¿alguien me explica que pasa?

capítulo 1.

Narra escritora:

*en una casa... por llamarlo de forma humilde, porque prácticamente era una mansión, pero la fachada de la casa no tenía nada que ver con los que habitaban en ella, puesto que eran personas de carácter humilde, agradecido, respetuoso y educado.

Pero concentremonos en dos personas en particular, mujeres, ellas estaban en su casa tranquilas, bailando en la cocina mientras preparaban el almuerzo, era día sábado, así que las señoras del aseo y de la cocina estaban descansando con sus familias.

Ambas bailaban al ritmo de "corazón sin cara" de Prince Royce, se reían de sus ocurrencias, especialmente de las ocurrencias de la menor, ambas eran felices, la relación de ambas era especial, no duraban ni 1 hora enojadas, ambas son muy cercanas, se dan cuenta fácilmente cuando una está mal.

Y esas dos mujeres son madre e hija, el padre se encontraba en la oficina de su casa en el segundo piso, revisando unos papeles, pero de igual forma escuchaba la música y las risas de su esposa e hija que estaban en la cocina, puesto que tenía la puerta abierta y además de que tiene buena audición.

Ambas siguieron sumergidas en su mundo hasta que escucharon el timbre.*

X1: ¿y eso? ¿Esperas a alguien mamá? *preguntó curiosa*.

X2: hasta donde yo sé, no ¿no será que vienen a ver a tu papá? *dice igual de confundida*.

X1: lo voy a llamar *camina hasta las escaleras y sube un par de escalones* ¡PAPÁ! *grita, y justo después de eso vuelven a tocar el timbre*.

X3: dime hija *dice apareciendo en las escaleras con expresión confundida*.

X1: ¿esperas a alguien? Están tocando el timbre, ya van dos veces *y justo en ese momento vuelven a tocar el timbre de manera más insistente, poniendo nerviosos a los presentes*.

X3: no espero a nadie *dice bajando hasta posicionarse junto a su hija y dirigir su mirada hasta la entrada de la cocina, encontrándose con su mujer, que estaba nerviosa debido a los constantes toques en el timbre.*

*todos estaban cautelosos, excepto una, que ya se estaba estresando, hasta que ya no era el timbre lo que sonaba, si no la puerta al ser golpeada violentamente, agotando la paciencia de la más joven.*

X1: ¡AL CARAJO! ¡YA ME ESTRESE! *gritó yendo a abrir la puerta con paso firme y con una expresión de enojo en su rostro*.

X2: ¡NEFEFTARI NO! *gritó la madre preocupada por su hija, tratando de ir con ella*.

X3: ¡quédate ahí Fernanda! *dijo un poco fuerte, deteniendo el paso de su esposa* yo iré con ella.

Nefertari: ¿¡QUIÉN MIERDA TOCA LA-!? *su reclamo quedó inconcluso, puesto que al abrir la puerta, no había nadie, desconcertándola*.

X3: nefertari *dijo una vez se acercó a su hija, pero se dio cuenta que su reclamo quedó a medias y que no estaba insultando, si no que estaba callada, mirando a la nada* ¿qué ocurre? ¿Por qué no hay nadie? *pregunta confundido*.