El vaivén

54 3 0
                                    

Hola, te escribo desde mi habitación, parece que fue ayer cuando pasó todo, no se... Todo parece ahora tan frío...

Te espero aquí sentado, con frío,
En realidad se que nunca vendrás , aún así iluso guardo esperanzas.

Y es que quiero que sepas:
Que a veces echo te echo de menos
Aveces echo de menos incluso aquello que detesto de ti.

Porque sabes que?
Creo que contigo he aprendido que los sentimientos actúan como los objetos materiales:

-Porque aunque no son objetos materiales, a veces pueden llegar a pesar demasiado como para llevarlos de un sitio a otro porque la vida te pesa demasiado
-Porque aunque no son objetos materiales, a veces lo noto tan fuerte que lo puedo palpar
-Porque aunque no son objetos materiales, a veces llega a ser tan doloroso, que puede llegar a herirte y dejar cicatriz
-Pero aunque se que no son objetos materiales, por favor materializa lo.

Porque estoy esperando a que lo hagas, estoy esperando a que me digas que vaya contigo, porque yo iré.

Ahora me siento tan vulnerable que podrías romperme en pequeños pedazos con una sola palabra.

No se por qué te di el poder de decidir mis estados de ánimos, quizás lo que antes fue una responsabilidad ahora se ha convertido en un poder.

Y no se si habrá modo de entrar en tu juego , ese en el que a veces puedo sentirte cerca , ese en el que a veces puedo sentirte lejos.

Lo tengo claro, he venido jugar , pero en realidad tu eres quien decide que jugadores pueden jugar, incluso tu pones las normas de este juego.

No sé en realidad tampoco te echo tanto de menos, aunque otras veces lo haga y sienta que te quiero, pero otras veces te odio.

No sé, eres como el vaivén de mis emociones, aquellos que a veces son tan materiales que los usamos para apostar en tu juego.

Delirios de amorWhere stories live. Discover now