Saw Wendster

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-He dicho que me dejes en paz millones de veces,¿cuándo piensas hacerme caso?-Ashley miró al chico enojada mientras guardaba sus libros con delicadeza en su mochila.

-Cuando aceptes mi propuesta.-Contestó el chico mientras se dejaba apoyar en la blanca y fría pared de los pasillos del instituto.

-No pienso aceptarlo.-Respondió la muchacha dejando su mochila en el suelo.-Nosé si te diste cuenta, pero no me gustas, no te quiero, yo no amar a ti.

-Entonces no pienso dejarte en paz, te preguntaré las veces que pueda hasta que te hartes y me digas que si, esperaré, esperaré para siempre si es necesario.-El chico sonrió ampliamente, estaba contento con lo que había dicho y estaba seguro de que la convencería, el siempre la había querido, desde que eran pequeños y se encontraban por primera vez en su jardín la había admirado, con esas melenas pelirrojas que llevaba en dos pequeñas colas y las pequeñas pecas en su linda cara, si, el siempre la había querido.

-Suerte con eso.-La chica cogió su mochila del suelo después de haber hecho de su pelo suelto una larga cola y se dió la vuelta para irse a su respectiva clase.

-¡Te amo, jamás lo olvidas!-Gritó el chico viendo como la chica entraba en su clase. Suspiró, sabía que no podría conseguirla, había hecho millones de cosas para enamorarla pero ella negaba todo, le ignoraba por completo y prefería que ni si quiera se acerquesé a ella.

-La conseguirás, tu solo espera.-Lea se encontraba detrás de el con una sonrisa pícara.-Puedo hablarle de ti, aunque...Necesito que me pagues un precio, tengo mis gastos económicos.

-¿Como que gastos económicos? Tus padres te dan todo lo que tu quieres, no tienes ni si quiera un céntimo de gastos.-Contestó el muchacho irritado.

-Esta bien, si quieres llevo mis buenas charlas sobre ti hacía otro lado.-Le dió la espalda y camino lentamente hacía otro pasillo en espera de que el la contestaría.

-¡Esta bien!¿Qué quieres?

-Una noche, tu y yo.-Contestó la chica dandosé la vuelta para volver a mirarle a sus ojos intensamente.

-No, no puedo hacer eso, yo amo a Ashley, es como traicionar a tu mujer, como maltratar a un animal...No puedo...-Respondió bajando la mirada.

-¡Oh vamos! No entiendo que ves en ella, yo soy la mas popular y tu el Dios del instituto, necesitamos estar juntos y Ashley solo esta entremedio haciendo que yo no puedo tocarte ni un poquito.-Exclamó la chica mirando para los lados en esperanza de que nadie la escucharía.

-Esa chica es genial, amo todo de ella y pienso que es perfecta,¿nunca viste esas pequeñas y lindas pecas o esos lindos y claros ojos llenos de amor? Yo si, y prefiero intentar convencerla de tirarte encima tuya para que hables de mi con ella.-El muchacho sonrió satisfecho de sus palabras y asintió con la cabeza.-Si, eso prefiero.

-Como de irritante puedes llegar a ser Wendster,¿asi qué esta noche?

-¡Dije que no!

Lea sonrió y pasó una mano por su cabello.-Eres un buen chico, el primero que me rechaza tambien pero se nota que la quieres mucho. Intentaré convencerla.

-Gracias.-El joven la abrazó con fuerza y sonrió ampliamente después de haberse dado la vuelta.

InseparablesWhere stories live. Discover now