Capítulo 6.

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Nos quitasteis la libertad

Olvidasteis vuestra responsabilidad

Y así decreció vuestra efectividad

¿Quién votará si el pueblo muere por falta de pan?

¿Qué pasó con el capital?

No queráis callarnos, intentamos hablar y solo recibimos disparos.

El daño está causado,

la acción se desenfunda

y el poder crece, tanto que no cabrá en ninguna urna.

Vuelve el Hip Hop a la calle

No os olvidéis, vamos a por todas.

Pues cuándo nos quedamos sin nada,

tan solo tuvimos ganas

De ver cómo vuestro sistema se apagaba." 

Sean y Alejandro han sido capaces de infiltrar unas pequeñas rimas dentro de la televisión. Hasta hacía 10 años esto había sido imposible, ellos no tenían suficientes formas de poder lanzar el mensaje. 

En la Mancha todo está revuelto, la gente grita de emoción. Muchas personas dicen que todo ha cambiado gracias a mí, aunque yo me sigo viendo insuficiente. Yo no tenía ni idea de esto hasta que no ha salido, llevo días encerrada dentro de la cama y mantengo al máximo la soledad, pues no me apetece dar explicaciones a nadie sobre por qué me había desmayado aquella tarde. 

Creo que lo que más miedo me da de todo es la idea de enfrentarme a Alan. Él sabe que entre nosotros algo no marcha bien, al igual que lo sé yo, pero ninguno de los dos está dispuesto a hablar de una forma totalmente clara. Yo le quiero, le quiero tanto como nunca había querido a nadie, en cambio, no creo que llegue a amarle y suena egoísta el pensar que si tal vez Sean no hubiese aparecido por nuestras vidas, todo seguiría igual que antes, pero no soy capaz de engañarme a mí misma por mucho que quiera. 

 Sigo pensando en el recuerdo que tuve aquella tarde.. ¿Y si tal vez Sean tenga razón? Tal vez, solo necesite algo de tiempo para entenderme. Debo llegar a entenderme y debo, por respeto, dar una oportunidad a mi antiguo "Yo". Si estaba loca por Sean antes de que me borrasen la memoria, creo que mis razones tendría.

En fin, evito pensar en esto aún así, pues hay cosas más importantes ahora mismo que yo. Todavía no sé cómo afrontar una revolución, así que muchísimo menos, liderar una. Esta es mi familia, las personas que luchan por un mismo objetivo que el mío - ¿Y no era acaso, la desigualdad, mi primera queja desde los principios de los días?- así que de cierta forma, hemos tenido que volver. Creo que nunca nos fuimos, me refiero al hip hop, a la gente de las calles y es que, el pueblo tiene una única voz y debe ser escuchada.

- Es hora de sacarte de la cama, tienes que contemplar por ti misma lo que han conseguido tus versos.- Dice Sean, después de entrar por la puerta y dar un beso en mi caliente frente.- Va, sé que me dijiste que no se lo dijera a nadie, pero esas rimas son tuyas.

- No tengo fuerza.- Respondo haciéndome la niña más enferma del planeta.- Puede que mañana...

- Sal ya, o te llevaré en brazos.- Y entonces, empieza a hacerme cosquillas, las cuales acaban en una pelea de almohadas. Cuando siento que mis hoyuelos van a estallar de la risa contenida y emitida, me doy cuenta de que alguien más abre la puerta, Al. - Eh!- Saludo. Aunque se puede notar en su cara la decepción y el enfado.

- Siento haber interrumpido algo. Mejor me marcho.

- No, da igual, me voy yo. Al fin y al cabo te la he robado un poco estos últimos días.- Responde Sean de espaldas a él, guiñándome un ojo. No puedo evitar esbozar una sonrisa, aunque Alan se lo toma de todas las maneras menos bien.

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⏰ Last updated: Nov 27, 2015 ⏰

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