🌹 Plants vs Zombies Bitácora SEED #1: Una misión y un rescate. [ Alpha ]

🌹 | 🌺 - Parte 13 | ♞🧡- Más que inteligencia |

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5 de mayo. 12:43 am.

Captain Combustible, eficiente soldado, el más al mando esperado.

《 ✿ ══ • ⋅◈⋅ • ══ • ● • ══ • ⋆★》

          —¿Ha llegado algo bueno? —Preguntaba la rosa mientras analizaba unos papeles e indagaba en la maquinaría que se encontraba enfrente de ella. Rose introducía varios papeles que la maquina tragaba como dulces, luego realizando pesados procesos para después imprimir el veredicto en el costado de esta.

          —Por ahora, nada. Ninguno de estos sobrepasa el 30% de la calificación total, y los que sí la sobrepasan tienen respuestas sacadas del internet, en plan copia y pega. Ni siquiera se esforzaron en cambiar un poco la información —Suspiraba decepcionado Captain Combustible, mientras pasaba los papeles a Rose quien los recibía para entonces entregárselos al aparato.

          Los tiempos no eran del todo favorables para la ocasión. Había habido lluvia toda la mañana y la tarde, y parecía que la noche también se orientaría por esos lares. Hace poco, Clara me había contado acerca del plan que se había efectuado en una de las islas cercanas a Neighborville. Precisamente, Isla Trampa Turística. En el se había instalado una "maquina de tormentas" —Al menos, así es como todos la llamaban—, y que haría una operación de Invasión de Territorio justo con la misión de detener el plan de semejante iniciativa.

          Habían perdido. Quizá esa era la razón del espantoso clima. De cualquier forma, Isla Trampa Turística no estaba muy lejos de nuestra ubicación, Safes Countries.

          Rose y Chompzilla rebuscaban entre todas las hojas impresas que habían conseguido de las respuestas de la dichosa prueba. Nadie se había acercado siquiera a lo esperado, y eso solo hizo desilusionarnos a los tres, que aun así aguardábamos la esperanza de una buena respuesta.

          —Guau... guau... —Ladraba Chompzilla con desanimo, mientras ayudaba a Rose a organizar los papeles. Ella también se denotaba sumamente decepcionada con los resultados finales.

          —¿Habrá sido demasiado difícil acaso? ¿Quién más se encargó de las preguntas, Alberto?

          —Penelopea se encargó de las preguntas de matemáticas, historia y lenguaje. Creo que se excedió un poco con la dificultad de estás.

          —¿Y las preguntas de cultura general?

          —De esas preguntas se encargó Lucía...

          —¿Y quién demonios permitió eso? Mira esto, "¿Quién fue el actor que interpretó a Junior en el programa de televisión La Familia Setaluche?", ¿Quién rayos sabría de algo así?

          —Emmh, s-supongo que personas cultas. Por eso de "Cultura general", Alberto. Las raras obras humorísticas Mexicanas cuentan como ta-

          —Esto es ridículo... ¡Ridículo, Rose!

          —¡Woof! Guau, guau...

          —Si, lo sé, Chompzilla. No estoy alterado, solamente... pues ciertamente decepcionado.

          La máquina que se encargaba de imprimir la respuesta realizó su característico sonido, antes de imprimir otra hoja de respuestas y dejarla caer mi escritorio vació.

          —Oh, otra más... veamos que tiene esta que decir.

"IDIOTAS DECEREBRADOS.

¿REALMENTE PIENSAN QUE CONSEGUIRÁN ALGO CON TODO ESTO?

SON UNOS PERDEDORES Y NO SABEN QUÉ HACER CON LA INVASIÓN ZOMBI

LARGUENSE A SU JARDIN, ESTUPIDAS PLANTAS INUTILES"

          Mi expresión bien pudo ser la de un chimpancé enfurecido y rabioso. Con toda la ira que cabía en mis células sanguíneas, arrugué con inmensurable gravedad la hoja de papel y la lance al suelo para pisotearla con frenesís y cólera incrustados en mis ojos. Grité y balbucee miles de palabras insultantes e hirientes y quemé el fragmento de la estimada como si el vil trozo de mierda que era.

          Eso era, mierda, mierda, y más mierda.

          —¡A-alberto!

          —¡¡Guau, guau!!

          —¡¡No estoy haciendo una escena, Chompzilla!! ¡¡Es normal que estés enfadado si todo te sale mal!! ¡¿Y saben qué más, ustedes dos?! ¡¡Todo esto fue una vil pérdida de tiempo!! ¡¡¡Una pérdida de tiempo!!! ¡¿Me oyen?!

          Rose me observó con expresión perpleja. Chompzilla se ocultó en sí mismo mientras lloraba y hacía pucheros. Todavía cegado por la ira, me acerque lentamente a la máquina de impresiones, con intenciones de destrozarla enteramente. Casi podía apostar que la espuma se me salía de la boca.

He de decir, Cesar, que nunca había caído tan bajo como lo hice ese día. Aún tengo el enrarecido y penoso recuerdo de ello.

          Antes de que la arrojara contra el suelo, la maquina volvió a realizar otro de sus sonidos, mientras imprimía más hojas de respuestas de manera forzosa, y dejaba caer las paginas en mi escritorio viejo y tosco.

          Me detuve en seco, mi expresión era como la de ninguna otra. Me volteé entonces y me alejé con brevedad, totalmente avergonzado por la actitud que había dado a mostrar. Gruñí y me centré en orientar la vista fijamente a la pared, deseando que la tierra me engullera y no dejara ni un solo rastro de mi presencia.

          Escuché el sonido de la maquina procesar una última hoja, me encogí de hombros como si fuera un infante y me retraje a lo alto en la pared vacía a mi lateral.

          Se había acabado. Era el último cuestionario.

          —Alberto...

          Voltee, más por respeto que por decisión propia. Rose sostenía las hojas de papel que denotaban tinta fresca y rojiza propia del aparato de revisión. Me observó con expresión incierta y dudosa para luego tragar saliva y pronunciar unas impactantes palabras.

          —Revisé este último. Tiene una puntación perfecta.