El infierno

Capitulo 2

Estamos perdidos en un lugar, ¡EL INFIERNO! hemos estado aquí varias horas, faltan 5 horas para que sea de día, pero claro, en el infierno todo esta en llamas, no hay día ni noche, estamos a la deriva en un castillo muy raro, bueno, voy a contarles que pasó. Después de que Gabriel desapareciera nosotros decidimos saltar en un demonio, para nuestra suerte el demonio se dio cuenta de que estábamos encima de el, comenzó a dar vueltas, estaba una mano sujeta al ala del demonio, y la otra sosteniendo la mano de Cheska, estoy a punto de perder el agarre, el demonio se estrelló contra una pared y la rompió, estaba inconsciente, nosotros con raspones por todos lados, el despertó, estaba entre la pared y el vacio, antes de que estirara su grande mano llena de sangre, la pared se reconstruyó, el demonio se partió a la mitad, ¡NO PODÍAMOS SALIR! era una fortaleza que si la rompes se reconstruye, es un cuarto sin salida, tenia una ventana de rejas, pasamos la mayoría del tiempo pensando de que era nuestro fin.

Ya son la 1:30 a.m y seguimos aqui, Cheska esta llorando, intento animarla, pero es inútil, tenemos hambre...

-Oye creo que el viene para acá- dice Cheska con voz temblorosa.

-Vaya, unos nuevos humanos- dice una sombra afuera- Carne nueva, creo que al Rey le gustará ver esto- suelta una carcajada.

De repente, rompe la pared y dice -Salgan rápido, o quieren terminar como el de aquí- dice señalando al demonio que nos trajo.

Nos agarra con su mano, nos pone en su pie- Agárrate duro, o caerás al vacío- le dice a Cheska con una sonrisa picarona. 

-Eh tú, cuidado- me dice con un tono de voz dominante, y yo asiento con la cabeza, comienza a volar muy rápido, suelto un leve grito y me regresa a ver sonriendo -¿Le temes a las alturas?- dice con una sonrisa de oreja a oreja.

-S...si- digo con miedo.

-Entonces voy más rápido- comienza a agitar las alas que generan una ola de viento muy fuerte, se siente como si fueras un perro sacando la cabeza por la ventana de un auto, pero con miedo de caer. No se donde estamos, me desmaye después de que dijo rápido, pero estoy encadenado, me aprieta mucho la pierna, no hay rastros de Cheska ni de Gabriel, es del tamaño de mi casa esta habitación, tengo miedo, se escuchan uno leve  susurro detrás de la puerta llena de sangre. Ahora que lo pienso, creo que no era mala idea quedarse en casa viendo películas.

-¡Eh tú!- dice una sombra en la puerta, mientras abre la puerta un escalofrió recorre mi cuerpo, si los anteriores demonios eran gigantes, este es el triple de grande que los demás.

-El Rey te está llamando- dice con una sonrisa llena de maldad, ni idea de quien es el Rey, ¿será el Diablo?, todas las religiones hablan de el como el Rey del dichoso Infierno, pero ¿Y si no es el y solo son mitos?, bueno, en realidad el infierno era un mito, hasta que decidí montarme en ese pobre demonio. Tengo una bolsa en la cabeza, supongo que imaginan que me voy a aparender el camino si me escapo y comienzo a matar a tod..

-Al fin has llegado- dice una voz grave mientras me sacan la bolsa y me ponen de rodillas.

-¿Y tú eres...?- digo muy asustado.

-¡Ey!- dice el demonio, bueno, para no decir demonio y confundirnos lo vamos a llamar Juan. Me pone la mano en el cuello y saca sus garras, creo que es todo.

-¡Déjalo en paz!- dice Cheska asustada, abro los ojos y veo que "El Rey" le dice que se aparte.

-Yo..- dice- me llamo Asmodeus o como me llaman los humanos Asmodeo.

Enserio "El Rey" es el demonio Asmodeo, el demonio que no forma parte del protestante ni del judío, pero sí del canon católico, su origen es en la religión mazdeíta de los persas, es una leyenda, pensé que era El Diablo o Belcebú, o lo máximo sería Damballa, pero no Asmodeo, el supuesto padre de Merlín, bueno, yo le decía el demonio de los ojos saltones, siempre estuve investigando sobre el, hasta me leí los libros de Tobit y Talmud, nunca imaginé que lo tendría a 20 pasos de humano hacia mi.

- Asmodeo, te diría que tienes mi respeto, pero para que nos trajiste hasta aqui, y ¿dónde está Gabriel?- digo moderando el tono de mi voz sea grave.

-Traiganlo- dice a dos demonios que están a la par de el, minutos después lo traen.

-¿Es este?- dice mientras le sacan la bolsa, definitivamente es el, está muy asustado y su nariz sangra.
-¡SI!- digo gritando y corriendo hasta el, algo me detuvo, pero nadie me está sosteniendo, regreso a ver a Asmodeo y veo que está con su mano estirada, sus ojos saltones se pusieron en negro absoluto, y veo que una capa roja cubre mi cuerpo, es su magia, por más que intento moverme, no puedo, solo me deja mover la cabeza. Con su magia me está atrayendo a el, me pone cara con cara, puedo ver algo en sus ojos, me quedo hipnotizado, de repente aparezco en un mundo lleno de llamas, el está al frente mio, está con las manos llenas de sangre, hay más demonios que están esparcidos por todo el campo, son miles de demonios.

-Eres valiente- me dice con una leve sonrisa- ¿sabes que es esto?- dice mientras yo niego con la cabeza.

-Esta es la Tierra en una semana- dice mirándome fijamente a los ojos, tengo miedo, me está mostrando el futuro de nuestro planeta, tengo que impedir...

-¿En qué piensas?- me dice, juro que me había olvidado de que estaba allí.

-Qué has hecho?- digo con mucha, pero mucha rabia.

-He cumplido mi destino- dice limpiándose la sangre con la lengua (es muy asqueroso) 

-¿D...destino?- digo temblando del miedo.

-Si, hay algo que tu mundo no ha contado sobre mi, en el siglo VI antes de "Cristo"- dice haciendo las manos en comillas- vine para dominar tu mundo, pero alguien me derrotó, TARQUINIO IL SUPERBO el rey de Roma en ese año....