El querer y el deber

311K 26.4K 23.3K
                                    


El querer y el deber.

22 de Octubre, 2012.

— ¿Dónde esta el hermanito rubio estúpido que amo?—grita Jeremy en pleno aeropuerto extendiendo sus brazos abiertos.

Río y esquivo a las personas para llegar hasta él. Agradezco que no seamos la clase de hermanos que finge no tocarse o tener abrazos. Porque inmediatamente nos abrazamos. Palmea con demasiada fuerza mi espalda, pero yo sólo río.

Tenía seis meses sin verlo. Cuando viajaba a otro país aprovechaba para visitarlo o las pocas veces que viajaba con mamá.

— ¡Has crecido!— bromea separándose y revolviendo mi cabello como si aun fuera un niño.

— ¡Si! También tuve mi primera erección y me masturbe por primera vez.

— ¿Tal y cómo te enseñé?— me sigue el juego. Ambos reímos y palmea mi hombro—Nada como volver a casa.

>>Aunque nada como volver y tener a personas fotografiándome— saluda tras de mi— esas personas aman fotografiar cada momento de tu vida ¿Eh?

—Ni que lo digas, tú sólo sonríe—miro alrededor— ¿En dónde esta tu equipaje?

—Vamos por él hermanito.



Sonrío, es tan extraño y familiar tener a Jeremy cantando junto a la radio mientras conduzco a casa de mamá donde va a quedarse temporalmente.

—Es extraño saber que estás de vuelta.

—Pero estás feliz y no puedes negarlo.

— ¿Piensas volverte a ir?

—Hermano apenas me he bajado de un avión desde luego no estoy pensando en irme en este momento.

—Mamá esta enloqueciendo con tu llegada. Me siento un poco celoso.

—La has tenido para ti por mucho tiempo, es mi momento. Déjame ser el niño de mami.

—Jamás. Ya sabes que soy el favorito, soy el de rostro angelical.

—Sueña. Soy su primogénito. Ese que fue la luz de su vida con tan sólo una mirada. Robé su corazón.

— ¿Qué mierda? ¿Ahora eres escritor o algo así?

—Hablando de escritores. Quiero conocer esa novia ardiente de Harry. Hermano, esa mujer en fotos luce como algo impresionante, es un bastardo con suerte.

—Créeme, ella es algo despampanante y no creo que Harry tenga intenciones de dejarla ir— ríe— aunque tampoco creo que ella lo deje ir. Están como locos el uno por el otro.

—Esa es la manera en la que funciona el amor— asegura riendo—. Hablando de amor ¿Qué pasa con mi cuñada?

— ¿Tienes una cuñada?

—Sabes a lo que me refiero ¿Has hecho algo?

—Si te refieres a babear y tener sueños pervertidos sobre ella, entonces si he estado haciendo algo.

—Pobre Hilary, protagonizando escenas pornográficas en tu cabeza.

—Si, pobre. No tiene la culpa de traer loco a alguien como yo.

—Entonces ¿Cuál es el plan?—cuestiona.

—Ninguno, seguir mi vida evitando problemas en la banda.

Escenas extras de El deseo Prohibido de DougDonde viven las historias. Descúbrelo ahora