Todo por la 10ª parada

Por aquella copa

¿¡QUE SI QUIERO UNA PELOTA?! -. pregunté- Pues no, gracias -. dije sonriendo a West que estaba a mi lado.

-Que si quieres una copa -. dijo el moreno entre el bullicio de El Menta

-Aa, vale -. amplié mi gesto- Peerooo, yo no puedo beber -. dije

-Tranquila, tuve en cuenta eso -. me devolvió la sonrisa dejando ver esos hermosos dientes blancos, estirando sus labios rosados gorditos y desapareciendo entre la gente para ir a por una copa de algo que se le ocurriera que pudiera gustarme para alegrarme un poco la noche

-Hombre Tarín, ¿Qué tal lo estás pasando?-. preguntó Álex que estaba bailando con los demás mientras yo me acercaba a ellos.

-Pues bien, como cada día que venimos -. dije mostrando mi hoyuelos -¿Y Claudia y Nate? -. pregunté al ver que no estaban

-Donde crees que están -.dijo Marcos con cara pervertida

-Joder, ¿enserio?, bueno, en verdad me lo esperaba -. dije restándole importancia

-¿Y West? -. preguntó Nick que estaba ocupado bailando con Sara una de las lentas

-Ha ido a por bebidas, voy a buscarle -. dije yendo en busca del moreno que probablemente siguiera en la barra

Fui apartando a la gente hasta que un chico me golpeó en el hombro, proporcionando mi caída. Me tendió su mano para ayudarme a levantar. Yo la acepté, miré hacia arriba y ahí estaba él, con mi bebida en la otra mano, sonriendo al ver mi cara

-¿Te has hecho daño? -. dijo medio riendo al subirme

En ese momento, el moreno me empujó contra su musculoso pecho, él, me puso la mano sobre la espalda, nos quedamos a centímetros, nuestras narices se rozaban y en ese instante, preguntó sonriendo burlón

-¿Quieres bailar?, la he escogido para ti, porque sé que te encanta

Era la verdad, me conocía demasiado bien, la canción que sonaba de fondo era Versache on the floor, de el inigualable Bruno Mars, uno de mis cantantes favs

-Veamos que sabe hacer el caballero -. dije sonriendo mirando a su boca, para después mirar a sus lindos ojos verdes que brillaban a la luz de la bola de luces

West me dio una vuelta para quitar un poco de la tensión que había en el ambiente, aunque creo que el efecto fue contrario, porque después del paso, volvió a estrujarme contra su cuerpo, nos mantuvimos juntos hasta que la canción terminó

-Su bebida princesa -. hizo una reverencia para dármela

-¿Qué es? -. pregunté dándole un sorbo

-Champín -. dijo sonriendo

-Gracias príncipe -. dije mirando para el suelo

-Eh -.dijo el moreno levantando mi mentón, sosteniéndolo para soltar una de sus frases enamoradizas-Escucha, quiero que sepas una cosa -. cogió aire - llevo viéndote desde que naciste, he sido parte de tu crecimiento, has formado parte de mi vida desde que tengo 3 años, cuando llegaste a esa casa, en medio de la mía y la de Marcos, y enfrente de la de Álex, llegaste en un carrito amarillo, llevabas una mantita encima, era azul con nubes blancas que te regaló mi madre cuando llegó al hospital para ver a la hija de su amiga -. pausó- La primera vez que nos viste a los 3, sin contar con tu hermano, sonreíste despertando de tu serena siesta, reíste al vernos hacer muecas para que tu risa contagiosa siguiera sonando.

Empezaste a crecer, siempre he estado ahí, aunque fuera para jugar con tu hermano al fútbol en el jardín de tu casa.

Los primeros pasos que diste, los diste en el parque de al lado de la casa de Álex, al ver un pajarito que estaba en el suelo correteando.

A lo que voy, quiero decirte que me gustas desde el día en el que cumplías 10 años, en el que cogiste unas tijeras por la mañana y decidiste hacerte un flequillo y cortarte el pelo.

Desde ese día Tarín, sé que me gustas