Capítulo 34

784 28 1
                                    

Estaba tan sumida en mis en mis pensamientos, que ni cuenta me di cuando se puso frente a mi ventanilla.

¿Por qué demonios no subí la ventanilla?

Su perfume me inunda.

Había olvidado lo bien que huele.

-¿Puedo entrar o vamos hablar afuera?-pregunta. Y yo no puedo apartar mi mirada de sus labios pronunciando cada palabra.

Asiento como respuesta, y Zayn rodea mi auto y se acomoda en el asiento del copiloto.

Hay un silencio incómodo, hasta que me aclaro la voz y comienzo a hablar.

-Comprobé lo que me dijiste. Era verdad, Sarah planeo todo-digo con mi mirada sobre el volante- Pero ese no cambia nada... Ella no te apuntó con un arma y te obligo a besar a Perrie. Me lastimaste. Y creo que todo lo que me dijiste fue mentira, no te importo, porque... Porque si de verdad estuvieras pensando en mí, aunque no digo que tengas que estar pensando en mi las 24hs. del día... Como sea, lo hiciste, la besaste, y no estabas pensando en mi-Zayn quiere hablar, pero lo detengo- Déjame terminar... -largo un suspiro- Te vi... No besándola, pero te vi con ella. Ví como te reías a su lado y me pregunte a mi misma...

-¿Si cada vez que sonríe esta pensando en mí?¿Si cada vez que...

-Zayn, detente por favor.

-No puedo, _____. Me importas. No quiero pelear, no quiero estar así. Quiero estar bien, quiero que estemos bien.-toma mi mano y entrelaza sus dedos con los míos, haciendo que mi piel se erice.

-Sarah preparo todo esto, pero no hiciste nada para detenerlo, y lo acepto. Pero no puedo hacer como si no pasara nada. Me lastimaste, y como te dije... No estoy segura de volver a intentar nada con nadie, ni siquiera sé si puedo volver a besarte...

¡¿Qué?!

Ok, hasta a mí me resulto extraña esa confesión.

-Te dejare elegir entonces...-dice liberando mi mano.

-Si las cosas tienen que pasar, pasarán, y si no tiene que pasar, no pasarán. Creo que debemos dejar las cosas como están.

-Ok-dice cabizbajo.

-Me importas, Zayn. Sólo necesito tiempo para pensarlo.

O dejar mi orgullo de lado, probablemente...

El moreno se queda pensando unos momentos y luego me mira, sonríe un tanto forzado y se acerca demasiado para mi gusto.

-Me importas también-susurra plantando un beso en mi mejilla, para luego salir del auto.

-¿Hazz por qué tienes un gemelo?-digo riendo- Oh, un momento, ¡Son tres!¡Trillizos!

¿Borracha yo? No, como se les ocurre...

-Estás completamente ebria-responde el ruliento.

-¡Já! Mira quién habla, el señor tengo un corpiño en la cabeza como vincha-replico largando otra risotada.

-Un momento,-dice levantando su dedo índice- ¡tienes cuatro senos!

Ambos reímos.

Oh, Dios.

-¡______!

¿De dónde viene esa voz?

¿Dios?

-_____, ¿qué están haciendo ahí?

Oh, sí. Estamos debajo de la mesa, en algún lugar de la fiesta de... ¿De quién era?

Last first kiss. | Z. M. |Where stories live. Discover now