El llamado a la Luna #3

XLI

James:

Sofía se encuentra en el jardín jugando con la nieve.

Hemos tenido una pelea en grande y ahora ella no quiere ni verme.

¿Por qué? Pues porque bella testaruda me recriminó el hecho de castigar a Melan, esa mocosa se lo tenía ganado por deshonrar la manada.

Fui lo más leve posible en cuanto las leyes de la Diosa me lo permitieron, Melan sanó completamente en un par de horas, es una alfa, su regeneración y resistencia al dolor es increíble.

Cuando interrogamos a Melan ella simplemente dijo que las cosas sucedieron, que estuvo de acuerdo con Iván en ser marcada de último momento, con una sonrisa burlona me miró como si se tratara de nada y dijo: Está hecho James, no podemos dar un paso atrás.

Sé perfectamente que mintió, lo que no entiendo es el porqué.

Después de esa confesión frente a tantos miembros de la manada... Simplemente su castigo no podía ser suave, realmente hice lo que pude para darle el castigo menos doloroso.

No puedo entender el porqué de sus acciones recientes, le di un lugar en mi manada, pero ella decidió traicionarme, solo la Diosa sabe que es lo que pasa por su cabeza, o qué más está ocultando.

Habíamos decidido que sería mejor que Klaussen se la llevara, pero con la inesperada llegada de Cherencov ahora Melan es importante.

Vive en una cabaña abandonada fuera de la manada, Klaussen ha regresado a Rusia puesto que es el “Alfa”, pero prometió volver por ella.

-Señor- Entra Javier con un traje -Ya está listo todo para la luna roja, aquí están sus cosas-

-Gracias Javier, puedes dejarlo en mi habitación-

Tengo un plan para que Sofía me perdone, hoy es luna roja, muchos lobos se transformarán, y nuestros lobos internos podrán gozar de una noche libre, controlando el cuerpo humano que compartimos.

Sonará impresionante, pero en realidad es cuando estamos más débiles pues no podemos transformarnos por una semana entera.

La ceremonia se hará en la ciudadela como todos los años, después de eso, sedaremos a los lobos que aún no encuentran a sus mates para que no marquen o sean marcados por alguien más ya que también comienza la semana de celo.

Senka Vackorovich:

-A volar Senka, a volar-

Dominic se encuentra en mi espalda mientras damos un paseo, últimamente he podido pasar más tiempo con ella, aunque por una extraña razón su sangre me llama.

No he sentido esto antes, pero ahora solo quiero incrustarle mis colmillos ya que el aroma de su sangre es muy atrayente.

-Dominic- Le acaricio su cabello blanco, toda ella parece echa de nieve.

-Quiero seguir jugando- Dice entre pucheros.

-Tienes que quedarte aquí, Erel y Rachel te cuidarán-

-¿De veras te tienes que ir?-

-Si, pero volveré pronto, es una promesa-