CORONA DE CRISTAL

NO ME CONOCES

Me encontraba en Astraea, seguía aquí y todo por culpa de Cassian, no es como que me tuviera encerrada o algo por el estilo, pero es que retomando la historia hace un par de días antes, tres para ser exactos, llegue a Haizea con la propuesta que Cassian había hecho para nosotros, se la presente a Dakota y Ryu, entre todos la evaluamos y llegamos a la conclusión de que era una muy buena, de hecho era demasiado buena para ser verdad, otra oportunidad así no nos caería del cielo, pero aun así teníamos que ser precavidos, más de lo normal, la baja que recibiríamos si todo se tratara de una catastrófica trampa que determinaría el final de mi gente.

si aceptábamos esto nos ayudaba en gran medida y esto nos beneficiaba tanto a ellos como a nosotros, si lo hacíamos ellos tendrían otro ejército con un poco de experiencia dispuesto a luchar, esto nos beneficiaría a nosotros porque recibiríamos entrenamiento impartido por la guardia real de Astraea, nación que se caracteriza por su gran manera de batalla en los enfrentamientos

Tampoco podía olvidarme del hecho de que el trato incluía hospedaje, no todos estaremos en el palacio, solo yo y mis allegados de mayor confianza, es decir Ryu y Dakota, mientras que los demás vivirán como personas normales en las casas afuera del palacio para que puedan pasar desapercibidos y no se llame mucho la atención lo cual es lo último que se quiere, tanto por nuestra como por su parte, todos mis hombres tendrán su paga por participar en los entrenamientos.

Gracias al hecho de no ser parte de la guardia real o no ser ejército realmente válido de Astraea, si no extranjero no tendríamos la necesidad de usar su uniforme y al no tener esa obligación sería mucho más fácil entrar e investigar a Vanish, reino el cual no dudo que sus pequeños atentados a las orillas de Haizea no hayan sido tan solo una distracción para algo mayor, ya sea para poder apoderarse completamente de Haizea y así extender su territorio como por un ataque invasivo a Astraea porque a pesar de que estas dos naciones por el momento parecen estar en paz al ser una de las potencias más grandes en los 4 reinos no descansaran hasta saber que la otra no es una amenaza o por parte del rey de Vanish, mi padre, ya que su ambición por el poder es más que sabida por todos.

¿Y por qué todo eso se termina conmigo estando en Astraea nuevamente sola?, fácil y para resumir solo dire que básicamente después de hablarles sobre la propuesta que nos habían hecho a todo el equipo completo y explicarles tanto las ventajas como desventajas y riesgos a los cuales nos estábamos enfrentando, la gran mayoría decidieron arriesgarse y aceptar, lo único que pidieron a cambio fueron cinco días para poder hablarlo con sus respectivas familias y organizarse para ir, Dakota y Ryu eran huérfanos y ninguno de los dos tenía pareja hasta el momento por lo que el caso era distinto, pero con lo de la tienda me propusieron que yo fuera a Astraea para vigilar a Cassian, seguir hablando del trato era primordial para saber que no había ninguna trampa, pues al ser un grupo reciente y pequeño comparado a los grandes ejércitos que tienen los reinos como guardia real teníamos que cuidarnos y bastante, la verdad es que si Cassian decidiera cambiar toda la propuesta y resultara en una trampa no podría hacer nada al respecto, pero el simple hecho de saber que tanta confianza puedo depositar en él para cuidar a mis hombres me resultaba necesario, no podía permitir que ellos se arriesgaran por mí y yo no por ellos, así que así fue como yo volví a Astraea en lo que Dakota y Ryu arreglaban todo lo relacionado con la tienda, lo cual tarea fácil no sería.

Durante este par de días estando en el palacio había estado observando la rutina de Cassian, la cual era bastante monótona si es que la ponía a comparación de otra rutina que también había visto ser empleada por un rey, mi padre, el cual era muy diferente a la de Cassian

recuerdo como mi padre decía que parte de ser el rey radicaba en saber que la gente hiciera bien su trabajo, él contaba con muchas libertades, es decir, dejaba a su gente al mando mientras él salía, esto no pasaba a diario, pero sí bastante a menudo, recuerdo como mi padre cuando había una crisis o después de desaparecerse un par de días se quejaba por contar con un sin fin de reuniones y bastante trabajo acumulado, aunque yo lo acompañaba a algunas reuniones de gabinete, claramente no me dejaba asistir a todas.