Entre la Tinta

De BooksByFabs

370K 21.9K 2.1K

Kylie Hills no cree en el amor, al menos se ha prometido no volver a creer en él, no luego del que creyó el c... Mais

PREFACIO
Advertencias
Capítulo 1
Capítulo 2
Capítulo 3
Capítulo 4
Capítulo 5
Capítulo 6
Capítulo 7
Capítulo 8
Capítulo 9
Capítulo 10
Capítulo 11
Capítulo 12
Capítulo 13
Capítulo 14
Capítulo 15
Capítulo 16
Capítulo 17
Capítulo 18
Capítulo 19
Capítulo 20
Capítulo 21
Capítulo 22
Capítulo 23
Capítulo 24
Capítulo 25
Capítulo 26
Capítulo 27
Capítulo 28
Capítulo 29
Capítulo 30
Capítulo 31
Capítulo 32
Capítulo 33
Capítulo 34
Capítulo 35
Capítulo 36
Capítulo 37
Capítulo 39
Capítulo 40
Capítulo 41
Capítulo 42
Capítulo 43
Capítulo 44
Capítulo 45
Capítulo Final
Epílogo
Agradecimientos
Portada

Capítulo 38

6.5K 433 53
De BooksByFabs

Capítulo 38 | "Reuniones y mantequilla de maní"

Maratón 2/4

Kylie Hills

— Vamos — me alienta Axel, totalmente lleno de pintura.

— No puedo.

— Sí puedes.

Estoy frente a un lienzo en blanco, la pintura escurre de mi cuerpo, mi novio, también cubierto de pintura, sonríe tranquilizadoramente.

Ha comprado toda esta pintura, me ha estado animando estas últimas dos horas para que pinte algo, así que en última instancia para distraerme, decidió comenzar una lucha de pintura estúpida, así que ahora ambos estamos cubiertos de pintura, aunque el lienzo en blanco sigue perfectamente limpio.

Noah también es un desastre de pintura en los brazos de Axel.

— Le daré una ducha a Noah, luego volveré por aquí — me explica, dejando un beso sobre mis labios — Si no pintas nada, está bien, lo intentaremos mañana, y todos los días que necesites.

Asiento, dejando que salga de la habitación con mi hijo, pero se voltea de nuevo antes de irse.

— Pero inténtalo, ¿vale? — sus ojos bicolor se posan sobre mí — No sabrás si realmente no puedes hacerlo si no lo intentas.

Volteo de nuevo a mirar el lienzo, el pincel en mis manos tiembla ligeramente y siento que el aire se me escapa. Me asfixio, el olor a pintura parece hacerse el triple de fuerte porque lo siento en todas partes.

Las palabras de Craig cuando me gritaba lo inútil que era para esto retumban en mi cabeza hasta que intento sacudirme de ellas y, sorprendentemente, otras palabras son las que comienzan a reemplazarlas.

Las palabras de aliento de Axel, de cómo ha estado intentando que vuelva a pintar, de todas las veces que ha halagado mis dibujos, de cómo he descubierto que tiene un cajón de su escritorio en el salón de tatuajes lleno de todos los dibujos que me roba. De cómo discute conmigo en broma cada vez que hago que algún dibujo parezca sencillo aún cuando a él le tomó bastante trabajo.

Recuerdo a Hunter, de cómo en su estudio tiene enmarcado un dibujo que realicé de él la última vez que fuimos a la playa, es él, surfeando. Pero no lo enmarcó por eso, lo enmarcó porque yo lo hice.

Recuerdo a Aria, quien siempre me pide que le ayude con sus bocetos, y no porque ella no pueda hacerlo, sino porque le encantan mis dibujos.

Recuerdo al tío Grayson, quien pega mis dibujos en su refrigerador como si aún fuera una niña.

Y el pincel en mis manos se mueve solo.

No pienso en dibujar algo en específico, mis manos tienen vida propia mientras se mueven sobre el lienzo, mientras mi corazón se desborda en toda la pintura que desplazan mis trazos. Mis emociones se plasman en el lienzo como si fueran la manera en la que gritan por mí, en la que se plasman con fuerza para que todos logren comprenderlas.

Siento las lágrimas desplazarse silenciosas por mi rostro, pero no me atrevo a limpiarlas, me permito eso, me permito sentir, sentir con fuerza a través de la pintura.

No sé cuánto tiempo pasa, no sé cuánto tiempo lleva Axel aquí, que me chequea de vez en cuando porque escucho sus pasos, es él quien enciende la luz de la habitación cuando el sol que ingresa por las ventanas desaparece.

Suelto un chillido ahogado cuando la pintura frente a mi toma forma, el pincel cae al suelo al igual que la tabla con pintura de mi otra mano. Retrocedo como si el mismo lienzo irradiara un calor insoportable.

— Está bien, estás bien — unos brazos llenos de tinta me envuelven contra su cuerpo, sin importarle que vuelva a llenarlo de pintura.

Lloro, me quiebro, y él me sostiene, me sostiene entre sus brazos y me deja recomponerme, me deja tomarme el tiempo en juntar cada una de mis piezas, limpia mis lágrimas con un tacto tan suave, besa mi rostro, eliminando todo el rastro de ellas con sus labios.

No sé cuánto tiempo estamos en el suelo, conmigo entre sus brazos, pero él nunca se queja, me deja llorar y recomponerme.

— No sé lo que pienses tú, pero yo definitivamente conservaré esa pintura.

Eso consigue hacerme reír en medio de lágrimas y finalmente vuelvo a mirar la pintura, ese lienzo que acaba de tomar la forma de algo más, de un recuerdo.

Del recuerdo más feliz que mi mente pudo evocar.

Soy yo, pero de hace un par de años, traigo un short diminuto y mi camisa está elevada, dejando que se vea mi vientre de embarazada, de cuando estaba en cinta por Noah, mis manos están sobre mi vientre, recuerdo ese día, cuando Noah me pateó por última vez, antes de que tuviéramos que ir al hospital porque ya iba a nacer.

Mi rostro en la pintura no le hace justicia a la felicidad que sentí ese día, de que por fin iba a conocerlo, iba a conocer a mi bebé.

Es una foto real, que tengo grabada en mi memoria y ahora está en esta versión de pintura, es idéntica a la foto original, pero es más, porque es mi primera pintura luego de tanto tiempo.

— Te veías preciosa embarazada — Axel deja un reguero de besos por mi rostro — Tienes que dejarme conservar esta pintura.

— ¿Y dónde se supone que la pondrías?

— En nuestra habitación, obviamente.

Sonrío mientras me ayuda a incorporarme y ambos recogemos todo el desastre de pintura que hay aquí, sin importarnos que sean altas horas de la madrugada.

֎

— ¿Entonces qué se supone que haga? — se queja Cody.

— Podrías intentar... —trata Axel, pero su hermano lo corta.

— Cállate, no te pregunté a ti, le pregunté a mi sobrino.

Noah se encuentra sobre el estómago de un Cody completamente acostado en nuestro sofá, mi hijo tiene el ceño fruncido mientras mira a quien se ha proclamado su tío.

— Tía Tiff — es lo único que dice mi hijo.

—¡Lo sé! — chilla Cody — Sabía que todo era su culpa, gracias, chico bestia.

Noah se ríe cuando Cody lo abraza con fuerza a su pecho, Axel voltea los ojos con frustración mientras toma un trago de su cerveza y yo me río de ambos mientras como otro trozo de pizza, sentada sobre las piernas de mi novio.

Al parecer Cody ha tenido un par de problemas con Tiffany, han estado saliendo en algunas citas, pero la personalidad de ambos es totalmente explosiva para no chocar entre sí, sin embargo, ambos son demasiado orgullosos para admitirlo.

Aún así, esta es la tercer pelea que tienen, y siempre logran solucionarlo, por lo que ni Axel ni yo nos preocupamos mucho, eso no quiere decir que Cody no venga a nuestro apartamento a quejarse de Tiffany con mi hijo, y Noah disfruta el drama que hace su tío.

— Ambos son unos imbéciles — refuta Hunter desde el otro sofá, con Aria sobre sus piernas.

— No hables así frente al niño — lo chista el tío Grayson, en un sofá a la distancia viéndonos a todos con el ceño fruncido.

— Según lo que yo entiendo, no están siendo menos imbéciles que lo que fueron ustedes dos — se burla Erick, en otro sofá con Hope sobre sus piernas — Hope me contó lo idiotas que fueron Aria y tú.

Hunter y Aria se indignan aún más, lo que me hace reír.

— Sigue sin ser mi culpa, la culpa es suya —gruñe Tiffany, pero Cody vuelve a ignorarla manteniendo su atención en mi hijo.

Obviamente no íbamos a excluir a Tiffany de nuestras reuniones sólo porque discuta estúpidamente con Cody, y la verdad es que a todos nos divierte verlos pelear entre sí.

— Noah, pregúntale a tu tía Tiffany, ¿por qué demonios sería mi culpa esta discusión? — se queja Cody.

Noah voltea a ver a Tiffany, como si realmente le cuestionara por qué está molesta con su tío.

— ¡Eres un idiota! — se queja la morena, tomando otro trozo de pizza e ignorando la mirada de reproche del tío Gray por el vocabulario — Te dije que odio la mantequilla de maní.

— ¡Lo olvidé! — se queja Cody.

— Me regalaste miles de chocolates con mantequilla de maní — se queja de vuelta.

Es la pelea más estúpida que he visto, pero nos entretiene a todos.

— Siempre podías comerlos, ser solidaria conmigo — se vuelve a quejar el pelinegro — No desperdiciar los chocolates.

— Se los regalé a Noah — sonríe Tiff.

Cody voltea a mirar a mi hijo con indignación aunque él ya se ha distraído de él y sus problemas, ahora intenta que Hunter lo cargue en brazos sólo a él y no a Aria, lo que hace reír a ambos rubios.

— Es un traidor — se queja.

Bromeamos de nuevo y horas después parece que Cody y Tiffany resuelven su pequeño y absurdo problema.

Axel y yo estamos terminando de recoger el salón luego de que todos finalmente se marcharan, mi novio termina de llevar las botellas vacías de cerveza a la basura y yo termino de lavar los platos.

— Mami.

Volteo hacia Noah mientras termino de secar mis manos, mi niño se restriega sus ojos con sueño.

— ¿Quieres dormir ya, Noah?

Asiente mientras extiende sus brazos, por lo que me acerco hacia él con la intención de cargarlo, pero niega.

— No.

— ¿No? — pregunto, mi hijo niega con la cabeza.

— Papá.

Me tenso mientras suelto un suspiro frustrado.

— Noah, ya hablamos de esto... — me quejo intentando tomarlo, pero sus ojos verdes idénticos a los míos pasan de mí hacia Axel, extiende sus brazos hacia él y las siguientes palabras que salen de su boca me petrifican.

— Papá Axl.

El mundo parece dejar de girar, todo se detiene. Puedo sentir como Axel se petrifica tras de mí, mis ojos se cristalizan mientras mis manos comienzan a temblar.

— No, Noah, él es... —intento.

— Papá Axl.

— Noah.

— ¡Papá Axl!

— ¡No!

Mi hijo abre sus ojitos cuando elevo la voz y rompe a llorar, yo también tengo ganas de llorar, no sé qué hacer, no sé qué decirle.

Axel parece ser el primero en reaccionar por lo que camina hacia mi hijo y lo toma entre sus brazos intentando calmarlo.

— Iré a acostarlo, ¿de acuerdo? — pregunta, pero no soy capaz de mirarlo a los ojos — Tesoro, ¿de acuerdo?

Asiento ligeramente mientras desaparezco de la cocina, siento que me asfixio, el departamento se me hace pequeño y me veo caminando hacia el balcón. No me importa siquiera que hoy haga bastante frío, simplemente salgo al balcón y me siento en uno de los pequeños sofás que tenemos aquí, con mis manos cubriendo mi rostro.

Lo suponía, previa que esto podría pasar, y ahora no sé cómo enfrentarlo.

Tesoro — escucho su voz antes de sentirlo, se sienta justo a mi lado — Mírame, vamos.

— Lo siento — me quiebro.

— Kylie.

— Lo siento mucho — no controlo mis sollozos y él maldice mientras me atrae hacia sus brazos, escondo mi cabeza en su torso mientras lloro.

Me deja llorar, me deja desahogarme hasta que ya no tengo más lágrimas, me aparto y es él quien, como siempre, se encarga de limpiar mis lágrimas.

— Dime qué pasa — implora — ¿Es por lo que dijo Noah? Porque no estoy molesto por eso. Sólo me sorprendió un poco, pero sé que eso que dijo él no provino de ti, Kylie.

— ¿Ah no? — me quejo, siempre parece prever lo que pienso.

— Ky, por Dios — frunce el ceño entre molesto y divertido — Sé que jamás harías que tu propio hijo me llamara así, que Noah lo haya hecho ha provenido sólo de él, tu no metiste esa idea en su cabeza.

» También sé que es muy probable que Noah lo haya hecho porque estos días hemos estado teniendo una dinámica de familia que pudo confundirlo, después de todo, sólo es un niño. Ya habíamos hablado de que Noah estaba haciendo preguntas sobre su padre desde que ingresó a la guardería, y ahora que manejamos esta dinámica entre nosotros es algo que podía pasar.

— ¿Por qué no estás malditamente asustado? — me quejo mirándolo, pero sólo sonríe.

— Porque no me asusta — me atrae a su cuerpo — No me asusta que Noah me llame de esa manera.

— Axel — me quejo apartándome ligeramente para mirarlo — Esto es serio, Noah te está... te está viendo de esa manera.

— ¿Y es un problema para ti? — no hay reproche en su voz, sólo quiere saber lo que pienso — No me molestaré sea cual sea tu respuesta, Ky.

— No lo sé —me quejo — No me molesta, creo. Pero me asusta, me acojona demasiado.

— ¿Y si me lo explicas para que pueda entenderte?

Dios mío, no merezco a este hombre.

— Te quiero, ¿vale? — me giro en sus brazos para mirarlo fijo — No, ni siquiera eso, te amo, de verdad lo hago — sus ojos bicolores brillan con miles de emociones.

» Pero esto son ligas mayores, tengo un hijo, Axel, que te está viendo cómo su figura paterna y eso me tiene muerta de miedo. Porque todo puede pasar, y pese a que mi corazón podría romperse si algún día tu y yo no funcionamos lo único que puedo pensar es ¿qué pasaría con Noah? No puedo pensar que él realmente cree un vínculo contigo de esa manera y que luego lo que pase entre nosotros le afecte, es sólo un niño.

» Te amo con locura, pero apenas venimos iniciando y no sé si estamos corriendo en lugar de caminar, no quiero que Noah se confunda, no quiero que tomes un papel que no quieres en su vida, no quiero...

Me acalla, sus labios se posan sobre los míos.

— Es mi turno, ¿estás lista para lo que tengo que decirte?

Sus ojos son un pozo de sinceridad que me hace tragar saliva con fuerza, pero asiento.

Quiero, no, necesito escucharlo.

Preciosos.

La verdad este capítulo es uno de mis favoritos.

Todas necesitamos un Axel en nuestra vida.

No se olviden de votar.

֎BooksbyFabs֎

Continue lendo

Você também vai gostar

1.1K 77 20
Una escritora obsesionada con el mafioso más buscado de todo Estados Unidos, ¿que puedo salir mal?
21.9K 1.6K 8
، ✧ ࣪ todos tenemos una persona que nos cuida aunque no nos demos cuenta. ─𝖺 𝗃𝖺𝗒 𝗉𝖺𝗋𝗄 𝖿𝖺𝗇𝖿𝗂𝖼. 🏴‍☠️ ִֶָ ࣪ 𖦆 ©mo...
925K 56K 44
Paris Smith siempre ha sido una chica soñadora, talentosa, amante de todo lo que tuviera que ver con la astronomía: las estrellas, los planetas, las...
29.2K 1.7K 26
Lauren Jauregui es la única hija de un importante magnate hotelero por lo que ella siempre ha tenido todo creyéndose la dueña del mundo pero su padr...