Young Blood

Family

Eran las 3:00 am del domingo...Alex estaba profundamente dormida,pero no veía a Vic por la habitación...sali de la cama y me encamine a mi balcón puesto que la puerta de este estaba medio abierta.
Y alli estaba mi amiga...apoyada en el barandal de madera negra con la cabeza en sus brazos.
-¿Ehm...?
Me fui acercando y ella respondió a mi llamado levantando su rostro y asintiendo.
Maldición.
Habia estado llorando.
Me coloqué a su lado y no pude evitar abrazarla.

-Lo siento Alli,a veces esto puede mas que yo...no queria despertarte...prometo no hacer ruido ni...
-Hey.-interrumpi- esta bien...todo esta bien.
Acaricie su cabello en el abrazo mientras ella sollozaba.
-En serio no entiendo aun como sigues siendo mi amiga... cualquiera saldría corriendo de mi en un instante.-Rio irónicamente.
-Vic ya hablamos de esto, sabes que no me interesa en absoluto y que entre menos hablemos del tema mejor.
-No es justo Al,simplemente no lo es.
-Lo sé, se que no es tu culpa, se que no lo mereces, pero eso no significa que te tengas que menospreciar como persona,eres increíble.
Me brindo una sonrisa sincera pero triste.
-¿Por que mi familia no pudo ser como la tuya?

Su pregunta me dejo fría, tanto que me bloquee por un momento.
¿En serio ella estaba deseando una familia como la mia?
Yo por una parte envidiaba las familias de mis amigos,y con una parte quiero decir:papá.
Victoria hasta hace poco tenia todo lo que yo queria.
Una mamá casada con un padre responsable y amoroso.La familia feliz que no se ve mucho en el siglo 21.

Pero esa noche su realidad y mi sueño se vinieron abajo junto con toda ella y todo su futuro.

-Vic no sabes lo que dices.

Intenté persuadirla de quitar su ultimo comentario.

-Entonces dime ¿que desearias en mi lugar?-Suspiró- Cada maldita noche sueño con despertar en ese dia de hace 3 meses y que no pase nada.Seguir con mi vida normal sin preocuparme de lo que pueda pasar después.

-Tranquila...solo olvidalo, no ganas nada lamentandote.

-Bien...vayamos por agua por favor.

...

20 minutos después ya tenía a mi amiga en la cama babeando y durmiendo como un bebé.

Bebé...

Vic...

Ella vive aterrada con el hecho de no poder tener una familia en el futuro.

No es justo para ella ni para su padre.

Y aunque la señora Todd me caía bien no puedo evitar sentir decepción e incluso repulsión cuando la veo.
Ni siquiera la madre más cruel del mundo permitiría llenar a su familia de algo que solo traería desgracia.
No es justo para una adolescente de 15 que nunca hizo nada malo cargar con aquel peso para siempre.
Tus opciones son morir virgen o terminar de arrastrar a tus hijos con aquella maldición.

Vic fue más madura de lo que creí ante la situación .

En mi caso no sabría que hacer si me entero de que mi madre tiene SIDA.

Y sobre todo...no sabria que hacer si gracias a ella también lo tengo yo.