Cuna De Oro

¡¿Traición de... Mi familia?!

Bueno toda mi espiral descendente comenzó el 11 de febrero de 2016 el día después de mi cumpleaños número 14 cuando una mucama me informo que mis padres me esperaban en la biblioteca de la gran mansión Mari... O se me olvidaba contarles que mis padres eran millonarios

-Señorita Alana sus padres la esperan en la biblioteca me informaron que es algo urgente

-Como mis padres siempre me habían mimado pensé que sería otro regalo- ¡¿Enserio?! ¡Otro regalo YEI! –Salí corriendo haciendo que mis pasos se escucharan por la silenciosa mansión-

Por mi mente solo pasaba una palabra Poni, Sip poni pensaba que me regalarían un poni o algo por el estilo, pero cuando comenzaba a bajar las largas escaleras pude ver a mi padre parado enfrente de la chimenea con la mirada perdida y a mi madre sentada en el largo sofá a punto de romper en llanto... En ese momento entendí que no sería un regalo...

Cuando mi sonrisa se comenzaba a esfumar fui deteniendo mi paso haciendo que mis pasos se retumbaran en el silencioso lugar... Mi madre me volteo a mirar y con sus ojos llorosos salió corriendo de la gran biblioteca dejándonos a mi padre y a mí, solos

-Alana es momento de que crezcas- Se escucho la grave voz de mi padre con un toque de tristeza-

-A que te refieres papi –Como mis padres me mimaban mucho tenía la mente de una niña de 4 años-

-Alana ya tienes 14 años –Respiro profundo y continuo hablando sin quitar la vista de las flamas provenientes de la chimenea- Hija es momento de que te mudes

-Inocencia ante todo- ¿Me pagaras un departamento? –Regresaron mis ánimos de niña pequeña- ¡Gracias papi! –Corrí para abrazarlo-

-No me refiero a eso –Extendió su mano en señal de que me detuviera destruyendo mis ideas de positividad- Hija tienes que aprender a vivir por ti misma

En ese momento no entendía NADA de lo que pasaba así que me quede estática intentando procesar todo y formular una respuesta coherente mas no se me ocurría nada...

-Mi padre saco su billetera de la chaqueta del traje que llevaba puesto y de esta saco 10 billetes de 100 dólares me los extendió y me explico mejor la situación- Alana ya no puedes vivir en la mansión tienes que aprender a sobrevivir tu sola... -Por fin me volteo a mirar- Hija a tu edad ya yo era independiente así que espero que tu también lo seas

Comencé a retroceder y a negar con la cabeza no podía creer lo que me decía y la frialdad con la que me lo decía... En un arranque de ira, tristeza, Impotencia, traición y muchos otros sentimientos que hasta el día de hoy no logro explicar salí corriendo por la puerta de la gran mansión sin nada más que mi celular y la ropa que traía puesta.

En un momento voltee y mire por el gran ventanal que estaba en la biblioteca y vi la imagen más hipócrita del mundo, a mi padre abrazando a mi madre la cual lloraba inconsolable en el suelo... Si enserio se sintieran tristes nunca me hubieran votado...

Con un sentimiento de inmensa traición me dirigí hacia el paraíso de una adolecente... El centro comercial, mas ya no sería lo mismo sin mi tarjeta de presupuesto desconocido...

Fui de tienda en tienda buscando una que me diera trabajo para poder rentar un departamento mas ese día no conseguí nada, como no podía dormir en la calle vendí mi celular por el cual me dieron unos 500 dólares.

Con ese dinero pague un cuarto en un hotel ya que me negaba a ir a un motel... Fue la primera vez que dormía en un hotel barato y más importante la primera vez que dormía lejos de mi familia

( ... )

Al día siguiente me levante y con lo que quedaba de mi positividad fui de nuevo al centro comercial. Fui de tienda en tienda nuevamente hasta que en una pequeña tienda de ropa conseguí un letrero que informaba que se buscaba personal

-Se solicita empleada:

Género Femenino

Con una edad mayor a los 14 años-

En mi mente ya me encontraba haciendo fiesta, era el lugar PERFECTO por lo cual no perdí más tiempo y entre a ver si era tan perfecto como creía.

Cuando entre pude ver a una chica alta de cabello castaño y ojos miel a los cuales cubrían unos anteojos detrás del mostrador, se veía que era mayor que yo así que me quede un rato mirándola

-Ho bienvenida a Gliter Moda –Me sonrió cálidamente por lo cual me dio más confianza-

-Ho-Hola vengo por el anuncio de afuera –Su actitud cambio por completo a una más triste pero intento esconderlo-

-Cla-claro... ¿Ya has trabajado en algotra tienda? –Negué con la cabeza- Ya veo ¿Sabes cómo se maneja alguna tienda? –Volví a negar y ella se alegro un poco mirándome con esa mirada... materna se podría decir- Y entonces ¿Por qué quieres trabajar aquí?

-No tengo dinero y no puedo volver a mi casa –Baje la mirada triste por mi respuesta-

-Te entiendo... ¡El empleo es tuyo! – No salía de mi gran asombro ¿mío? ¿Porque era mío? si se notaba que no tenía ni la mínima idea de cómo trabajar –

Igualmente no me queje, después de todo ya tenía trabajo y ahora podía ganar mi dinero... Tal vez mi padre tenía razón y vivir por mi misma no sería tan difícil...