𝐔𝐧 𝐛𝐞𝐥𝐥𝐨 𝐬𝐞𝐜𝐫𝐞𝐭𝐨 // 𝙲𝚑𝚎𝚜𝚝𝚊𝚙𝚙𝚎𝚗

₀₀₂

Viernes, Prácticas 1
Bahrain 2021

Las prácticas habían transcurrido con naturalidad, Checo había quedado en 6to lugar, el cual no le parecía un buen resultado para comenzar la temporada, pero aceptaba que tenía que acostumbrarse al monoplaza y que al comienzo había dado batalla frente a los Mercedes.

Mientras se quitaba su casco y su equipamiento escuchó una voz conocida la cual clamaba su nombre.

-Checo! ¿Qué tal mi amigo?- El alfa dominante de Mercedes se encontraba caminando hasta el tapatío con una sonrisa. -Estuviste impresionante hoy.-

El pecoso le entrego su casco a uno de sus ingenieros para abrazar a su amigo.
Hablaron por unos minutos sobre la carrera entre otras cosas, el receso de fin de temporada había sido largo y les alegraba ponerse al día después de tanto tiempo.

Su plática fue interrumpida por el compañero de equipo del mexicano, el cual al salir de su garage, ya con su playera de RedBull, le dedicó una mirada molesta a Sergio y a Lewis mientras se acercaba a los antes mencionados.

-Lewis.- Saludó sin mucho entusiasmo al mayor, desde que Max llegó a RedBull comenzó a tener una rivalidad con el moreno, que además de ser el actual campeón de la temporada pasada, es uno de los pocos alfas dominantes además de Max.

Con pocas ganas de tratar con el menor, Lewis se despidió de Checo con un abrazo y se marchó, no sin antes despedirse de Verstappen con un simple movimiento de cabeza.
El silencio reinó por unos instantes, hasta que el mayor se disponía a marcharse a las duchas para dar finalizado su turno e irse a casa.

-Estuviste lento.- Soltó sin decoro el alfa dominante, lo que ocasionó que el tapatío detuviera su caminar y mirara a Max con un rostro con notoria molestia.

-Me estoy acostumbrando al vehículo.-Dijo tratando de mantener el porte de alguien prudente, pero la mirada egocéntrica del rubio no le hacía más fácil la labor.

-Lo sabía, no puedes ganar ni aunque tengas un buen monoplaza como este.- Rió burlón el menor.

La sangre de Sergio hervía no podía creer el atrevimiento en las palabras de Max, a lo largo de su carrera nunca había tenido un compañero más testarudo y molesto. Se acercó al menor y mirándole le reclamó.

-Solo dame tiempo niño, y solo verás mi polvo.- Evitando que el neerlandés dijera otra palabra, salió corriendo hasta las duchas con una sonrisa victoriosa, ya que sabía que había dejado disgustado al menor.

Se despojó de sus prendas para entrar a la ducha, al fin y al cabo el menor ya se había cambiado y era el último corredor ahí. Disfrutaba de las gotas de agua que recorrían su cuerpo, quitando la tensión de estos, estaba muy absorto en sus pensamientos hasta que se dió cuenta de un aroma dulce inconfundible para el, olía a gardenias.

Tomando el bote de shampoo el cual momentos atrás se había echado, descartó la idea de que aquel olor proveniera de aquel envase, era su aroma. El tapatío se encontraba totalmente confundido, había tomado su dosis normal de pastillas y nunca le había causado algún problema o algo por el estilo.

-Maldita sea.- Comenzó a ponerse algo nervioso, auto calmandose recordando que era el único ahí. De forma inmediata limpió cualquier jabón que siguiera en su cuerpo para tomar su toalla y comenzar a secarse.

Algo nervioso salió de las duchas, tratando de no toparse con nadie para que no se le cuestionara por el agradable olor, con mucha suerte logró su cometido de pasar desapercibido por la mayoría de ingenieros y mecánicos del garage, por casi todos, menos al chico rubio que le venía siguiendo con la mirada desde que notó su nerviosismo mientras salía de las duchas.