Sus manos tomaron posesión de las suaves caderas, apretando la tierna piel, los labios de su amante rozaron los suyos con suavidad hasta que se posaron en los suyos, sus bocas se enredaron en un indecoroso beso, lenguas entrelazándose suavemente, presionando, buscando dominar. Con un sonido de su garganta se hizo cargo del abrasador beso, devorando aquellos labios que se dejaron hacer gustosos con un sonido pequeño, sus manos apretaron las caderas hacia abajo, mientras sus caderas empujaban hacia arriba; ambas bocas se separaron con un chasquido húmedo, conectados por un pequeño hilo de saliva, los labios inflamados dejaron escapar un trémulo suspiro, mientras el dueño de estos empujaba hacia abajo, meneando onduladamente las caderas.
Con un gruñido apenas prescindible se lanzó de nuevo a aquellos labios, listo para devorarlo, sin embargo, el ruido de la puerta siendo tocada de manera estrepitosa los hizo separarse, con un sonido molesto acomodo mejor el cuerpo sobre su regazo, el mismo se dejo manejar, hundiendo su rostro en el cuello ajeno para dejar un beso suave.
-Pasa -su voz salió ronca, fuerte y con un dejo de molestia. Nadie lo interrumpía cuando estaba con su omega.
La pesada puerta se abrió dejando ver a la persona tras ella, ojos marrones le devolvieron la mirada, sus ojos estaban ligeramente abiertos y su olor estaba bañado en miedo, desde donde estaba podía observar el sudor empapando la frente de aquella persona.
-Liam, ¿a qué se debe la molestia? -Con extremo cuidado acaricio la pierna de su omega, sus dedos recorriendo los muslos suaves bajo su toque. -Como puedes ver estoy un poco...eh indispuesto-su voz salió algo burlona pero seria, dando a entender que esperaba que para lo que fue interrumpido fuera importante. Su omega dejo salir una pequeña risa sobre su cuello antes de despegarse del mismo, para ver a su alfa con un pequeño puchero- Habla- ordeno de manera ruda.
Liam titubeo un poco, pasándose las manos por el cabello, estirando su traje y sus ojos miraban cualquier lugar en la habitación menos a él- Hubo un problema con el ultimo eh encargo que hiciste-murmuro de manera apresurada, finalmente viéndolo a los ojos.
Con cuidado tomo a su omega de la cintura, apretándole suavemente, el mismo bajo la vista, posando sus ojos verdes sobre los suyos, con un simple gesto se recargo más en el pecho del alfa, posando sus penetrantes ojos en Liam.- Habla Liam, estoy consciente de cual fue el ultimo encargo de mi marido-murmuro de forma burlona, sus ojos brillando con malicia.
-Se negó a hablar o soltar alguna palabra que no fuera el nombre de tu omega-Louis sintió la sangre hervir en sus venas y podía sentir como sus colmillos mordían suavemente su labio inferior, su agarre se apretó en torno a la cintura del susodicho- Sabes que no hablara, a menos que sea Harry quien le haga hablar.-La voz de Liam sonó un poco cansada, sus manos ahora se encontraban dentro de los bolsillos de su pantalón, ojos cafés, fríos, calculadores.
-Puedo hacerlo Lou-La voz de su amado lo tomo desprevenido, sus ojos verdes estaban posándose en su cara, labios ligeramente partidos. - Solo hablare con él, puedes decirme que es lo que quieres que pregunte y sabes que lo obtendré-Le susurro de manera seductora, una de sus manos jugueteando con el bordillo del cuello de su camisa. Con un suspiro apretó la mano que tenia sobre el muslo de Harry, resignándose.
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