Ese Corazón No Es Tuyo

Capítulo 1: El Beso Inesperado

-Para ser sincero nunca hablo con las personas, es más, hasta mis padres creen que soy un poco desadaptado del mundo por no decir que completamente, pero la historia no va a hablar de eso y de cómo superé mis años en la secundaria o bien como crecí, sino de cómo mi vida dio un gran giro al ingresar a "la gran preparatoria"-.

Al ingresar al instituto y yo con tan solo dos amigos que eran prácticamente para mí, inseparables uno del otro ya que amaban con todas sus almas los videojuegos y no me puedo quejar a mí también me gustaba jugar, en ocasiones imaginaba hasta ser el personaje. Llegamos juntos el primer día, pero como es costumbre el primer día no sabes cómo estas ubicado o si quiera en que salón debes entrar y por orgullo no preguntas (quizá no es la mejor opción, pero así pasa *voz interior*) esperamos a ver si nos topábamos con algún conocido, ¡claro que no íbamos a hablarles! Sino, seguirles de cerca, miramos a una compañera a lo lejos que para nada me caía bien, siempre buscaba llamar la atención y aunque para todos era el centro del planeta para mí era solo una persona más en este mundo.

Al llegar al salón nos dimos cuenta de que estaba completamente solo, no sé si era por el hecho de que llegamos media hora antes de la entrada a clases o porque era el primer día y sea cual fuese la causa se sentía muy tenso al estar ella ¡solo ella en el mismo salón que nosotros! Damián quien pasa la mayor parte del tiempo con Chris -sino es que viven en la misma casa y comparten padres- siempre estuvo enamorada de esa chica y ¿Cómo lo sé? Bueno, todo paso muy rápido, le pedí su libreta para copiar unos apuntes hace 1 un año, cuando llegue a casa cayo una hoja en la cual describía todos sus sentimientos de una manera algo aterradora, principalmente por que la carta empezaba de la siguiente manera "Ámbar, mi amor hacia ti se siente como cuando mi mamá me abrazo el primer día al dejarme en el preescolar..." realmente no necesito decir más ¿o sí? Él se enteró desde luego y prometí guardar el secreto como la persona poco social que soy.

A la salida Damián me llamo algo preocupado:

Damián: ¡Tristán! Oye, lo que pasa es que mis padres no estarán en casa hoy hasta tarde y me preguntaba si ¿podría estar en tu casa? Digo, si no es molestia, solo hasta que ellos lleguen

Tristán: me parece bien, sirve que jugamos un poco un nuevo juego de video que conseguí

Damián: ¡Excelente! Solo llamaré a mis padres para decirles que estaré en tu casa

Al llegar a la casa estaba mi madre, mi padre y mi abuela, mi hermana parece ser que no había llegado de la escuela.

Sra. Alicia: ¡Hola Damián! ¿Cuánto tiempo sin verte?

Damián: Hola señora Alicia, que gusto volver a verla

Mi madre era súper afectiva con mis amigos, lo miraba como una gran hazaña para mí por lo cual solo dije que estaríamos en mi cuarto, que por favor nos llevara la comida ya que estaríamos jugando a la Play Station.

Mientras jugábamos me hizo la pregunta algo sacada de tema para lo que pasaba en el entorno

Damián: ¿Cómo te acercarías a una chica?

Tristán: ¿lo dices por Ámbar?

Damián: Sí lo digo por eso, es que ya hace tiempo que me pierdo viéndola en clase y no sé cómo acercarme a ella, aunque sé que para ella no soy nada o quizá no sabe a un que existo

Tristán: te voy a echar una mano -A decir verdad, no sé porque diablos salió eso de mi boca, digo soy la persona menos sociable o al menos así lo pienso yo-.

Llego el momento en que se fue, pero yo solo pensaba ¿Cómo me le acercare a ella para que lo conozca a él? Y aunque quizá el acercarme a ella no era el problema, sino el que no la podía ver porque nunca me había caído y el solo pensarlo me revolvía el estómago, pero ya me había ofrecido.