Celos

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Sarah

─Señorita Penski...

Esa voz.

Jenn se estremeció y rápidamente soltó el brazo de mi hermano para ponerse de pie.

─¿S-Si, Señorita Blake?

Todos miraban a Alia, no era usual verla en la cafetería, más bien, no era usual verla fuera de su oficina. Alia miró seria a Jenn, lo que obviamente puso nerviosa a mi amiga.

─Supongo que ya está libre de sus obligaciones como para estar ligando con su compañero de trabajo ─dijo mirándola de forma seria.

─A-Así es, he acabado con todo el papeleo que me correspondía... ─respondió nerviosa.

─Me alegra saberlo, porque necesito que me haga un reporte, saque algunas copias, verifique los números de cuenta y la fecha de cada documento para saber si son correctas... ─dijo sonriendo amable mientras dejaba una pila enorme de papeles sobre la mesa.

Para ser franca, a mí me dio miedo esa expresión.

─P-Pero-

─Los necesito más tardar para esta noche, yo que usted empezaba ahora ─su sonrisa se mantenía intacta─. Qué tengan lindo día.

Nadie dijo nada, todos mirábamos como su silueta desaparecía de la cafetería. Mientras tanto Jenn tenía cara de espanto ya que le esperaba mucho trabajo. Lo raro era, ¿Qué hacia la Señorita Alia aquí, si se supone que ella había salido del edificio?

─¿Qué sucedió aquí? ─preguntó Helen sorprendida.

─No tengo ni la más mínima idea... ─respondí sin dejar de ver a Jenn.

Alia

¡Aghh! ¡Maldita sea! No negó que estaba coqueteando con Erick, esa maldita...

Estaba molesta, caminando hacía mi oficina, termine de recoger la papelería que me faltaba y cuando paso por la cafetería me doy cuenta que una de las secretarias, Jenn Penski, estaba muy juntita con Erick. Ni siquiera debería molestarme, él no me gusta y no somos nada... Demonios, ¿Qué me pasa?

─Señorita Blake...

Una voz me sacó de mis pensamientos e hizo que me detuviera, volteé para ver de quien se trataba y era uno de los chicos que trabajan en la cafetería.

─Hola, Tom ─saludé con una sonrisa.

─Hola, la buscaba para preguntarle si quería que le preparara el almuerzo.

Sonreí ante ese gesto.

─Me encantaría, ¿podrías mandarlo a mi oficina?

─Por supuesto.

Le sonreí y me di la vuelta para seguir mi camino, de alguna manera sentí que alguien me miraba, pero decidí ignorarlo. Hay muchas personas y es normal que se miren unos a otros.

Helen

Después de almorzar, Sarah se llevó a Erick a su oficina y yo me dirigía a mi puesto. Sin embargo no entendía esa reacción de Alia, la conozco desde que era una bebé y jamás en todo ese tiempo la había visto actuar así. Una vez que llegue al último piso, salí del elevador y me apresure a entrar a la oficina de Alia.

─Explícate ─me cruce de brazos y la mire seria.

─Estoy comiendo ensalada de frutas ─me miro obvia a lo que rodé los ojos.

─No eso, ¿Qué fue lo que paso en la cafetería?

─Tú misma lo viste, ¿no? ─comió un pedazo de manzana.

─Ali...

─Está bien, está bien... ─se levantó de su escritorio y se acercó a mí, lamentablemente Alia es mucho más alta que yo así que no me sentía con mucha autoridad─. ¿Quieres saber qué pasó? Bien, pues ni yo misma lo sé.

─¿Cómo? ─le miré confundida.

─¡No lo sé, Helen! No sé qué pasó ahí. Simplemente regresé por unos papeles y al mirar hacía la cafetería vi a esa invadiendo el espacio vital de Erick. ─Alia caminaba de un lado a otro mientras me explicaba.

─Jenn.

─¡Me importa muy poco su nombre!

─Mira cielo... ─la tome de los hombros e hice que se sentara─. Te conozco mejor que nadie y sé que tú no eres así...

─Créeme que no tengo idea que pasó...

─Son celos.

─¿Qué? ─me miró confundida.

─Ali, tú estás celosa.

─Te equivocas. Yo no... 

Erick

Después de almorzar y estar en la oficina de mi hermana esperando que acabara su trabajo volvimos a casa. Entre a bañarme y mientras me caía agua en la cabeza comencé a pensar sobre mi día.

Hoy fue bastante raro, conocí a Alia Blake y consigo ser su asistente personal. Luego de un rato salgo de la ducha, me pongo mi pijama y mientras camino secado mi cabello con una toalla llego a la sala donde está mi hermana viendo una película.

─¿Ya llego la comida china?

─Sip ─respondió mientras comía.

Me senté a lado de mi hermana y empecé a comer, seguía pensando en quien era ese chico que hablaba con Alia por el pasillo, me sentí algo molesto al ver como le trataba tan amable. Tal vez si le pregunto a Sarah, me diga quién es... Mala idea, la peor de todas. Pero en serio necesito saber quién es ese idiota.

─Oye, Sarah...

─¿Qué? ─ella seguía viendo la televisión mientras comía.

─¿Sabes quién era el chico con el que hablaba Alia?

─¿Eh? ─me miró─. Ah... Sí, es un chico que trabaja en la cafetería ─dejo de mirarme para seguir comiendo─ No sé su nombre, pero sé que le gusta Alia ─dijo mientras masticaba.

─Primero acaba de masticar ─dije mirándola algo asqueado.

─Pues tú me interrumpes...Uhm ¿Por qué preguntas? ─me miró y alzo una ceja.

─Por nada...

Soy malo mintiendo.

─Dilo ya.

─Es que cuando lo vi hablando con Alia me moleste ─susurre, pero fue en vano ya que mi hermana escucho perfectamente.

─¡Estás celoso! ─empezó a reír, mientras me sonroje.

─¡Sabia que esto era mala idea!

─Ya hermanito, no te enojes ─me dio un leve golpe en el hombro─. Solo juego, pero en serio jamás te había visto así ─sonrió.

Estoy seguro que hay una explicación lógica para todo esto. Lo que siento por Alia es simple admiración, no tengo que confundirlo con algo más.

Hola guapos y guapas xd bueno, aquí otro cap, espero que la historia les vaya gustando. ¡GRACIAS POR LEER MI HISTORIA! ¡VOTEN, COMENTEN Y AGREGUEN A SU BIBLIOTECA SI LES GUSTO! ¡LOS AMO MUCHO! ¡HASTA LA PRÓXIMA! 

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Enamorado de mi JefaWhere stories live. Discover now