Narra _____
Luego de mi escapatoria del casi beso con Vegetta, busque a Sandra entre la multitud de personas que gritaban, bailaban y a veces sin darse cuenta empujaban. No la encontré así que fui al baño a lavarme la cara y tranquilizarme un poco, ya que además de tener a los unicornios supersónicos corriendo en mí estomago, mi corazón latía a mil por hora. Entre al baño y lo primero que vi fue a Sandra mirándose en el espejo mientras delineaba sus ojos.
-Hola- Dijo y volteo a verme.
-Hola- Me puse junto a ella y comencé a lavarme la cara.
-¿Te presto maquillaje? No creo que te quede si te lavas la cara- Me ofreció.
-Emm, claro, gracias- Dije sonriendo.
-Pero te pinto yo, así que ven- Empezó a pintarme los párpados.
-¿Por qué tu y Willy están aquí en vez de pasar San Valentín solos? ¡AAUUU!- Me queje, porque ella "sin querer" me toco el ojo con el delineador.
-Perdón. Es que... no sé, realmente no sé, pero me la estoy pasando bien- Sonrió.
-Ahora mírate ¿Te gusta?-
Me mire al espejo y sonreí, parecía otra, aunque estuviera llena de maquillaje (algo que no me gusta mucho) estaba bonita. Tenía los ojos delineados y de color morado los parpados, no sé bien como decirle pero creo que estaban esfumados o algo así, también tenía los labios pintados con un rosa delicado y ya.
Salimos juntas del baño y con el primero que me encontré, más bien me choque fue con Vegetta.
-Uy, lo siento. _____ eras tu- Se quedo mirando mis ojos, por lo que no pude evitar soltar una risita.
-Lo-Lo siento- Volteo a mirar a otro lado. –Es que te quedan muy lindos de morado- Dijo sonriendo.
-Me siento como un Enderman-
-Puede ser, con los ojos morados no puedo evitar verlos y a ti tampoco, aunque en ti no es necesario que tengas ojos morados para que te quiera mirar- Grrr ¿Por qué dice eso? No pude evitar quedar como un tomate, así que simplemente mire el piso.
-Yo me voy, me busca Guille y así os dejo solos, chau- Dijo Sandra acercándose a mi oído, luego desapareció entre la multitud.
No duro mucho el estar solos, ya que de la nada aparecieron Alex, Mangel y Cheeto, luego Willy y Sandra volvieron, aunque no me quejo, ya que me sacaron de aquel momento incomodo.
Luego de brindar por los solteros nos fuimos, yo me fui sola, pero no falto Vegetta, quien se ofreció a acompañarme, al igual que Alex, pero de todos modos les dije que no hacía falta y me fui sola.
Llegue a mi casa, entre con la llave que tenia y lo primero que hice fue cambiarme, me metí en la cama y tapada hasta la cabeza cogí mi móvil y empecé a mirar las fotos que había sacado en el bar: Algunas eran Sandra y yo, en las que solo se veían nuestras caras sonriendo o haciendo tonterías, tenía alguna parecida con Vegetta y otra con Cheeto, habían otras que fueron tomadas por alguna persona al azar que nos saco en grupo, todos juntos haciendo muecas o sonriendo. Me encantaba tener fotos en las que estaba con amigos, tenía amigos, ya no era la antisocial de antes y no lo seria nunca más.
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Me desperté por los golpes de la puerta, me levante, salí de mi cuarto y observe la sala de estar, el cuarto de mis padres y el de mi hermana, mis padres trabajaban y mi hermana dormía. Fui hasta la puerta de la que aun no cesaban los golpes, abrí y vi a Fiorella del otro lado, con dos muletas y el ceño fruncido.
-¡Te mande un montón de mensajes y hace casi media hora que estoy tocando la puerta!- Entro mientras rezongaba.
-Lo siento, no me di cuenta, estaba cansada, perdón- Le dije a Fiorella mientras me frotaba los ojos.
-Vale, vale, tienes que estar más atenta con tu móvil, si era algo importante, me podía morir y tu durmiendo- Dijo sentándose en el sofá.
-Claro... yo me preocuparía más por la persona que te haga algo que por ti, eres muy bruta ¿Sabes?- Dije mientras peinaba mi cabello enredado.
-Anda, calla que sabes que soy la mejor amiga del mundo-
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Eran las tres o cuatro de la tarde, Vegetta me había invitado a su casa, para jugar al TTT o Garry's Mod, con StaXx, Alex y Luzu.
Fiorella dijo que no había problema, y que fuera tranquila, mis padres se quedaron con mi hermana, así que me fui.
Acababa de llegar a lo de Vegetta, estaba sentada frente a su ordenador y él a mi lado, configurando todo y contactando con los chicos por Skype.
Al rato le sonó el móvil y se levantó para atender, como los chicos hablaban de sus cosas ya me empezaba a sentir un poco rara, así que fui hasta afuera de la habitación donde estaba Vegetta hablando y pegue la oreja al otro lado del móvil para escuchar de que hablaba. Era Willy y al parecer no vendría a jugar con nosotros, porque aparte de jugar conmigo, grabarían algo para subir luego.
Después de meterme en la conversación y que saliera el tema del casi beso entre ellos y hacerme la que no escuchaba nada, volvimos a sentarnos frente al ordenador.
-Oye Vegettoide, nunca me presentaste a tu nov.... amiga, a tu amiga- Dijo Luzu, el no había estado en la quedada, ya que estaba en Los Ángeles y en la fiesta de San Valentín obviamente estaba con Lana, así que no me había conocido.
-Calla chaval, es ______- Respondió Vegetta.
Al rato ya estábamos jugando los cinco, Vegetta y yo nos turnábamos, aunque prefería mirar y reírme que ponerme nerviosa, ya que con los juegos estilo Shooters no soy muy buena, siquiera soy buena.
-Chicos, y chica- Dijo Alex refiriéndose a mí. -Unos amigos se van a unir a la partida y a la llamada, tranquilos que todos los conocen- Continuo.
Al rato apareció Mangel en una esquina de la llamada y en la otra Rubius con... Fiorella!
-¡¡_____/Fiore!!- Dijimos al unísono.
Era más divertido con mi amiga, muchas veces decíamos cosas que solo una amiga puede entender, incluyendo indirectas.
Alguna que otra vez ayudábamos a los chicos de nuestro lado a encontrar a alguno de los otros.
-Pero Rubius, que está ahí arriba- Le decía Fiorella.
-Pero arriba esta el techo, coño- Le replicaba él.
-Pues has de cuenta que no hay techo, está metido en una esquina que casi no se ve- Dijo ella.
Se escucho un silencio de parte de Rubius y el sonido de la silla como si se parara.
-¡¡No tenemos techo, Mangel, no tenemos techoo!!- Se le escuchaba gritar.
Solo reíamos por las bobadas de Rubius.
-Pero Mangel está aquí, joder Rubius no te pongas idiota- Se escuchaba a Fiorella rezongar, que al parecer también se había levantado de la silla y había ido tras Rubius quien ya no estaba en su habitación.
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Ya en Abril
Estaba con Fiorella, recién nos habíamos despertado y aun teníamos cara de zombi con resaca (aunque no habíamos bebido). Mientras una se peinaba, la otra se lavaba los dientes, luego cambiábamos, desayunamos y ya, el día no parecía ofrecer nada interesante, así que nos pusimos a jugar con la XBox. Todo eran gritos y enojos por parte nuestra hacia los otros personajes, hasta que mi móvil sonó, fui a mi cuarto y lo cogí; era un mensaje de Vegetta.
Vegetta:*Hola Guapísima, ¿Que tal el principio de la semanita ^^?*
_______:*Bien de bien, salvo por mi hermana que esta de mal humor por tener que ir a clase -.-' y tú?*
Vegetta:*Bien. Oye quería preguntarte si querías venir a mi casa, o ir a hacer algo.*
_______:*Si quieren ven tú, Fiorella saldrá con Rubius y no me quiero quedar sola*
Vegetta:*Okii en un rato voy, beso*
________:*Beso, chau.*
Ahora tendría que lograr hacer que Fiorella saliera con Rubius o con cualquier otra persona.
-Fiorella necesito que te vayas- Dije enseguida.
-Que mala persona, no me eches- Se quejo.
-Necesito que te vayas, sal con Rubius o algo- Le pedí.
-Primero: No me animo a decirle ni hola y tu quieres que le diga de ir a algún lado. Y segunda: ¿por qué quieres que me vaya?- Pregunto.
-Porque viene Vegetta- Fui hasta su cuarto, cogí su móvil y le mande un mensaje a Rubius.
-Rubius te espera en su casa, ya te puedes ir- Dije mostrándole su móvil y el mensaje de Rubius.
-Okay, pero que conste que lo hago porque te quiero- Dijo mientras buscaba su bolso.
-Si, Si, también te quiero, chau- La empuje por la puerta.
Mire hacia afuera mientras se alejaba, vi que se cruzo con Vegetta, lo saludo y él siguió su camino hacia aquí.
Corrí hasta el baño, delinee mis ojos y me puse rímel, saque un brillo labial justo cuando golpeaba la puerta, así que fui hasta la puerta mientras me pintaba los labios y al abrir tire el brillo sobre el sofá.
-Hola- Lo salude sonriente.
-Hola, permiso- Dijo al pasar.
-¿Que hacemos?- Le pregunte, a lo que respondió con una risita.
-No le busques el doble sentido a las cosas- Lo mire seria, aunque por dentro me moría de risa.
-¿Yo? ¿Buscarle doble sentido a las cosas? Jamás- Dijo irónicamente.
-Que va, si eres un mal pensado-
-Puede ser, pero así soy- Me dijo.
-Y así me encantas- Susurre, no sé porque.
-¿Que?- Pregunto.
-¡Nada!- Respondí coloradísima, me di vuelta y empecé a buscar entre los juegos de XBox y elegí el GTA V.
Nos pusimos a jugar y estuvimos bastante tiempo, en realidad era la primera vez que iba Vegetta a mi casa, pero ya había logrado entretenernos en algo.
-¡Hala, que le den!- Tire el mando sobre el sofá y me levante.
-Espera- Me dijo Vegetta, me agarro la mano y cincho, caí sobre él al igual que la vez que fui a su casa.
Otra vez pasaba lo mismo, nos quedamos mirándonos, sin saber qué hacer, pero esta vez, Vegetta dijo algo más serio que sobre la tecla Esc.
-¿Te acuerdas cuando nos paso esto?- Me pregunto.
-Sip- Dije con una sonrisa.
-Pues, después de eso no pude dejar de pensar en algo- Continuo.
-¿En qué? Si se puede saber- Pregunte.
-Que no pude hacer esto...-
Puso sus manos sobre mis mejillas y acerco nuestros labios hasta fundirse en un beso apasionado y con ganas de parte de ambos. Él paso sus manos de mis mejillas a mi espalda, mientras yo seguía con mis antebrazos sobre su pecho y mis manos en sus mejillas. En ningún momento nos separábamos, más que para recuperar el aire, pero de la nada comenzó a sonar mi móvil y no era un mensaje, sino una llamada, así que con pocas ganas me separe de él y fui hasta mi cuarto y atendí, era Fiorella.
-Hola Fiore, ¿Que pasa?- Pregunte.
-Nada importante, solo para avisarte que voy en camino para ahí- Respondió.
-¿Y?- No entendía porque me decía eso.
-Y que estás sola con Vegetta y sé que jamás han hecho nada, ni son nada, pero no quiero entrar y encontrármelos haciendo cualquier cosa-
-Hiciste bien en avisarme, entonces-
-¡¿Ehh?!-
-Nada, chau- Me despedí y corte.
Volví con Vegetta quien me esperaba sentado en el sofá, me vio y se levanto.
-Oye Guapísima, me tengo que ir- Me iba a saludar, pero dudo en cómo hacerlo, aunque me dio dos besos en la mejilla y se fue, yo cerré la puerta tras él y apoye mi espalda en la misma soltando un gran suspiro.
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¡¡Holuuuu! ¿Como están? Tanto tiempo sin subir cap.
Bueno perdón por las faltas, es que escribo desde mi celu y de verdad, admiro a las que suben siempre desde el cel.
¿Ustedes sabían que la tecnología me odia? La PC de mis padres también se rompió TnT, así que solo tengo el celu para subir, voy hacer lo que puedo pero de verdad siento mucho no poder subir más seguido.
Muchas gracias por todo, si votan y comentan se agradece y nos leemos en el siguiente cap. Besos (^3^)