Sana tu mundo interior y serás feliz

Parte 2 -Tu Poder Interior

Los seres humanos somos muy diversos y desiguales, no solo nos distinguimos por raza, color, tamaño, religión y muchos otros aspectos, unos somos fuertes con los pies bien plantados sobre la tierra, otros somos un poco más o menos vulnerables, unos somos emprendedores, líderes, audaces, independientes, otros somos inseguros, sumisos, altamente dependientes, unos tenemos raíces firmemente establecidas, otros dependemos de lo que otros hagan o nos digan que hagamos, estos últimos representan nuestra principal material humano sobre quienes dirigir todo nuestro arsenal de crecimiento personal.

Yo creo que todas las personas somos capaces de auto descubrir nuestras potencialidades; los que ya están claros solo incrementan sus talentos y aquellos que aún no están conscientes de sus capacidades, para mí son nuestro foco de atención y digo que son nuestro foco de atención, puesto que ellos también pueden ser líderes, emprendedores, creativos, audaces, y tener acceso a un mundo de posibilidades que está allí, al alcance de sus manos, solo tienen que saber ver y aprovechar al máximo las oportunidades, y dejar de estar siempre en riesgo que quedarse a mitad del camino y no alcanzar ninguna meta o si lo hacen ya se conforman con eso y no siguen adelante en su proceso de evolución. El hombre es un ser de libre albedrío, por lo cual es autónomo para decidir qué camino ha de seguir. Ahora bien, como creyentes tenemos la certeza que existe una fuerza o energía superior generadora de vida, a la cual llamamos "Dios", si es nuestra determinación llamarlo así, hay quienes prefieren llamarla inteligencia infinita o fuerza suprema del universo, esa fuerza que hace posible el movimiento constante de la vida, esa misma energía habita en nuestro interior, si creemos que fuimos hechos a imagen y semejanza de ese Dios o inteligencia infinita, de hecho si así lo creemos, podemos sentir ese poder dentro de nosotros, ya que somos capaces de movernos según nuestra voluntad. Podemos percibir que estamos conectados con esa fuerza divina y universal cuando va dirigida a nuestro desarrollo integral como seres humanos.

El hombre es un ser deseoso de aprendizaje, deseoso de bienestar, salud, riqueza, amor; sin embargo, cada individuo aprende de modo diferente a sus semejantes, mi experiencia no es igual a la experiencia de las otras personas con quienes convivo o interactúo, es decir, mis vivencias me enseñan a mí, más no a mi prójimo, puesto que las experiencia suelen, en general, ser individuales, por lo cual, cuando estamos en conocimiento de experiencias ajenas, solo nos sirven como referencia, más no como elemento que generará algún cambio en nuestra conducta. No es sino hasta que vivimos alguna experiencia en carne propia, cuando realmente entendemos el aprendizaje que pudo habernos dejado la experiencia previamente vivida por otra persona. Hay un dicho que dice: "no te enamores con el corazón, enamórate con la razón" esta verdad te permite ser más objetivo a la hora de tomar decisiones importantes en tu vida. Es vital para nuestra superación personal tener control de nuestras emociones y pasiones, debe existir una armonía y equilibrio para así ir construyendo a paso firme nuestro camino hacia el éxito.

Determinación, esta es la actitud de quien realmente desea alcanzar el éxito, perseverancia. Una frase común, y que siempre escuchamos en la calle que "El que persevera, alcanza sus metas", ciertamente la determinación sin perseverancia no llega muy lejos, tal como la fe sin acción no logra nada, es necesario creer y hacer. Transformase en un hombre exitoso significa sembrar la semilla en buena tierra y hacer que germine y luego trabajarla hasta que se convierta en un frondoso árbol cargado de deliciosos frutos. Luego debemos ser agradecidos con Dios pues su infinito amor es nuestra principal fuente de armonía y equilibrio. No seamos parte del grupo de personas que llegan al final de sus vidas sin descubrir cuál fue el verdadero propósito por el cual vinieron a este mundo, no es cierto que estamos aquí por pura casualidad, todos fuimos enviados a este mundo con un fin, un propósito superior que muchos jamás llegan a descubrir y menos a cumplir. La voluntad es esa fuerza de empuje que nos lleva a conquistar logros, que hace que exterioricemos esa luz interior que llevamos dentro y que se abre camino cuando hacemos lo que nos gusta y queremos, pues disfrutamos la labor realizada conduciéndonos a compartir nuestros logros, esa es la vida de quien tiene la determinación por alcanzar sus metas, trascendiendo a lo meramente simple de la vida, ya que la vida de quienes luchan con determinación y voluntad, lejos de convertirse en personas complejas, se convierten en personas sencillas y con una visión de la vida llena de gozo y jubilo, en otras palabras, personas felices.