EL INICIO DE LA UTOPIA DE AMOR

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     Lo conocí por casualidad nunca creí que me enamoraría por primera vez de alguien como él, pero para ser sinceros jamás creí que me enamoraría de alguien.

     Era una tarde cualquiera de agosto estaba en mi primer día de clases y todo parecía de lo más normal, tomando en cuenta que acababa de entrar a la prepa; mi nombre es Itzidia soy castaña, tengo ojos verdes y no soy muy alta además de que tengo un cuerpo muy normal sin mucho busto aunque me han dicho que soy bonita no me siento así pero sí puedo decir que en ocasiones tengo el ego muy elevado y mi autoestima está por los aires.

     Entré a mi primera clase después de perderme unas cinco veces y equivocarme dos veces de salón y por si fuera poco había llegado un poco tarde a clase pero para mí buena suerte el profesor no había llegado, en el transcurso de la case me pude dar cuenta de que mis compañeros eran muy distintos a mí y en ese instante me empecé a sentir un bicho raro. Al finalizar la clase comenzamos a platicar una chica y yo su nombre era Elizabeth, a quien termine por decirle Liza. Liza era un poco más alta que  yo y también castaña mi pequeña nueva amiga, camino a nuestra segunda clase comenzamos a intercambiar información sobre nosotras. Se le notaba que tenía un carácter fuerte me empezó a caer bien rápido y después se convirtió en mi confidente.

     Pasaron los días y nosotras conversábamos mucho pronto se nos unió un chico cuyo parecido conmigo (en cuanto a gustos se refiere) era increíble; se llamaba Gerardo, me sacaba una cabeza y me sentía protegida a su lado, nosotros tres era todo con lo que podía ser feliz, y lo era pues nos llevábamos muy bien .Una tarde nos enteramos de que habría talleres así que fuimos a preguntar en la coordinación cuales se impartían en nuestro plantel, a mí me agrado gimnasia y a Liza salsa pues le gustaba mucho bailar mientras que Gerardo opto por algo más deportivo que ella y se  inscribió en el equipo de básquet ,como dije era feliz y creía tener todo lo necesario para serlo pero en ese momento las cosas eran muy distintas.

     Al siguiente día de inscribirnos las clases que tendríamos en el día serían inglés, computación y matemáticas pero Liza tendría que quedarse hasta las tres porque a la una comenzaba su clase de salsa y aunque yo no vivía cerca de su casa planeaba quedarme a esperarla para ver cómo le había ido y Gerardo que si vivía cerca de ella también la esperaría. Salí de mi casa temprano para llegar y platicar con mis amigos antes de que la clase empezara, así que en cuanto mi alarma sonó me levante y me metí al baño con mi cambio de ropa que constaba en un pantalón de mezclilla, una blusa ajustada de tirantes mis vanz y una sudadera.

     Salí de mi casa corriendo para llegar temprano a la escuela cheque mi horario para rectificar que tuviera todo listo; Inglés, computación y matemáticas. Me subí al camión y me senté hasta atrás en la esquina derecha y para no estresarme por el exceso de personas me puse mis audífonos y le subí todo el volumen a mi teléfono no había amanecido con humor de soportar a nadie asique también comencé a leer un libro, era usual en mí no salir sin uno, ese en particular me lo había recomendado mi mama, -así que Hamlet eh?-me pregunto con curiosidad el chico que estaba sentado junto a mi - umm si ­- conteste con una sonrisa y continúe con mi lectura pero él no se iba a rendir tan fácilmente , -mi nombre es -, me quite los audífonos para oír su nombre mientras con resignación guardaba mi libro, ya estaba acostumbrada al tipo de hombres que piensan que tienen el derecho de interrumpir lo que haces para querer  hacerse tu amigo y terminar declarándose, para su mala suerte yo no era fan del amor y no tenía planes de noviazgo, pensando en esto voltee a verlo y le dije.-perdona, ¿cual me dijiste que era tu nombre?- ,-Luis ¿y el tuyo?- me respondió con una sonrisa al ver que yo empezaba a hacerle caso, -Vanessa- conteste con una sonrisa de cortesía, entonces él sonrió y antes de decir algo cambio su sonrisa por un gesto de desilusión y me dijo:-un gusto en conocerte Vanessa pero aquí bajo espero volverte a ver- y simplemente se fue, mire a la ventana y me di cuenta que bajo en la que debía ser mi parada sonreí al ver que estaba en mi escuela, un momento mi escuela, me había olvidado de que tenía que bajar–mierda- fue lo único que atine a decir ganándome una mirada reprobatoria de la señora que estaba frente a mí y susurrando un lo siento me levante agarre mis cosas y toque el botón de parada. Genial el autobús me había dejado dos calles después de la escuela ¡y todo por ir platicando con un tipo que ni conoces!, vamos admite es guapo, por Dios enserio que es guapo, ¿qué edad tendrá?, ¿tendrá novia?, no debe tener novia ¿viste cómo te miraba?, ¡sí! y ahora gracias a eso estas caminando hacia la escuela a las ¡¿7:00?!;corrí lo más rápido que pude porque no solo iba a llegar tarde a ingles sino que también ya no podría platicar con mis amigos hasta que acabara la clase y eso era hasta las 9:00 y pensando en esto me estaba regañando en silencio. Entre al salón pidiéndole a la maestra perdón y me senté frente a Liz y a lado de Gerardo quienes me miraban interrogantes, -¿qué paso Vane?- me susurro Gerardo, -sí, ¿porque llegaste tarde quedamos en llegar temprano?-me cuestiono Liz, pero al acordarme del chico me salió una sonrisa y no pude decir más que un simple al rato hablamos además de que la maestra empezaba a dar explicaciones y esa no era una de mis mejores materias. La clase término 40 minutos antes de las 9:00 así que mientras guardaba miss cosas me prepare para el interrogatorio de mis amigos, y así fue en cuanto termine de guardar mis cosas empezaron a preguntar porque había llegado tarde y porque no había parado de sonreír en toda la clase porque según ellos era algo muy raro en mí, salimos rumbo a nuestra siguiente clase mientras les contaba a mis amigos sobre mi encuentro casual con un desconocido que me había gustado físicamente, -¿y estaba guapo?- me había dicho Liz, -jajá si se notaba que tenía cuerpo además tiene una mirada que te deja embobada- le conteste yo como si habláramos de cualquier cosa equis, -jajá no puedo creer que te enamoraras de alguien que conociste en el camión- me había comentado Gerardo mientras se sentaba en una banca hasta atrás,-jajá enamorada yo jajá como crees nada más me atrajo físicamente, ni siquiera lo conozco además yo nunca me he enamorado-le dije sin parar de reír mientras me sentaba a su lado, -¿enserio? Pues es bonito enamorarse- dijo Liz mientras ponía cara de acordarse de algo, -oigan chicos el maestro aviso que no tendríamos computación y todos los del grupo vamos a ir al parque a dar la vuelta ¿vienen?- nos preguntó una compañera y nosotros asentimos, eso nos daría más tiempo para platicar. El parque que estaba cerca de nuestra escuela era como un pequeño bosque, se suponía que había lugares a los que no debíamos ir pero aun así estuvimos explorándolos mientras seguíamos platicando del amor, yo en mi postura de que habían demasiadas desventajas y ellos en la suya de que por muchas desventajas que tuviera el amor era hermoso con todo y eso y que lo único que era muy feo era cuando te rompían el corazón, -está bien ya entendí el punto es que yo no quiero eso no aun- es comente harta de tanto dulce y miel sobre el amor y ellos solo atinaron a decir un ok dando por concluida la conversación, les avise que era hora de regresar a la escuela y como ya habíamos perdido a los demás decidimos irnos solo los tres ya que se nos empezaba a hacer tarde para la última clase del día. Al llegar al salón de matemáticas nos dimos cuenta de que ya habían llegado todos así que entramos antes de que llegara el profesor y no hablamos hasta que acabo la clase ya que era una de mis favoritas. El profesor termino la clase con los materiales que ocuparíamos el siguiente viernes y en cuanto acabo de hablar salimos para ir a dejar a Liza. Después de dejar a Liza en su salón Gerardo y yo decidimos dar una vuelta por toda la escuela y platicamos de trivialidades fue entonces cuando me di cuenta que mi amigo me empezaba a gustar pero no le di importancia pues no era la primera vez que me pasaba.

     Al subir al camión después de dejar a Gerardo y a Liz en su parada me senté donde siempre (hasta atrás en la esquina derecha) estaba cansada así que planeaba dormirme pero antes me puse mis audífonos y me puse a leer y por el rabillo del ojo note que alguien se sentaba a mi lado y me acorde de mi encuentro con “el chico guapo del camión” como lo había llamado Liz y así pensando en él cerré mi libro con el fin de descansar los ojos. Me desperté justo en mi parada y baje casicorriendo para no pasarme como en la mañana, empecé a caminar y me di cuenta de que todavía tenía el libro en la mano asique me decidí a guardarlo porque no quería cargarlo fue entonces cuando me di cuenta que sobre salía una hoja roja, con curiosidad saque del libro dicha hoja y me di cuenta de que era una carta que decía lo siguiente:

A mí querida compañera de transporte:

Le agradezco que me haya dado la oportunidad de saber su nombre y lamento no pudiéramos conversar más, me complacería llegarla a conocerla mejor y me gustaría supiera que me parece muy linda cuando duerme.

P.D.

Espero verla mañana temprano

Atte. Luis (el chico del camión)

 

     Me divirtió la forma en que había escrito la carta esa forma de hacer ver tan formal algo tan casual y supe al instante que no se rendiría hasta conversar bien conmigo y eso me alegró más de lo que podrá admitírselo a cualquiera y pensando en eso camine a mi casa. 

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⏰ Última actualización: Jun 22, 2014 ⏰

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