Te amo, quizá no es para tan...

user85119175 tarafından

178 23 0

Este libro te llenara de adicción y afición con cada pagina que leas, pues en este libro surge la historia de... Daha Fazla

Introducción
Capítulo 1
Capítulo 2
Capítulo 3
Capítulo 4
Capítulo 5
Capítulo 6
Capítulo 7
Capítulo 8
Capítulo 9
Capítulo 10
Capítulo 11
Capítulo 12

Capítulo 13

8 0 0
user85119175 tarafından

-sé que es mucho pedir amiga, pero necesito ese favor.

-no, no, no, jamás haría tal cosa – estábamos alistándonos Elaisa y yo para la fiesta de Rob. Elaisa tenía una sorpresa más para Rob pero necesitaba tener el departamento solo, así que me pidió que me quedara en el departamento de Tay solo por una noche.

-tu sí que estás loca, con qué cara me pides eso después de saber la situación que hay con Tay.

-solo te estoy pidiendo que finjas que es tu cuarto, además Tay dormirá en el sillón y tú en su cuarto, Fácil

-no, no es fácil, no puedo hacer eso.

-¡¡¡¡haré lo que tú me pidas, por favor!!!! – se arrodillo y comenzó a jalarme de la pierna.

-¡ay! No sé cómo demonios voy a hacer esto.

-gracias gracias gracias. Eres la mejor. Te amo mil

-ya veré como me la vas a pagar.

-lo que tú quieras.

Tomé una bolsa de plástico y metí mi pijama y mi cepillo de dientes, no sabía que es lo que estaba haciendo, llegaría, hablaría como si no hubiera pasado nada, luego simularía que estoy en mi cuarto, cerraré con llave y me dormiré, y a la primera hora de la mañana saldré hacia mi departamento.

-pero que frio está haciendo, y pensar que ayer estaba haciendo un tremendo calor.

-sí, seguramente estamos a temperatura bajo cero.

-si estuviéramos a bajo cero, ya estaría nevando ¿no crees?

-no tarda en empezar a nevar. Será mejor que te pongas un abrigo o algo así.

Terminamos de arreglarnos y como Elaisa había dicho, comenzó a nevar. Yo moría por estar afuera. Nunca había visto la nieve así que moría de ganas por salir.

-debemos de irnos ya, tengo que ayudar a Tay con algunas cosas.

-si está bien vámonos.

Salimos del departamento y nos fuimos al de Tay.

-ya era hora de que llegarán, esas cosas de adornar no es lo mío – Tay nos abrió la puerta y saludo enseguida a Elaisa – a hola Elizabeth, que bueno que estés aquí. Vamos Elaisa no tenemos mucho tiempo.

Tay se veía extremadamente bien, ya se haba afeitado, se había bañado y vestido muy formal, tenía un pantalón de vestir y un abrigo, ya que hacía mucho frio tanto adentro como afuera. Su sonrisa resplandecía y su mente estaba ocupada en la fiesta de Rob

-si quieren puedo ayudar en algo – dije dejando mis cosas dentro de la bolsa de Elaisa.

-checa la música con Tay, no confío en su gusto por la música – comencé a reír y Tay también.

Tendrás que confiar, porque ya está en un disco, no puedes modificar nada.

-veo que tienes todo planeado – dije yo en signo de aprobación

-por supuesto, ahora si tengo todo planeado, no pienso estropearlo, dijo mirándome a los ojo.

-excelente – dije bajándola mirada.

Los invitados comenzaron a llegar, la mayoría eran puros varones, supuse que la lista de invitados la había hecho Elaisa, pues no había casi ninguna chica en mini falda que pudiera robarle la atención.

-¿quieres ir al cuarto ya? – Tay se acercó y me susurro.

-¿a qué te refieres? – dije yo riendo. Per a la vez molesta.

-me refiero a que si quieres ir a dejar tus cosas a mi cuarto, Elaisa me pidió por favor que te prestará mi cama para dormir.

-jaja claro – me sentí muy avergonzada, Tay solo quería ser bueno conmigo – se dónde está tu cuarto no es necesario que me acompañes.

-okay.

Tomé mis cosas de la bolsa de Elaisa y me dirigí al cuarto de Tay.

No pude evitar sentir una tristeza inmensa, su cuarto estaba igual a como lo recordaba, se percibía la fragancia de Tay que tantos escalofríos me producía. Cerré la puerta y me arrodillé. Sabía que si venía aquí lo único que me pasaría seria mezclar mis sentimientos. Dejé mis cosas en la mesita a lado de la cama de Tay. Cuando levanté la mirada mi corazón se paralizó. Me quedé sin aliento mis ojos se inundaron de lágrimas pero me las limpié al instante para ver con claridad lo que estaba frente a mí.

Recordaba perfectamente esos cuadros pegados en la pared. Recuerdo que estaba vacío la última vez en la que había esto allí. Pero ahora estaban llenos de fotos donde salíamos Tay y yo. En el Primer cuadro estaba una foto en blanco y negro, recordé ese día perfectamente. Fue el día en que llevaba puesta su ropa porque estamos pintado el departamento. Él me estaba abrazando por detrás y ambos teníamos una sonrisa, pero yo era la única que estaba viendo a la cámara pues Tay estaba viéndome sonreír.

En otro cuadro estaba una foto en la que no me había dado cuenta que Tay me estaba tomando una foto. Yo estaba con una sudadera suya viendo la película, la vez que nos quedamos encerrados. Esa foto estaba hermosa al igual que la que estaba junto, donde salimos Elaisa Rob, Tay y yo en el parque de la universidad. Ese día también lo recordaba. Todos nos veíamos tan felices. Pero la foto que estaba en el centro, era la más hermosa de todas, era más grande que las demás, era la foto que nos habían tomado en el baile de bienvenida. Los 2 nos veíamos muy bien juntos. Me veía feliz y si dudas. La última foto que vi estaba un poco oscura así que me acerque para ver. Estábamos en el mirador, de fondo se veía el coche de Tay y el cielo estrellado, yo estaba parada con la banda en los ojos y Tay estaba detrás de mi quitándola. Mi corazón deseaba volver a tener esa felicidad, pero ya era tarde. Tay me había olvidado y ahora era feliz, y yo tenía que hacer lo mismo, ya fuera con Tay o con Neithan.

Salí del cuarto, todos estaban platicando y riendo. Cada vez que tocaban la puerta todos pensaban que era Rob, pero cuando entraban solo los abucheaban.

La última vez vi entrar a Neithan por la puerta, mi corazón se alegró y se aceleró pero todos regresaron a platicar al ver que no era Rob. Miré de inmediato a Tay para ver si se le balanceaba encima y lo golpeaba. Pero lo único que pude ver, fue una lágrima caer de su ojo la cual cayó al instante al suelo.

Me sentí muy mal por los dos. Así que derramé igual una lagrima.

Tay me miró y se acercó a mí.

-he decidido ser tu amigo, he decidido dejarte ser feliz, a mi lado o a lado de él.

Ver los ojos de Tay tan cerca de mí nuevamente me comprobó lo que hace unos momentos había comprobado.

Abracé a Tay muy fuerte, no quería apartarme pero sabía que si me quedaba ahí lo arruinaría todo.

Fui hasta donde estaba Elaisa.

-Lo siento mucho pero tengo que salir, volveré más tarde.

-está bien querida.

-Salí corriendo del campus, paré un Taxi y pedí que solo siguiera derecho y que no parará el auto.

El chofer estuvo conduciendo por varias horas, hasta que se detuvo.

- lo siento mucho señorita, pero tengo que dejarla aquí, la nieve me está bloqueando la vista.

-sí, está bien muchas gracias – le pagué y me bajé del taxi. Me había dejado justo en la parada de autos de Westminster Underground Station. La calle estaba llena de luz, y más por el gran Big Ben. Hacia frio y mi mente estaba en paz, pues al fin sabia con quien quería estar.

Paré por un momento miré el resto de la calle y me sentí sola. Pero eso no duró mucho tiempo pues sentí su mano en mi hombro, percibí su perfume y mi corazón sabía que él estaba ahí. Me giré hacia él y lo mire. Ahí estaba. Estaba frente a mí.

-si no es contigo, no es con nadie Elizabeth. Ya te lo he dicho, me he enamorado de ti y yo sé que tu sientes lo mismo.

-tienes toda la razón, estoy enamorada de ti, no quería aceptarlo, pero es que cada vez que me miras a los ojos me doy cuenta de que desde el principio te amaba.

-no quiero separarme nunca de ti, quiero hacerte feliz, porque solo con tu felicidad mi corazón vuelve a latir.

-al fin mis pensamientos están en orden, y mi corazón no tiene ni la menor duda. Quiero estar contigo.

-Te amo, quizás no sea para tanto, pero es para siempre.

Y ahí estaba yo, en el momento que tanto había deseado y ambos esperábamos, a un costado del Big Ben, hacia frio, la nieve cubría el camino en el que íbamos, pero lo más importante era que estaba frente a él. Sus ojos me miraban directamente, su rostro era perfecto y sus labios estaban rojos por el frio.

Yo miraba hacia la nieve que pisábamos pues no podía creer lo que le había dicho. Levantó mi barbilla para que yo lo viera a los ojos pues sabía que esa era mi gran debilidad. Una de sus manos me tomó de la espalada y me acercó a él, y la otra acariciaba mi mejilla. Yo decidí rodear su cuello con mis brazos y me acerqué a él. Nuestras narices frías chocaron, juguetearon un poco, cerré los ojos, y lo hice. Lo besé. Sus labios eran cálidos y suaves, tal como los había imaginado. Me besó con ternura, sin ninguna prisa, pues sabía que teníamos la eternidad por delante.

Se separó de mí y me besó una vez más

-Te amo Elizabeth y jamás te hare daño– sonrió

-no pienso ir a ninguna parte, porque si estoy a tu lado mi corazón está totalmente feliz

-jamás me apartaré de tu lado

-ni yo del tuyo...

x

Okumaya devam et

Bunları da Beğeneceksin

7.3M 303K 38
~ AVAILABLE ON AMAZON: https://www.amazon.com/dp/164434193X ~ She hated riding the subway. It was cramped, smelled, and the seats were extremely unc...
527K 15.1K 53
what happened when the biggest mafia in the world hid his real identity and married an innocent, sweet girl?
96K 332 13
As the title says
43.9M 1.3M 37
"You are mine," He murmured across my skin. He inhaled my scent deeply and kissed the mark he gave me. I shuddered as he lightly nipped it. "Danny, y...