Hola de nuevo (SuperCorp)

Capítulo 4: Citas

Presente

Lena intentó no ponerse nerviosa mientras tomaba una última nota y dejaba a un lado el bolígrafo. Luego volvió a cogerlo. Había mucho que hacer y el trabajo sería una buena distracción hasta que llegara Kara. Volvió a dejar el bolígrafo. Si empezaba, sabía que podría cancelarlo. Encontraría algo para posponerlo. Alguna emergencia que pudiera ignorar mientras no supiera que estaba allí. Suspiró y se levantó mirando por la ventana, con la atención puesta en la ciudad que se extendía ante ella.

La puerta se abrió y sonrió. Sintió que su sonrisa crecía mientras se giraba.

"Llegas temprano. Yo.."

Se detuvo, su sonrisa desapareció al ver a Lillian.

"Supongo que esperabas a otra persona", dijo Lillian.

"Bueno, estaba sonriendo", respondió Lena.

Lillian entrecerró ligeramente los ojos.

"Se diría que me odias".

"Uno podría".

Lena ignoró a su madre y se giró para recoger su abrigo. Se acercó al espejo mientras se lo ponía. Se aseguró de mantener un ojo en Lillian mientras comprobaba que su maquillaje seguía siendo perfecto y que su pelo seguía en su sitio. Se retocó el pintalabios sin perder de vista a Lillian. Miró su reflejo por un último momento y sonrió.

Llevaba una camiseta negra escotada y unos pantalones negros ajustados con un cinturón dorado. Su abrigo de cachemira era de un bonito tono granate y, en una feliz coincidencia, combinaba sorprendentemente bien con su pintalabios. Estaba jugando con los antiguos favoritos de Kara, pero no de forma evidente. Tenía algo de moderación. Si no fuera así, se pondría una camisa blanca y unos pantalones de cuero. A Kara le gustaría, pero sería demasiado obvio. Después de todo, este era un juego largo. Miró a Lillian en el espejo.

"Voy a bajar. ¿Te gustaría acompañarme?", preguntó recogiendo su bolso.

Lillian la consideró por un momento, y sus ojos recorrieron el atuendo de Lena. Lena enarcó una ceja. Lillian asintió. Lena abrió la puerta y le indicó a Lillian que la precediera. Lillian se detuvo un momento a mitad de la puerta y miró a Lena antes de continuar. Lena la siguió poniendo los ojos en blanco. Jess ya se había ido, lo que explicaba cómo había llegado a la oficina. Lena tomó nota de que, en el futuro, el personal de seguridad la detendría en el vestíbulo. Entraron juntas en el ascensor.

"¿Por qué has venido a verme?" preguntó Lena.

"¿Necesita una madre una razón para ver a su hija?"

"Sí que la necesitas".

Lillian se quedó extrañamente callada mirando a Lena como si intentara resolver algo. Las puertas del ascensor se abrieron y Lena hizo una señal silenciosa a su seguridad. Se acercaron mientras ella se abría paso por los pisos de mármol. Con el rabillo del ojo vio a Kara acercándose a la entrada. Lena dejó de fingir que miraba su teléfono.

"Lo siento, madre, tengo que tomar esto, Avi, por favor, acompaña a mi madre a la salida".

El guardia "Avi" asintió con la cabeza mientras Lillian veía a Lena darse la vuelta y volver al ascensor con el teléfono en la oreja. Lillian dejó que el guardia la acompañara a la salida justo cuando Kara entró. Lena sonrió mientras Kara se acercaba.

"Creía que nos íbamos a encontrar en tu despacho", dijo Kara envolviendo a Lena en un fuerte abrazo.

"Apareció mamá y tuve que deshacerme de ella", dijo Lena devolviéndole el abrazo.

Kara se rió y se separaron.

"¿Nos vamos?" Preguntó Kara.

Lena asintió tratando de no parecer nerviosa mientras se dirigían al aparcamiento. Kara parecía confundida, pero entonces Lena levantó las llaves de su coche.