Ese día

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Me levanté de la cama, yo sola, porque sabía que día era.

¡Mi cumpleaños!

Diana estaba en su cama, durmiendo. Corrí hacia ella y le empecé a hacer cosquillas y le grité "¡Es nuestro cumpleaños!".

-¡Ya lo sé!-Dijo aún dormida-Déjame dormir, Caroline.

Me fui de su habitación con una expresión de sorpresa. »Los últimos años, ella me despertaba a mí y esta vez ni siquiera se levanta«.

Llegué hacia el inmenso comedor, donde vi el gran reloj de manecillas.

6:00 a.m.

Para las 7:00 a.m. ya había recorrido toda la casa, que era gigante, he incluso, un poco desconocida.

Cuando paseaba por uno de los muchos pasillos, escuché pasos detrás de mí. Los había escuchado antes.

-¡Bú!-Me grita Diana a mi espalda.

-¡Casi me matas del susto, tonta!

Me mira con una sonrisa pícara, después dice:

-Le diré a mamá como me llamaste-Y sale corriendo hacia la alcoba de mamá.

»Estoy muerta« pienso mientras voy corriendo detrás de ella. La jalo de la camiseta, lo que la detiene un poco.

-¡Suéltame!-Me grita y me da un manotazo.

-Tengo una idea. Jugamos a las escondidas. Si tú ganas, le dices que dije la grosería, y no le digo del manotazo. Si yo gano, le digo lo del manotazo y no le dices lo de las grosería-Le respondo. Es un trato justo.

Me da la mano y me grita: "¡Tú cuentas!" y se va corriendo.

Recorro las habitaciones cuidadosamente, pero me tardaría demasiado buscar en cada rincón, así que solo les hecho un vistazo.

Entro a "la-habitación-que-nadie-usa-solo-en-ocaciones-especiales" y veo muchos globos, en la mesa hay un mantel de lujo, y hay una cartel bordado que dice "Feliz cumpleaños, Caroline § Diana". Al otro lado de la habitación oigo ruidos y camino hacia aya. Veo a Susana, un miembro de los muchos que están en nuestro "Personal de Servicio". Me ve y grita.

-¡Deberías estar durmiendo!-Ve la hora en su reloj de mano-¡7:33! ¡Vete a la cama!

-Susan, ¿me van a festejar mi cumpleaños aquí en mi casa?-Pregunto, ya que siempre me lo hacen en locales de lujo, o rancherías elegantes, no en la mansión Wethers.

-¡Se supone que era sorpresa! Vete a la cama, rápido.

-Sólo déjame encontrar a Diana. Estamos jugando a las escondidas.

-¿Qué?-Un tono pálido cubre su cara, lo que me asusta-ustedes no tienen que salir de su cama aún, no en estos días. Encuéntrala y te vas a dormir, tesoro-Al final, su tono moreno regresa.

»¿Estos días?«.

Pero no le hago caso, escucho pasos y sé que Diana ha llegado y ha dicho "¡Un! ¡Dos! ¡Tres por mí!" así que corro al comedor, me escondo debajo (donde no me ve Susan) y la espero.

Un grito se escucha del sótano. Es su voz. Susan sale corriendo al sótano y yo detrás de ella. Ella entra en el sótano, pero yo me quedo en el umbral, ya que me da miedo entrar.

-¿Que sucede?-Dice mi padre, quien está con un traje elegante y parece que corrió hasta acá.

-No lo sé, papi. Diana gritó y no sé porqué.

En eso sale Susan, muy asustada.

-Dr. Wethers, necesito que entre a ver esto-Dice. Mi papá entra al sótano asustado.

Mi padre sale del sótano, llorando.

-Caroline, corazón... tu hermana...

La respiración se me empieza a descontrolar, las lágrimas salen de mis ojos, una por una. Suelto un grito y entro al sótano corriendo.

-¡No! ¡Hija! ¡Espera!-Dice mi padre.

Al entrar, está todo oscuro. Veo una tela negra, y debajo de ella veo una silueta. La descubro, pero no hay mas que sangre.

Mi padre entra y la ve.

-Pero... estaba aquí...-Dice, aún llorando-Ella estaba aquí.

Lo abrazo y empiezo a llorar.

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⏰ Última actualización: Sep 16, 2014 ⏰

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