-Tu vendras con migo, o si no matare a tu manada- dijo tomando mi brazo con fuerza y arrastrandome hacia su auto.
-¡No te la lleves a mi niña!- Gritaba mi padre.
-Tu vendras con migo, o si no matare a tu manada- dijo tomando mi brazo con fuerza y arrastrandome hacia su auto.
-¡No te la lleves a mi niña!- Gritaba mi padre.