Encuentro

861 36 33
                                    

Son las 9 de la mañana y voy en mi jet privado rumbo al Distrito Federal, no había nadie más alrededor por lo que podía sumergirme en mis recuerdos de hace un momento, fue hace una hora, antes de abordar me encontré en el centro de una comunidad de Hidalgo a mi contrincante en las próximas elecciones: Andrés. Íbamos llegando al aeropuerto, ambos teníamos el mismo destino, pero tomaríamos diferentes vuelos por obvias razones, yo utilicé mi jet, mientras que Andrés como siempre tan obstinado prefirió pagar un pasaje como si fuera otro simple turista.

- ¿Qué hay Andrés? ¿Estás listo para el primer debate presidencial? - Dije como saludo para una conversación que no pretendía extender mucho

- Oh, Ricardo, no te había visto - Dijo desinteresado, estoy seguro de que sí me había visto - Yo siempre estoy listo para el debate

- Jum - Hice un puchero - Deberías cuidarte la espalda, los otros candidatos te tienen en la mira

- ¿Y tú también Ricardo? - Dijo con un tono que le daba doble sentido a sus palabras

- Hmf - Bufé desviando mi leve sonrojo - Por supuesto, vas arriba en las encuestas, así que no puedo descuidarte

- ¿Estás seguro de que sólo es por eso? - Volvió a insinuar algo más, esta vez puso su mano sobre mi hombro

- ¡Tonto! - Exclamé apartando su mano de mi hombro y mirando alrededor que nadie nos viera, sería peligroso que la prensa estuviera cerca en estos momentos

- No hay nadie aquí, ¿A qué le tienes tanto miedo? - Volvió a poner su mano sobre mi hombro haciendo un leve jalón para acercarme a él, obviamente me resistí y lo aparté

- ¡Detente Andrés! ¡No me daré el lujo de seguir con esto y arriesgar todo lo que he hecho para ser un candidato!

- La vida es muy corta para preocuparse por lo que los demás vayan a decir Ricardo

- Claro, tú ya no tienes nada qué perder, luego del vídeo de la paloma dudo que te avergüences con algo - Me crucé de brazos y me burlé inocentemente

*PAZ*

Sonó un fuerte golpe a un lado mío, quedé estupefacto un segundo y luego miré la mano de Andrés-san a un lado mío, había golpeado el muro con su palma para acorralarme en el pasillo, estábamos ahora cara a cara, él me miraba con algo de disgusto, su rostro maduro y sus ojos brillaban con desagrado, pero yo sólo podía pensar en su fuerte brazo que no me dejaba pensar y mi corazón que comenzaba a latir más rápido.

- Nunca creí que llegarías a venderte tanto al sistema Ricardo - Soltó esas palabras que atravesaron mi pecho como una navaja afilada - No tardarás en volverte parte de la mafia del poder

- ¿Qué? - Mi sangre comenzó a hervir de furia - ¡¿Tú qué sabes de lo que he hecho o no?! ¡No conoces mis planes! ¡No puedes decir que me he vendido a nada! - Exclamé con rabia contenida

- Puedo verlo en tus ojos Ricardo, estás siendo consumido por el sistema - Apartó su mano de a mi lado dejándome libre - Es por eso que debo detenerte, e impedir que ganes las elecciones

- Pf - Ignoré lo que dijo y comencé a caminar por mi cuenta

- ¡Todavía puedes convertirte en un buen candidato Ricardo! - Dijo estando ya a unos metros de distancia - ¡Deja de temerle al sistema!

- No me conoces, Andrés - Susurré mientras seguía mi paso firmemente

Esas imágenes estaban cruzando mi mente, miraba por la ventana del jet pensando en lo que me había dicho, ¿Realmente me habré vendido al sistema? No, no me conoce, él no sabe lo que yo quiero, he tenido que hacer mucho para llegar hasta donde estoy, y no puedo dejar que me afecte eso, voy a llevar a este país a la cima, no permitiré que nadie nos rebaje, mucho menos Donald Trump. México necesita de un presidente dedicado, Andrés tiene determinación, pero lo siento, México necesita alguien más preparado, alguien firme y persuasivo, México necesita a Ricardo Anaya. Y te lo demostraré, Andrés.

Voto de Amor (AMLO x Anaya)Where stories live. Discover now