Corazón en llamas (Ross Lynch)

Capítulo 2

Al fin llegué a casa, Rydel ya me esperaba .

—¡Ross!— exclamó cuando me vio entrar.

Mi hermana estaba sentada en el living viendo la televisión.

—Delly— dije sin muchos ánimos y me senté junto a ella.

—¿Qué te pasa? Ese no es el Ross que yo conozco— me miró tratando de descifrar qué me ocurría.

Mi hermana me conocía a la perfección y sabía que algo no andaba bien.

—Es Chloe— sonreí de lado.

—Esa chica de nuevo— rodó los ojos.

—Sí, es sólo que hoy me enteré de que fue lo que pasó con Thomas, ese imbécil la lastimó— la ira me carcomia.

—Sabes que debes de confesarle tus sentimientos a Chloe.

—Lo sé, lo haré pero es que me da miedo que eso arruine nuestra amistad. No quiero perder a la mejor chica del mundo, además ella ahora no está muy bien con esto del amor y decírselo podría arruinarlo todo, primero debo ayudarla a sanar.

—Y no la perderás, ella es tu mejor amiga desde hace 3 largos años. Una amistad así no se termina tan fácil pero sí, ayudala también. Solo digo que tarde o temprano tienes que contarle, no podrás ocultarlo por siempre— dijo mi hermana mientras llevaba unas cuantas palomitas a su boca.

—Tienes razón— suspiré— tal vez hable con ella mañana— yo también tomé unas cuantas de sus palomitas.

—¡Ese es mi Ross!, siempre seguro de ti mismo— me abrazó.

Otro día más, desperté e hice la misma rutina de todos los días. Fui por Chloe.

—Buenos días, Rossy— me abrazó.

—Buenos días— le sonreí para luego salir tomados de la mano al instituto, cómo todos los días.

Llegamos al instituto y las clases lastimosamente comenzaron, ya estaba harto y necesitaba unas vacaciones.
Después de una larga clase de Historia, por fin llegó el descanso.

Chloe y yo siempre comíamos juntos, en realidad siempre estábamos juntos. Habían varios rumores sobre que éramos novios por lo unidos que éramos. Llegamos hasta  una mesa vacía en la cafetería con nuestros almuerzos y comenzamos a comer.

Thomas casualmente venía entrando también junto a su grupo de amigos y pasó junto a nuestra mesa, para ser más específico pasó junto a mí y cuando pasó lo golpeé notoriamente a propósito con mi codo aunque fingí no darme cuenta.

—Lynch, ten más cuidado— dijo Thomas algo molesto mientras me lanzaba una rápida mirada y siguió su camino.

—¿Por qué debería tener cuidado con alguien que no sabe cuidar a una mujer?— respondí.

Chloe me miró con los ojos bien abiertos, sabía que esto no estaba bien.

Thomas se detuvo y sus amigos también, todos voltearon a verme, Thomas me miró rápidamente a Chloe.
Chloe empezó a preocuparse cuándo vio acercarse a Thomas hacia nuestra mesa.

—Así que Chloe ya te fue con el chisme— rió burlonamente— no te metas en eso, ¿entendiste?. No trates de hacerte el héroe, ella jamás se acostará contigo aunque lo hagas. No te pierdes de mucho tampoco, no es como que sea buena en la cama — los amigos de Thomas rieron por su comentario.

Miré a Chloe, ella solo bajó la mirada mientras sentía vergüenza, no tenía porque contar ese tipo de cosas. Levantó la mirada cuando escuchó un golpe, mi puño había golpeado directamente la mejilla de Thomas.