta ahora el plan ha fallado miserablemente.
Las personas solo me saludan con una sonrisa nerviosa y nada más, nadie me habla, y creo que es debido a que me tienen alguna especie de miedo ya que BTS se ha vuelto internacional y piensan que me he convertido en algo intocable, pero sigo siendo el mismo de siempre.
Lo malo es que a mí también me da cosa comenzar a hablarle a alguien de la nada, siento que voy a fallar y me haré pis encima, por eso solo hago lo mejor y sonrío y saludo a los que me saludan. Sungwoon es el único que de vez en cuando viene a hablarme, tiene que atender a todos, es su fiesta después de todo.
Luego de otros dos vasos de jugo, al fin veo a mi objetivo cruzar la puerta. Se ve aterradoramente hermosa, ella siempre es hermosa, pero el día de hoy rompió con todo. Es tan perfecta que seguro la van a condenar por lo increíble que luce.
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Mi corazón automáticamente se pone feliz, trato de ocultar mi sonrisa, pero es imposible. Me siento tan feliz poder verla de nuevo.
Comienzo a atender todo lo que hace y puedo contar claramente tres obsequios, lo que despierta mi lado celoso. ¿Por qué le tiene que dar tantos? ¿No pudo traer uno para mí? Bueno, teóricamente no sabe que estoy aquí así que no puede saber que tiene que traerme un obsequio.
Luego de un rato de presentarse, se acerca a mí sin notar mi presencia y es ahí donde aprovecho para poder hablarle un poco.
- ¡Hola Jeongyeon, ha pasado un tiempo! – saludo amigablemente desde las sombras, nada terrorífico. Ella se sobresalta, claramente asustada al verme.
