Las últimas palabras brotadas de la boca de la chica no ayudaron a evitar que un par de lágrimas empáticas se desprendieran de los oscuros ojos del joven oficial, lo que también causó que éste inevitablemente se inclinara a brindarle un cálido abrazo. Le hizo entender que no se encontraba sola de ningún modo, que él estaba ahí para ella y que no pensaba alejarse.
—Jungkook...
El corazón de Blue se sintió débil; por supuesto que sí, acababa de exprimir lo más profundo de su historia, su pasado y dolor... a un joven que a penas conocía de hacía menos de un mes. Pero pese a lo último, se sentía tranquila y segura, ya que sentía que Jeon Jungkook era una de las pocas personas en las que podía confiar estando en la situación en la que se encontraba.
—Debió ser muy duro para ti, pero no te preocupes...— se separó un poco para mirarle a los ojos. —Yo te ayudaré a recuperar a Taehyung.
Esa frase volvió a mover el frágil corazón de Blue y como respuesta sus sentimientos suprimidos sucumbieron acabando por manifestarse en un mar de lágrimas y un sonoro llanto, los cuales fueron reconfortados con los brazos del chico.
Por primera vez se sintió comprendida y estaba muy feliz.
...
A penas abrió los ojos y los cerró de inmediato debido a la claridad que entraba por la ventana de su habitación, la cual no era tan fuerte, sólo que su vista estaba debilitada por todo el alcohol que consumió la noche anterior.
Se sentó en el borde de la cama, con el cabello revuelto y los ojos hinchados, sintió también un pequeño dolor de cabeza debido a la resaca.
Luego de ducharse y recalcular todo lo que hizo cuando estuvo en estado de ebriedad, se sintió muy avergonzado. Pero pese a ello fue a la habitación de Blue.
No la encontró allí, entonces bajó a la cocina. Y en vez de oír aquella tranquila y dulce voz de la chica que buscaba, oyó la chillona e insoportable voz de Jihee.
Había olvidado que esa mujer se estaba quedando en su casa.
Antes de entrar a la cocina, las palabras de la mujer hicieron que se detuviera a oír bien de lo que hablaba por teléfono.
—Se supone que debo seducir a éste tipo loco y luego casarme con él. Pero no veo resultados mamá, él me ignora. Ya intenté de todo...
No hizo falta que él oyera nada más, después de todo ya lo sospechaba desde el principio. Hoseok se dejó ver y en cuanto Jihee lo vió, sus ojos se abrieron como nunca y no supo que decir.
—Ya oí suficiente. Será mejor que vayas empacando tus cosas.
—¡Espera! Puedo explicarlo, Seokiee.— chilló como una tonta, intentando alcanzarlo.
El chico volteó un poco su rostro.
—¿Has visto a Blue?
Jihee hizo una mueca y mientras miraba sus uñas escupió: —Esa perra no aparece desde ayer. Debe estar con su otro novio.
Y eso fue la gota que colmó a Hoseok.
—Tienes hasta la noche para recoger tus cosas y largarte.- respiró un poco, y salió por la puerta.
La mujer hizo una cara de indignada.
—Si tu padre se entera-
—Me importa una mierda mi padre.— interrumpió. —Así como él te puso en mi responsabilidad sin pedirme permiso, yo te expulsaré sin su consentimiento también.— refutó saliendo del lugar y dejando a la mujer boquiabierta.
...
—Ya te he dicho que no sé nada de ella. El último mensaje que me envió fue ayer por la tarde.— explicó la mujer ya exhausta debido a la insistencia de su hermano por saber el paradero de Blue.
Hoseok rascó con vehemencia su nuca y exhaló.
—¿Pero dónde se habrá metido esa mocosa? Le dije mil veces que me avise sobre todos los lugares a donde va.— refunfuñaba mientras miraba por enésima vez la pantalla de su celular, con la esperanza de que apareciera alguna señal de la chica.
Jiwoo respiró, dejó de escribir en el computador de su oficina e hincó la mirada en Hoseok el cual la estuvo interrogando hace ya rato.
—Hoseok...— pegó su puño a la mesa demostrando su seriedad. —Ella es una mujer y tiene sus propios asuntos. No porque no te haya avisado hacia dónde iba deberías de estar haciendo este escándalo.— ahora le lanzó una mirada examinante, la cual hasta él mismo sintió que lo atravesaba. —¿Acaso estás interesado en Blue?
El chico se congeló al instante de oír aquello y como acto de reflejo negó rápidamente y carraspeó, intentando disimular su nerviosismo por el tema tocado.
—Deja de decir tonterías.— se cruzó de brazos y miró hacia otro lado. -Sólo quiero saber qué está haciendo esa tonta, no vaya a ser que se meta en líos y que luego yo tenga que hacerme responsable...
—Te gusta, ¿verdad?— habló sin ninguna pisca de gracia en su tono.
—¡Eso no es cierto!— enseguida saltó a la defensiva.
Jiwoo dejó escapar una risita incrédula.
—Siendote sincera, en algún momento pensé que esto podría ocurrir pero decidí ignorarlo.- ella suspiró y se levantó de su asiento. —O tal vez no lo ignoré y traté de solucionarlo.
Hoseok miraba desorientado, sin comprender el repentino comportamiento de su hermana.
—Sabes... No quisiera arruinar los planes de papá pero como veo que de todas formas no funcionará te lo diré.— se acercó a él y lo sujetó de ambos hombros. —Tuve miedo de que te empieces a interesar por Blue, quien no se quedará por mucho en la ciudad... y por eso decidimos presentarte a Jihee.
Hoseok no se notó sorprendido ya que desde un principio lo vio venir.
Sonrió con sorna sin molestarse en mirar a su hermana a los ojos.
—Eso ya lo sospechaba.— hizo una mueca mirándola. —Pero no te preocupes, ya me encargué y Jihee se largará mañana.— escupió con desdén.
La hermana del chico abrió con sorpresa los ojos, con miedo a saber lo que Hoseok hizo con la susodicha.
—¿Qué le has dicho? Recuerda que ella es importante para el negocio famili- la interrumpió.
—Ya me encargaré de eso luego.— se dio la vuelta y caminó hacia la salida pero antes de abrir la puerta dijo: —De todas formas no quiero a alguien como ella en nuestra compañía.— volteó un poco para mirarla a los ojos.— Así que por favor no intenten meterse en mi vida sin mi permiso, soy bastante mayor para decidir por mí mismo.
Y salió del lugar dejando perpleja a su hermana.
...
—¿Entonces me dices que intentarás hablar con Taehyung para convencerlo de que deje de seguir esas órdenes?— Jungkook no se notaba muy conforme con la idea de Blue para solucionar el problema, no después de que casi los matara a ambos. —¿Estás segura de eso? ¿No será mejor que vaya contigo? Es que...
—Es mejor que lo enfrente sola, lo siento.— interrumpió la chica quien se estaba colocando los zapatos, preparada para salir.
—¿Vas a ir ahora?— la miró aturdido.
Ella sonrió intentando calmarlo.
—No. Primero debo volver a la casa de Hoseok. Él debe estar muy preocupado ya que he estado fuera toda la noche. —Luego intentaré solucionar lo otro.
...
El joven se encontraba sentado en el sillón de la sala, mirando a la pantalla de la televisión sin prestarle ni un poco de atención ya que su mente sólo se encontraba pensando en Blue y su paradero. Se preguntaba si había pasado la noche con ese policía papanatas, lo cual era muy seguro y de alguna forma le hacía hervir la sangre. O también pensaba en la probabilidad de que se encuentre en una mala situación, lo cual lo asustaba. Siendo sincero prefería que ella estuviera con Jungkook a que esté en peligro, aunque eso lo enojase.
El sonido de la puerta abriéndose lo sacó de sus pensamientos. Se levantó de sopetón y fue directo a ver si era ella.
Y sí, lo era.
En su mente estaba muy feliz de que ella haya vuelto auque fuese una tontería ya que sólo se ausentó medio día. Pero su rostro demostró lo contrario por su orgullo.
—¿Dónde has estado? Por lo menos contesta el teléfono, niña tonta.
—Lo siento, estuve conociendo la ciudad.— se excusó.
Blue entonces se dio cuenta de que en ningún momento tocó su celular desde lo ocurrido la noche anterior en ese callejón. Palpó sus bolsillos discretamente y no, no tenía su teléfono encima.
Tampoco pensó que estaría en la casa de Jungkook porque de lo contrario oiria las llamadas de Hoseok.
¿Entonces dónde lo dejó?
...
Aquel joven estaba de cuclillas en una vereda.
Con una mano sostenía un cigarrillo al cual de vez en cuando le daba una calada y con la otra inspeccionaba ese teléfono celular que encontró.
—Ya sé dónde estás maldita perra.— fue lo último que dijo antes de pararse y caminar hacia aquella dirección que había descubierto.
Taehyung sabía dónde podría encontrar a Blue.
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