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Un sueño, una vida. El pequeño Jimin siempre se posaba sobre la ventana de su dormitorio, podía ver la gran Luna observarle y darle una hermosa vista. Recordando y tarareando aquellas historias tan bonitas en donde la chica mas bonita o la mas afortunada encontraba a su príncipe azul, en donde, al encontrarlo vivían una vida llena de felicidad, sin preocupaciones, sin nada intermedio por que llorar.

Una familia hermosa, con los hijos mas educados, mas alegres y respetuosos.

Eso quería Park Jimin.

El rubio pudo sentir ese indescriptible amor color de Rosa, su relación con Jungkook, desde hace dos años, daba unos frutos excelentes, se quería, se amaban.

JiMin empezó a trabajar en restaurantes pequeños, con una ayuda de sus padres, quien siempre fueron amorosos con él, y la ayuda de Park Chanyeol, su hermano mayor, pudo superarse y hacerse dueño de algunos restaurantes internacionales.

Su carrera también daba las metas tan disfrutables. 

Jungkook trabajaba como ejecutivo en una empresa de vienes raíces, sólo contaba con su hermano mayor, Jeon Enwoo y su madre, quien algo distante desde el abandono del Señor Jeon. 


A veces, JiMin se preguntaba ¿Dónde quedo ese Jungkook tan cariñoso que conoció en la Preparatoria?

Jeon no se iba con rodeos, Jeon era caballeroso, Jeon era rudo, Jeon era alguien desconocido.

DESPUES DE TODO TE PERDONO kookmin osDonde viven las historias. Descúbrelo ahora