—Que bueno que estás aquí, Kim.
—Teniente, dejémonos de rodeos, ¿qué es lo que necesita?
—Ya que estás tan apresurado, te agradecemos por colaborar con el caso del agente A-D. —El hombre notó la inquietud del chico rígido frente a él, prosiguiendo —Se que no te gustará, pero te necesitamos de vuelta.
—Disculpe señor, pero, ¿Qué acaba de decir? —La noticia le tomo por sorpresa por lo que tampoco le agradó lo escuchado, mientras el mayor se mostró inflexible —Con todo respeto, no puede pedirme algo así, usted más que nadie sabe que yo renuncie a esto cuando mi servicio terminó, regresar sería un retroceso a un pasado turbio, lo lamento mucho, pero me niego.
—Creo que no te quedó claro, pero esto no es un favor, ni una opción, es un orden Kim. —Se mostró severo. Taehyung estaba inconforme con la decisión, pero ellos lo necesitaban de su lado. —Es más que evidente que tú sigues estando más que calificado para esto, así que, espero verte el lunes a primera hora en mi oficina, de lo contrario, tu renuncia será tomada en cuenta como traición.
El castaño decidió no volver a negarse, era un clara amenaza que sabía, perjudicaría muchas cosas en su vida diaria que con mucho esfuerzo había logrado mantener en orden, y hacer una rabieta solamente le causará más problemas, tomo los documentos que estaban sobre el escritorio y salió casi azotando la puerta, llegando al estacionamiento, entrando sin decir nada, al auto de NamJoon.
—¿Y? ¿Qué pasó?
—El anciano me quiere de vuelta
—¿Qué? Espero que te hayas negado —No obtuvo respuesta, por lo que asumió que estaba equivocado —Amigo, sabes bien que regresar solo te traerá más problemas, recuerda lo que pasó, noso-
—¿QUE QUERÍAS QUE HICIERA? —Grito alterado por lo mencionado —El me amenazó, y nadie puede alegar con el superior, los ayudaré, y acabaré definitivamente, eso es todo, vámonos.
Ambos se quedaron callados, no planeaban seguir peleando, y tampoco querían sacar el tema de nuevo, como era de costumbre, volverían a enterrar esa conversación bajo tierra, y seguirían con su vida. Entre el camino NamJoon dejo a Taehyung frente a la casa de Jeon, deteniendolo.
—Espero que sepas lo que estás haciendo, cuida a ese chico y no los metas en más problemas. —Solto su brazo dejándolo cerrar la puerta, para luego irse.
—Justo ahora tiene que pasar esto... —Toco la puerta un par de veces, asustandose al ver la puerta abrirse casi al instante, exaltandose —Ho, hola Ggukk.
—Hola Tae, ven, pasa. —Se hizo a un lado no sus muletas para que el otro pasará. —Qué bueno verte de nuevo, ¿Cómo has estado?
—Bien pero, déjame ayudarte —Con cuidado lo ayudo a caminar hasta sentarse en el sofá. Ya habían pasado días desde el accidente, pero aún estaba preocupado de que algo le pasará. —Crei que SeokJin estaría cuidándote, recuerda que el médico dijo que no podía esforzarte por ahora.
—Tranquilo, he aguantado cosas peores, estoy bien, SeokJin me dejo porque debía ir a la farmacia por mi medicina. —Se acomodó hasta que recordó porque se había levantado en primer lugar. —Casi lo olvido, me iré a duchar, no tardó, si regresa SeokJin le avisa que estoy arriba.
—Claro, no hay problema. Ten mucho cuidado.
—¡Seguro!
Taehyung se quedó husmeando por la sala, observando las miles de fotos u retratos, era un hogar muy alegre para vivir únicamente él, aunque sin duda vivía bien gracias el si mismo trabajo, desde siempre predijo que el lograría grandes cosas, pero sin duda superó sus espectativas. Aquellas medallas y recuerdos de la preparatoria, colgados en la pared, lo ponían melancoloco, como ellos pudieron de la nada sol-
—¡Demonios, no otra vez! ¡Ahg!
El castaño no dudó ni un segundo en levantarse y correr hasta el segundo piso y abrir la puerta rápidamente entrando sin pensarlo mucho, a su habitación.
—¿Taehyung? ¡Taehyung!
—Aqui estoy, ¿que sucede?
—Solo me resbalé... Pero no me puedo levantar.
—Dejamen ayudarte, voy a-
—¡No vayas a entrar!
—Pero- ¿No te lastimaste? Necesitas salir de ahí, o ¿esperaras a que SeokJin regrese?
—Si no hay opciones, si
—Dejame ayudarte, no veré nada que no deba ver. —No obtuvo ningún respuesta así que dedujo que el menor se había rendido, así que se dedicó a rebuscar entre los cajones al con lo que el chico se pudiera cubrir, encontrando una bata de baño, tomando valor para abrir la puerta del baño, corriendo un poco la cortina para poder cerrar la llave de la ducha y entregarle la prenda —Ponte esto, ya te ayudaré a salir
Le dejó su espacio al otro para que cubrier así cuerpo expuesto, mientras Taehyung se dedicó a quitarse su abrigo y arremangarse su camisa, poco después escuchando una señal de Jungkook de que ya podía ayudarlo; abrió totalmente la cortina de la ducha, recibiendo en sus brazos al pelinegro, cargandolo con delicadeza hasta salir del baño, guiandolo de vuelta a su cama, dejando que el otro se acomodara.
—Agradeceria que no me dieras esa clase de sustos de nuevo, Jungkook.
—La próxima vez te avisaré si voy a caerme. —Bromeo sarcástico, sacándole una sonrisa al otro. —Gracias por... Continuar ayudándome.
—Te dije que estaría a tu disposición para lo que necesitarás. No tienes que agradecer.
—De verdad me hace sentir culpable que hagas todo esto sin obtener nada, puedo pagarte o-
—Jeon. —Sentencio serio —No soy un empleado tuyo, no te ayudo por caridad, ni soy forzado a nada, estoy contigo porque me apetece hacerlo, y porque me agrada tu compañía, no necesito ninguna recompensa. ¿Esta bien? —El otro solamente se quedó en silencio. Quizás había sido demasiado serio o lo había incomodado. —Es decir... Me quedaré contigo, si es que tú estás de acuerdo, tampoco quiero obligart...
—Esta bien, me agrada tu compañía, es solo que... Tengo la sensación de que estuviera utilizandote
—No digas tonterías, estamos trabajando en tener una amistad, es normal que nos ayudemos mutuamente. No tienes que tener ideas equivocadas. —El entendió tarde que sus palabras fueron como arma de doble filo, queriendo abofetearse a si mismos, pero, tenía razón, más tenía que buscar una amistad en el, no era seguro involucrarse en exceso. —Estaras bien unos minutos? Tengo que ir a mi casa para cambiarme de ropa.
—Espera —se inclinó un poco hacia un lado de la cama, abriendo uno de los cajones de la mesita de noche, sacando una camiseta doblada, extendiéndola hacia el frente. —Puedes tomar algo de mi ropa, generalmente visto cosas holgadas, seguramente te queda.
—Gracias. —Se acercó hacia el tomando la camiseta, sentándose en la cama de espaldas al otro para poder cambiarse.
—Taehyung... —Se detuvo para pensar lo que diría —¿Porqué siento que tienes algo que decirme?
—¿De que hablas?
—Desde que llegaste siento que viniste por una razón en específico, no digo que malinterprete tus buenas intenciones, pero, ¿Pasa algo?
El castaño se quedó callado dándole la espalda al otro, sabía que Jeon siempre había tenido una maldita intuición que jamás le había permitido ocultarle ni el más mínimo detalle, y como en un principio, él volvía a ser débil ante esos ojos que esperaban una respuesta honesta de su parte, ni siquiera era necesario voltear para saber la expresión que seguramente tenía en su rostro.
—Yo... Estaré fuera del país el mes entrante. —Termino de cambiarse, sin voltear a verlo intento explicarle. —Se que no es nada relevante, pero quizás sentí que debía decírtelo.
—¿Es algo de tu trabajo?
—Algo así, espero volver lo antes posible, simplemente detesto la idea de estar fuera del país, los viajes nunca me trajeron nada bueno.
—Se que sigues pensando que puede pasarme algo.
—Mentiria si dijera que no.
—Realmente no planeo estar fuera de casa estos días, y Hoseok se sintió tan culpable por lo que ha pasado que me contratará guardaespaldas. —Rió por lo bajo ante la idea. —No tienes que preocuparte tanto por mi.
—Espero de corazón que las cosas mejoren...
Su positivismo era alto, pero su miedo era mayor cuando se trataba de dejar al pelinegro, podía saber muchas cosas de el, pero nunca llegaba a convencerlo totalmente sus capacidades para protegerse, aunque fuera la persona más fuerte del mundo, siempre había algo que acabará por lastimarlo.
Lastimosamente esto pasaba siempre que el castaño estaba ausente, y como siempre se había confiado demasiado.
—¿De verdad piensas que esto va a funcionar? Es totalmente estúpido.
—Escucha, si no lo conseguimos, igualmente morirá de todas formas, ganamos en cualquier circunstancias, pero tienes que hacerlo.
—¿Cuáles son mis ganancias?
—Treinta por ciento de todo y lo que sea que consigas por ti mismo.
—Estas loca, pero estoy dentro. Pero si alguien nos descubre los echaré de cabeza.
—Si alguien llega a enterarse tú serás la primer presa, no te confíes mucho querido.
—Como sea, seguiré con el plan, adiós. —Colgo la llamada observando los planos frente a él.
Tenía todo un esquema de posibilidades ante sus ojos, al más minimo cambio el plan iría en dirección a cualquier otra acción, pero no le eran suficientes, debía asegurarse que todas y cada una de las variantes dieran como resultado el objetivo de tanto lío.
Pero eso nada más era teórico, a la ahora de actuar debía meterse en su papel y ser totalmente convincente.
Era un verdadero enrredo.
Abrió nuevamente ese expediente releyendo todo lo que necesitaba saber del sujeto, fechas, números, lugares, era toda una fachada, pero pese a tener todo lo necesario, seguía pensando que algo estaba incompleto, como si algo lo estuviese pasando por alto.
Pero esa inquietud quedó perenne en él, sin poderla resolver.
Simplemente no encontraba de qué manera continuar esta historia, pero ya que eh estado actualizando las otras que tengo, dije ¿Porque no? Esto irá algo lento, pero espero poder concluirla en algún momento, por ahora espero sigan leyendo.
Vuelvo en otros dos meses JAJAJAJA.
🤙🏻🐢Tomen awa.