El destino de la vida.

392 3 0
                                    

El destino de la vida.

Capitulo I “El origen de la tragedia”.

Mientras todos lloraban destrozados en aquel tétrico funeral Miscah preguntaba como rayos pasó todo eso, después de que todo estaba tan bien en la vida de aquellos dos muchachos que unieron sus vidas para siempre hace dos años atrás, pero la vida les tenia preparada otra cosa, Miscah se decía  así misma todo el tiempo “si hubiera sabido que esto pasaría jamás me hubiera presentado a él”. Esta tragedia la dejó marcada de por vida, pero esto tiene una explicación.

Como siempre Miscah dejó de hacer lo que todos hacen, para encerrarse en su mundo y descifrar este enigma que nadie estaba interesado en resolver, sólo estaban interesados en llorar a algo que no escucha ni siente. Ella era una joven muy reservada y no compartía mucho con las personas, por lo que siempre se apartaba de los demás, para hacer lo que más le gusta: estar con ella misma.

Antes de descifrar lo que hizo que su vida amorosa se valla a su fin, reflexionó y casi admitió que su único hijo de 1 años se quedaría sin padre, pero eso no era todo el problema ella era muy joven para afrontar la vida con una responsabilidad tan grande. Aquel desdichado niño tenía 1 año y ella solamente 19, era solo una adolescente en proceso de adultez.

 Miscah se tuvo que casar a la fuerza con Christian, su difunto esposo, ya que en esos tiempos una pareja con hijos no casada era muy mal vista, él tenía la misma edad que ella cuando nació Diego, y aunque eran muy jóvenes nunca abandonaron al niño.

 Después de ver lo que sucedería de ahí en adelante con su vida- Aunque eso le llevase muchas semanas de duro autoconvencimiento – logro pensar en algo que le inquietaba desde que Christian desapareció hace un mes. Todo estaba listo solo faltaba un momento a solas y por supuesto mucha tranquilidad.

 Todo empezó un día en que Miscah y Christian se encontraban viendo la televisión después de que el niño por fin se quedara dormido, Chris tenía una mirada de preocupación que Miscah percató desde el comienzo, hasta que ya no aguantó y le preguntó secamente

-        ¿Qué te pasa? Te veo muy preocupado

-        … Nada es solo que… no importa

-        Vamos dime sé que te sucede algo, confía en mí, dime.

-        No, no es nada de verdad, no te preocupes… mira este es tu programa favorito, vamos míralo.

-        ¡Ay! Por favor ¿Crees que me convencerás con eso?, ¿Por qué solo no me dices que no me quieres contar y se acabó? No es necesario que me mientas.

-        De verdad no es nada, es que no tuve un buen día en el trabajo, no seas tan sensible.

-        Está bien, está bien.

 Aunque Miscah mostró un aire de convencimiento, seguía inquietándole aquella perturbadora mirada de su esposo, pero no quiso preguntar más para no incomodarlo.

 Pasó una hora cuando tocaron el timbre, Christian fue a ver, pero no había nadie y se quedó parado mucho rato mirando hacia la nada, lo que llamó mucho la atención de la joven. De repente se escuchó un ruido desde la habitación del niño y a continuación el llanto de éste. Miscah corrió a ver que sucedía y se encontró con algo muy extraño. La chaqueta de su esposo dentro de la cuna que nunca supo como llegó ahí. Miscah llamó a Chris Para que subiera, pero no había respuesta, lo volvió a llamar y tampoco contestó, entonces se asustó y bajó para ver por qué no respondía a su llamado. El joven estaba sentado en la entrada de su casa muy asustado, ella le preguntó que le ocurría, pero éste no contestaba, después de varios intentos fallidos por saber que le había sucedió, se desesperó y lo sacudió, esperando así una respuesta, pero solo le contestó:

Has llegado al final de las partes publicadas.

⏰ Última actualización: Jan 29, 2014 ⏰

¡Añade esta historia a tu biblioteca para recibir notificaciones sobre nuevas partes!

El destino de la vida.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora