Me quede sorprendida por la forma en la que me llamo la niña, se separó de mí y me miro tiernamente
-Lux, ve a tu habitación a jugar con tus muñecas ahora soy ¿sí? – La niña asintió con la cabeza y empezó a subir las escaleras – Disculpa
-Descuida ¿pero quién es? – le pregunte
-Mi hija – Harry era ¿papá? Eso no me lo esperaba
-Es muy linda, pero ¿Por qué me llamo mamá? – dije mirándolo y notando su nerviosismo
-Su mamá nunca la quiso, cuando nació me la dio a mí, un mes después falleció en un accidente, y ella piensa que tal vez tu eres su mama porque estás aquí – me dijo bajando su cabeza
-Lo siento – salieron esas palabras de mis labios – Yo tengo que irme, aunque no quiera – dije lo último y reí
-Si quieres puedes quedarte aquí, Lux y tú se llevarían bien – hablo mirando hacia un costado
-Tengo que volver a casa y enfrentar a mis padres – le respondí
-Te propongo algo – hablo y lo mire dudosa - ¿Te gustaría vivir conmigo? Yo puedo pagar tus estudios, además Lux estaría contigo ¿Qué dices? – paren el mundo, él pidiéndome vivir en su casa, con su hija
-No lo sé – respondí con miedo
-Tienes 19 puedes hacer lo que quieras – me dijo él
(…)
Les deje una carta a mis padres y hice mis maletas para mudarme con Harry, tal vez era lo mejor que podría hacer, alejarme de ellos y de todo lo que pase en “mi familia”
Al llegar a la casa de Harry junto a Lux, me dio la misma habitación de ayer y empecé a desempacar y acomodar todo mientras Lux jugaba en mi cama con sus muñecas. Se sentí raro que te llamara “mami” pero era tan hermoso a la vez